Misión: Midoriya-sensei x Dynamight

Una nueva Etapa

La Academia U.A. estaba tan imponente como siempre, con sus majestuosos edificios y su atmósfera vibrante llena de jóvenes héroes en formación. Era el comienzo de un nuevo año escolar, y para los estudiantes del segundo año, este era un momento crucial para fortalecer sus habilidades y aprender de los mejores.

Himeko Suraimu caminaba por los pasillos con paso firme, pero en su rostro había una mezcla de emociones. Su cabello azul oscuro con puntas en un tono más claro con mechones de un color amarillento, caía en capas desordenadas alrededor de su rostro. Un pequeño slime, que era parte de su Quirk, descansaba sobre su hombro, cambiando de color según el estado de ánimo de Himeko.

A su lado, Kopi Kessho ajustaba sus lentes, su cabello corto y marrón despeinado por la brisa que entraba por las ventanas abiertas del pasillo. Sus ojos verdes se movían de un lado a otro, observando a los otros estudiantes, mientras conversaba animadamente con Himeko sobre las expectativas para el nuevo año.

"¿Te das cuenta? ¡Es nuestro segundo año aquí! Ya no somos los novatos," exclamó Kopi, su tono reflejando tanto emoción como nerviosismo. "Y también es el segundo año con Deku-sensei como nuestro maestro. Me pregunto qué sorpresas tendrá para nosotros esta vez."

Himeko sonrió, mientras ajustaba su sudadera negra sobre el uniforme escolar. "Sí, Midoriya-sensei siempre tiene algo nuevo y desafiante. Aunque...", hizo una pausa, su sonrisa transformándose en una expresión juguetona, "lo que más me intriga es cómo se comportará "cierto" héroe explosivo cuando venga a darnos clases desde la vista de un pro."

Kopi no pudo evitar reír. "Oh, ¿te refieres a Dynamight? Ese tipo es una bomba de tiempo, literalmente. Siempre me pregunto cómo Deku-sensei logra mantener la calma cuando están juntos."

Mientras las dos chicas se acercaban a la puerta de su aula, la conversación se detuvo brevemente. La clase 2-A estaba llena de caras conocidas, pero también había algunos estudiantes nuevos que parecían un poco nerviosos. Midoriya-sensei o Deku-sensei, conocido también como Izuku Midoriya, estaba de pie al frente de la clase, revisando algunos papeles. Aunque ya no poseía un Quirk, su conocimiento y experiencia en el campo eran inigualables, y había ganado el respeto de todos, tanto dentro como fuera de la U.A.

"¡Bienvenidos de nuevo!" Deku levantó la vista y sonrió a sus alumnos. Su voz, aunque tranquila, cargaba con la autoridad de un héroe que había salvado el mundo en más de una ocasión. "Espero que estén listos para otro año lleno de desafíos. Este año vamos a profundizar en el trabajo en equipo y en el manejo avanzado de sus Quirks, preparándolos para el mundo real donde los verdaderos héroes operan."

Mientras Deku continuaba explicando los planes para el semestre, Himeko y Kopi no podían evitar notar una sutil tensión en el aire. Aunque Deku-sensei se mantenía sereno, su mención de los entrenamientos conjuntos y, específicamente, de la participación de otro héroe en las lecciones, parecía llevar consigo una carga emocional.

"¿Te das cuenta?" Himeko susurró mientras Deku mencionaba a Dynamight, inclinándose ligeramente hacia Kopi. "Hay algo en la forma en que lo dijo... No es solo respeto profesional. Siento que hay historia allí."

Kopi asintió, sus ojos brillando con curiosidad. "¿Te imaginas si lográramos que esos dos se llevaran mejor? No solo como colegas, sino como... bueno, ya sabes."

Himeko sonrió. "¿Estás sugiriendo que juguemos a ser cupidos con dos de los héroes más poderosos de nuestra era? Suena peligroso... pero también muy tentador."

Justo en ese momento, la puerta del aula se abrió de golpe, interrumpiendo susurros y especulaciones. Katsuki Bakugou, conocido en el mundo heroico como Dynamight, entró en la sala con su habitual energía explosiva. Su cabello rubio estaba desordenado, y su uniforme de héroe relucía con una intensidad intimidante. Sus ojos carmesí recorrieron la sala, evaluando a cada uno de los estudiantes antes de dirigirse a Deku.

