Las alas de la tragedia [ LEVI X TÚ ]

2

Pasé el resto del día y la noche encerrada en la habitación que me habían asignado, no era muy grande, pero tenía lo justo y lo necesario

La base era bastante grande, constaba de casi 4 plantas, la primera tenía un gran comedor y cocina, una parte subterránea donde habían calabozos y el resto de plantas estaban llenas de despachos y habitaciones tanto individuales como de dúo o más personas, para mi suerte me tocó una individual, aunque no sé si alegrarme porque Levi haya pensado que necesito tiempo sola por lo de mi "pueblo" o porque no se fía de mí y cree que estoy de incógnito

No se equivocaría, pero no me gustaría que pensara eso desde el día uno

Volviendo a la habitación, sus paredes eran blancas, tenía un armario pequeño en donde se podían meter uniformes, botas y capas además de alguna que otra cosa más, una silla en una esquina por si te aburres de estar en la cama y quieres sentarte y un espejo mediano en la pared, era tétrica de cojones, pero no iba a pedir mucho más

¿Lo gracioso de todo? Es que no tengo más ropa de cambio que la que tengo puesta, no podía traer ropa como si fuera de viaje porque sospecharían, pero no sé cómo lo haré para no oler a titán bestia en todo este tiempo

Miré al techo frotándome la cara y suspirando para calmar mis ideas, decidí levantarme y caminar un poco por la base para adaptarme a las instalaciones, ya que el azabache se limitó a decirme las cosas y encerrarme en la habitación como si fuera un pobre perro callejero

Me coloqué mejor mi chaqueta y salí de dicha habitación, me quedaba en la última planta, es decir, la cuarta, el despacho de Erwin estaba en la segunda planta casi al fondo del pasillo, así que iba a ser divertido robar cosas de ahí y salir pitando con las manos llenas de cosas, y lo más importante, ¿cómo coño lo sacaba yo de la muralla si no tenía el equipo? No puedo salir porque hay una piedra enorme tapando el agujero del muro y

Calma, estoy pensando demasiado sobre cosas que no van a suceder, cogeré los papeles sin que me vean, podré coger un equipo y salir arriba de la muralla, tengo dos días para hacerlo, ya que según el plan, un soldado de Marley vendrá hacia la muralla en dos días a la noche para recoger información, si aparezco, no volverá a aparecer y será un fiasco, así que tendré que centrarme

Connie: ¡Sasha ese es mi pollo!

Una voz elevada me sacó de mis pensamientos, había caminado en modo automático hasta la cocina sin darme ni cuenta de lo tan metida que estaba en mis pensamientos, habían tres soldados en la mesa del comedor, una chica de pelo marrón recogido con una cola y un muslo de pollo en la boca de una manera bastante...bueno, rara, al lado uno más bajo, calvo a mi parecer, y en el borde de la mesa uno más alto y con cara de caballo, perfecto, el trío lalala

Connie: ¡qué me lo des, tú te has comido el tuyo ya!

Este jaló un poco de Sasha, pero lo único que logró es que la morena se tragara el muslo entero de una, arquee una ceja al ver esa escena, si esta chica fuera un titán más le valía a la humanidad correr, porque más que derribar una muralla se la comería

Connie: ¡Sasha!

Sasha: perdón es que...el tuyo se veía mejor que el mío... -se excusó rascándose ligeramente la cabeza- pero puedes quedarte con mi papa, ¿quieres?

Connie: -suspiró y aceptó la papa medio caliente de la chica a regañadientes- gracias, Sasha

Mientras que el cara caballo reía, giró su mirada hacia mi, que estaba plantada en la puerta de la cocina

Jean: hey, ¿tú eres la refugiada del este? -su cuerpo se inclinó ligeramente hacia delante en la mesa- perdón por el numerito...soy Jean, él Connie y ella Sasha, somos del escuadrón 104