If you change your mind [ym]

-Capitulo seis-

Al parecer la causa de la negligencia que provoco cierto doctor llego al tribunal regional de Seúl, y por lo que le comento su secretaria el hombre que falleció a manos del idiota de Min era un dueño de un pequeño bufet de abogados.

Esto era peor de lo que pensó, porque los noticieros y medios de farándulas ya publicaron en su sitio web que había hecho otra inversión millonaria en su negocio de comprar empresas en quiebra para ampliar su capital.

Era un empresario joven, codiciado, y estaba en el ojo del huracán. Cualquier error que cometa arruinaría su imagen, mucha gente importante nunca le ha tenido fé cuando se hizo cargo de las empresas de sus abuelos. Lo tacharon de niño rico y mimando con solo una cara bonita, diciendo a sus espaldas que le compraron su título universitario. Todos pensaron que haría que las empresas de sus abuelos se irían a la quiebra. Pero todos se retractaron cuando empezó a juntar el dinero suficiente para comprar una discoteca en quiebra, y ahora tenia cuatro en diferentes ciudades del país siendo las más populares entre jóvenes de veinte a treinta años. O cuando compro una pequeña cafetería y la renovó haciendo que sea la mas codiciada para un café mañanero.

Al parecer todo lo que tocaba se volvió oro, y ahora realmente creía que había un Dios que lo estaba recompensando con todo el daño que le causo.

Siempre supo que comprar el hospital iba a ser un dolor de cabeza, todos se lo dijeron, incluso su abuela. Se dejo ganar por el sentimentalismo y el cariño que le tenía a Shin, pero desde que el doctor se lo propuso por el simple hecho del cariño que le tenía a esa clínica por tantos años que trabajo ahí supo que no era buena idea.

Si se llegara a saber en los medios de que iba a estar en un proceso de investigación por negligencia a una persona "Importante" de Corea y que tenia que pagar mas dinero del que pago en el hospital de verdad iba a buscar un sicario para que matara a Yoongi. Porque no solo seria el hecho de pagar dinero que le ha costado tanto trabajo obtener, sino seria objeto de burla ante las personas mas importante de Corea, y seria demostrarle a todos que su suerte se acabó y estaría arruinado en la alta sociedad.

Por eso esa tarde mando a llamar a Shin y Yoongi a su oficina, un lugar mas personal y donde se sentía más seguro. Namjoon estaba a su lado revisando la causa y ver que podrían hacer. Porque a pesar de que Yoongi fue el culpable este trabajaba para él, le guste o no.

---Dime.---Le responde a su secretaria Jung, solo se sabia el apellido porque es de la única manera en que la llama, y creía innecesario saberse su nombre si sabia que la iba a despedir mas temprano que tarde por coquetearle de manera muy poco indirecta.

---El doctor Shin y Min están esperando.

Apretó su pelota antiestrés.---Diles que pasen.---Corta.

Namjoon lo miro a través de sus lentes y volvió su vista a la computadora negando con la cabeza. El también está enojado con Shin por omitirle cierta informacion, dañando la lealtad que tenían por el hombre mayor, no solo dañándola, si no rompiéndola a pedazos.

---Buenos días.---Saludaron los dos.

Miro fijamente a Yoongi por no saludarlo con respeto, lo podía aceptar de Shin, pero no de el.

---A la próxima doctor Min quiero que me salude con mayor respeto, yo soy el dueño del lugar donde usted trabaja.---Le reprocho mirándolo como si fuera un asesino serial, y tan mentira no era.---No una simple autoridad.

---Lo siento.---Murmura entre dientes, conteniendo un insulto.

Quiso reír en su cara para demostrarle que era mejor que el y que si pensó que iba a ser un simple don nadie como todos pensaban antes esperaba que ya hubiera aceptado que así no era.