"Midoriya," gruñó Bakugou, "espero que no estés ablandando a estos inútiles con tus discursos. El mundo real no es un cuento de hadas."

Deku, manteniendo la calma, sonrió ligeramente. "Estoy seguro de que te encargarás de recordarles la realidad, Kacchan." Había un matiz de afecto en su voz, algo que no pasó desapercibido para Himeko y Kopi.

Bakugou cruzó los brazos, mirando a la clase con una expresión que oscilaba entre el desdén y la impaciencia. "Escuchen bien, mocosos. El segundo año es cuando las cosas se ponen serias. Si piensan que van a salir de aquí siendo héroes sin ensuciarse las manos, más vale que despierten. No me importa si Midoriya es el favorito de ustedes; cuando esté aquí, van a hacer las cosas a mi manera."

El ambiente en el aula cambió inmediatamente. Los estudiantes, aunque acostumbrados a la dureza de Bakugou, no pudieron evitar sentirse un poco nerviosos ante la intensidad de sus palabras. Sin embargo, esto solo sirvió para avivar la determinación en sus corazones. Todos sabían que para convertirse en héroes de verdad, tendrían que aprender de los mejores, y Bakugou, a pesar de su carácter, era indudablemente uno de ellos.

Mientras Bakugou continuaba hablando sobre las expectativas y los desafíos que enfrentarían, Himeko lanzó una mirada a Kopi, sus pensamientos alineados. Este año sería, sin duda, el más intenso hasta ahora, no solo por el entrenamiento, sino también por la oportunidad de descubrir más sobre la relación entre Deku y Bakugou.

Después de la intensa charla, las clases continuaron con normalidad. Durante el receso, Himeko y Kopi se dirigieron hacia la cafetería, donde los estudiantes solían reunirse para comer y compartir ideas. Sin embargo, Himeko tenía otro destino en mente.

"Kopi, ¿me acompañas al departamento de apoyo? Necesito consultar a alguien sobre una idea que tengo para mejorar mi equipo," dijo Himeko con una sonrisa un poco más brillante de lo habitual.

Kopi la miró con una ceja levantada, su expresión mezcla de curiosidad y picardía. "¿Alguien, eh? ¿No será cierto genio del departamento de apoyo, verdad?"

Himeko trató de ocultar su rubor, pero el pequeño slime en su hombro cambió de color, revelando sus verdaderos sentimientos. "Solo... solo necesito su ayuda técnica. Nada más."

"Ajá, claro," respondió Kopi con una sonrisa juguetona, siguiéndola hacia el taller del departamento de apoyo.

Al llegar, fueron recibidas por el sonido de herramientas y maquinaria. "Ryoji", el genio inventor con cabello blanco y una mente brillante, estaba inclinado sobre un banco de trabajo, concentrado en su último proyecto. Su presencia era inconfundible; sus ojos brillaban con una intensidad que demostraba su pasión por la ciencia y la ingeniería.

"Ryoji-kun," llamó Himeko mientras se acercaba. "¿Tienes un momento? Quería discutir algo contigo sobre una mejora para mi equipo de héroe."

Ryoji levantó la vista, y una sonrisa apareció en su rostro al ver a Himeko. "Himeko, claro, siempre tengo tiempo para una compañera de la U.A. ¿Qué tienes en mente?" Aunque su tono era profesional, había un matiz de interés personal en sus palabras.

Mientras Himeko comenzaba a explicarle su idea, Kopi se quedó a un lado, observando la interacción con una sonrisa que no pudo disimular. La forma en que Himeko hablaba con Ryoji, la luz en sus ojos cuando él le respondía, y la forma en que él parecía más relajado y menos enfocado en su trabajo de lo habitual, eran evidencias claras de lo que Kopi ya sospechaba: Himeko tenía un interés especial en Ryoji, más allá de lo académico.

"Será un año muy interesante," pensó Kopi para sí misma, mientras las ideas de Himeko y Ryoji fluían, creando un puente entre sus dos mundos.

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•°•Fin del Capítulo 1•°•

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