En una conferencia de prensa después de una victoria emocionante, Sergio Pérez y Max Vestappen son bombardeados con preguntas sobre su relación.A medida que tratan de evadir las preguntas,se dan cuenta de que no pueden negar más sus sentimientos.
Después de la conferencia de prensa, Sergio y Max se dirigieron a su habitación en el hotel, todavía procesando la pregunta del periodista. Aunque no se daban cuenta, la tensión entre ellos era palpable.
"¿Qué crees que quiso decir con esa pregunta?", preguntó Sergio, quitándose la camiseta y revelando su torso musculoso. Max no pudo evitar mirar, sintiendo un escalofrío en su interior.
"No lo sé, pero espero que no vuelva a pasar", respondió Max, tratando de ignorar la atracción que sentía hacia Sergio. Se sentó en la cama, intentando relajarse.
Sergio se acercó a él, su rostro a solo unos centímetros del de Max. "No te preocupes, amigo. Estamos juntos en esto", dijo, poniendo su mano en el hombro de Max.
Max sintió un escalofrío al escuchar la palabra "amigo", pero no dijo nada. En su lugar, se concentró en la sensación de la piel de Sergio cerca de la suya. La tensión entre ellos era cada vez más fuerte.
De repente, Sergio se dio cuenta de la proximidad entre ellos y se apartó, sonriendo incómodo. "Perdón, no quería invadir tu espacio", dijo, sentándose en la silla frente a la cama.
Max se encogió de hombros, tratando de parecer indiferente. "No pasa nada, amigo", respondió, pero no podía evitar sentir una sensación de decepción.
La habitación se sumió en un silencio incómodo, con solo el sonido de la televisión de fondo. Sergio y Max se miraron, sin saber qué decir o hacer a continuación. La tensión entre ellos seguía creciendo, esperando a ser liberada.
Max se levantó y se dirigió al baño, necesitando un momento para sí mismo. Mientras se lavaba la cara, no podía evitar pensar en la cercanía de Sergio, en la sensación de su piel... Se sacudió la cabeza, tratando de ignorar esos pensamientos.
Cuando salió del baño, Sergio estaba sentado en la cama, mirando su teléfono. "¿Quieres ver una película o algo?", preguntó, sin mirar a Max.
Max se encogió de hombros. "No sé, tú decides". Se sentó en la silla frente a la cama, tratando de relajarse.
La noche siguió en un silencio incómodo, con solo el sonido de la televisión de fondo. La tensión entre ellos seguía creciendo, esperando a ser liberada. Pero ninguno de los dos se daba cuenta de lo que realmente sentían. Aún.
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Se me olvidó mencionar que aquí Max y Checo no tienen sus respectivas parejas y en caso de Checo,hijos.
