El timbre sonó indicando que su no muy esperada visita había llegado.
Haerin dio un suspiro largo y se dio ánimos, sabía que la tarde sería bastante complicada gracias a su compañera.Bajó las mini escaleras y se acercó a la puerta dispuesta a abrirla, pero antes quería jugar un poco.
-¿Quien es?- preguntó.
-Danielle-
-¿Que Danielle?-
-La única que conoces, pelotuda- Haerin rio sabiendo que la chica probablemente ya estaba enfurecida, sabía que tenía muy poca paciencia.
-Ah...No hay nadie-
-Dale hija de puta, hace frío acá afuera.- habló fastidiada.
-Denegado.-
-Esta bien, entonces...- un golpe en su ventana hizo exaltar a la de ojos gatunos, había tirado una piedra en su ventana.
-¡¿Estas loca?!- Gritó asomándose por la ventana.
-Abrime porque la próxima no va a ser una piedrita, va a ser un cascote- Amenazó, logrando que la menor le abriera la puerta.-Ves que sos vos la que empezas.-
-No te aguantas ni un chiste- rodó los ojos.
-No, ¿Y?
-Bueno basta cállate, no me hagas estresar.- Dramatizó Kang, y su acompañante no pudo evitar que se le escapase una sonrisa.
-¿Podemos empezar de una vez, Kang?- reprochó danielle. -Así puedo irme cuánto antes...
-Que te haces, seguro moris por pasar tiempo a solas conmigo y no lo querés admitir- Dijo alzando una ceja.
-¡Ja! ¿Para que?- se sentó en el sillón cruzando sus piernas. -¿Para verte la cara toda deforme que tenes? No gracias, ya estoy bien con mis traumas.- Kang la miró boquiabierta, ofendida por lo que había dicho.
-Mejor empecemos a hacer las cosas antes que cometa un acto de odio hacía vos.-
Haerin y Danielle dejaron las discusiones de lado por un rato, y obvio, solo por un rato, porque después siguieron discutiendo hasta lo indiscutible. A pesar de todo, pudieron avanzar bastante con el trabajo en tan solo tres horas.
-Estoy cansadísima...- habló Marsh tirándose en el sillón.
-Yo también... Ahora vuelvo- Danielle quedó sola en la habitación de la menor. No pensaba hacer nada malo, solo se dispuso a analizarla. Era una habitación ni grande ni chica, estaba ordenada, había varios peluches en su cama y tenía un póster de lo que parecía ser el logo de Cazzu. Pudo deducir dos cosas mientras investigaba la habitación, a la menor le encantaban los peluches y era una maniática del orden.
-¿Terminaste de investigarme hasta mis pecados?- La de pelo ondulado dió un salto del susto, estaba tan distraída viendo las cosas ajenas, que no se dió cuenta que su acompañante hace un par de minutos que la estaba observando desde la puerta.
-Mogolica, me asustaste.-
-¿Te gusta el licuado de frutilla?- agitó la jarra con el líquido rosado.
-¿Lo hiciste vos?- miró desconfiada.
-Obvio, duh.- habló sirviendo el jugo en uno de los vasos que había traído y extendiéndoselo.
-¿Cómo se que no le pusiste cosas raras?-
-Si no queres no lo tomes, me chupa un huevo- dejó el vaso sobre la mesa desinteresada, tomando de su vaso. La mayor la miró dudosa, pero al final terminó aceptando el jugo, llevándose el vaso a sus perfectos labios rosados, bajo la atenta mirada de la contraria.
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She's not a Boy || Dᴀᴇʀɪɴ Aᴜ
FanfictionDónde el único motivo por el que Danielle odia a Haerin es por el hecho de ser abiertamente bisexual, mientras que Danielle era abiertamente homofóbica. Pero tal vez Haerin podría cambiar eso, aunque, ¿Se arriesgaría a salir lastimada? →Social media...