LA PUERTA

Un Nuevo Vecino

Una canción sonaba en la radio – ‘’ everything I Own’’–

-ÉL la cantaba con gran sentimiento que terminó llorando- le recordaba a su gran amor- ¿Por qué te fuiste?

Trataba de continuar con su vida pero le resultaba casi imposible continuar sin Katy, no entendía la manera en la que ella se había ido.

Lo que resonaba a diario en su mente ‘’Éramos tan felices, la vi sonriendo antes del impacto’’

Alguien tocaba a su puerta

-Hola hermanito como estas- al momento que se lanzaba a abrazarlo

-¿Qué haces aquí?- la apartaba de él

-Solo quería saber de ti, ya tienes tiempo en esta casa y no llamas no contestas los mensajes, así que decidí venir a verte

-Ya me viste, puedes irte- le abrió la puerta y le señalo con la mano que saliera

-¿No necesitas ayuda en nada?- ignorando el gesto

-Por favor Amanda, sal de aquí

-Antes eras diferente- se sentía herida por las palabras de su hermano- ahora eres tan cruel

-¿cruel?- sonaba molesto y levantando la voz continúo - cruel fue la maldita vida, en el momento que me arrebato a Katy

-Sé que no es fácil- sus ojos no podían contener las lágrimas- Pero portándote así no te ayudara en nada

-Ayuda- continuaba alterado- no necesito ayuda de nadie y por favor lárgate

-Pero Dan

-Vete- la tomo del brazo y la forzó a salir de la casa- no vuelvas- cerrando la puerta de golpe

Pegado a la puerta en posición de cuclillas, llorando y lamentando lo sucedido- como si el suceso hubiese tenido algo que ver con él.

Los e-mails invadían su correo- dado que había desactivado todas sus redes sociales y por el trabajo era la única que conservaba.

Cansado decido abrir algunos…

Brad: Hola Dan ¿Cómo va todo?
Sería bueno que me respondieras al menos uno, de mis e-mails, me gustaría saber de ti.

John: Sabes que cuantas conmigo Amigo

Lisa: Pensar en ti no me deja dormir, envía al menos un pulgar arriba
Sé que la vida no fue lo que planeaste pero por favor amigo, aún hay vida

-Vida, quien quiere una maldita vida sin ella- de un golpe cerró la computadora y salió al jardín
Se quedó contemplando el arbusto de lavanda, el cual era el que Katy más amaba – querida quisiera poder verte y tenerte a mi lado una vez más.

Cada que se ponía a recordarla las lágrimas llegaban a sus ojos sin darse cuenta; los días se le pasaban sin notarlo, en parte sentía que el tiempo no seguía su curso pero cada que el sol le alumbraba por la venta de su estudio entendía que un nuevo día había llegado.

Ya no estaba seguro de cuánto tiempo había pasado desde que salió por fin del hospital y que hablar de las terapias, poder valerse por sí mismo de nuevo le tomo dos años, pero ahora solo en casa ¿Cuánto tiempo había pasado?

Un día de la nada alguien toco a su puerta, no quería abrir pero eran muy insistentes

-¿Quién es?

-Soy Mario su nuevo vecino

No le quedó más remedio que abrir la puerta -¿Necesita algo?

-Para nada, solo quería presentarme

-A si mucho gusto soy Dan

-El gusto es mío-Le estrecho la mano- el viernes por la noche estaremos ofreciendo una cena para los vecinos más cercanos y me encantaría que pudiera ir

-Gracias por la invitación pero, ya tengo planes para el viernes

-Ya veo- se rascaba la nuca- entonces será en otra ocasión

-Si- cerró la puerta de golpe

Del otro lado de la puerta se quedó Mario pensando en que Dan era un grosero y regreso a su casa

-Amor ¿Cómo te fue con los vecinos?-pregunto Lucero

-Bien- al momento que le daba un beso pequeño- a excepción del vecino del 58, es un grosero

-Ya sabíamos que no todos son dulces y adorables como tú- Se regalaban un beso más

-En eso tienes razón mi amor- la abrazaba y llenaba de besos, en instante que entraban María y Carlos corriendo ‘’Papá- Papá’’ ambos niños gritaban, se separó de Lucero solo para abrazar a su hijos.

Una tarde que Dan salió a hacer unas compras, al pasar frente a la casa de Mario lo vio jugando con sus hijos, mientras su esposa los observaba y reían, lucían tan felices que sintió envidia y deseo poder haber logrado llevar esa vida al lado de Katy.

Mario se sintió observado y levanto la vista, al ver a Dan observándolos lo saludo a la distancia, Dan sin saber que hacer continuo su camino sin responder al saludo.

-¿Él es el grosero?- pregunto algo molesta Lucero

-Sí, lo es

Continuaron los juegos en familia, sin prestar mucha atención al suceso.

El viernes llego y la fiesta se llevó acabo. Mario era realmente un hombre curioso por lo que en la primera oportunidad que tuvo pregunto sobre Dan.

-A caso ¿sabe algo del vecino del 58?

-Dan, la paso muy mal, hace casi 4 años, en la noche de su boda tuvo un accidente junto a su esposa y ella murió, el quedo muy herido y estuvo casi 2 años con terapias para lograr caminar otra vez ¿no ha visto la manera en la que camina?

-No he tenido esa oportunidad, pero realmente siento mucho lo que le paso- Mario realmente lo sentía

-Sí, fue una tragedia terrible- Repuso una vecina

-En esa casa vivirían los dos, al morir ella creí que la vendería, pero en cuanto pudo volver a caminar se regresó a vivir solo- continuo el primero vecino

-Pero no habla con nadie y es muy déspota- intervino uno más

-Supongo que es el dolor de su perdida- comenzaron a debatir los asistentes-¿Es para ser tratados así?- Solo déjenlo vivir su dolor- Yo digo que necesita una distracción- Tal vez si se diera la oportunidad de salir- si debería hacer eso

-Sera mejor cambiar de tema- intervino Lucero

-Si- Mario miro a su esposa y le regalo una sonrisa

La fiesta continuo, pero Mario ya no estuvo realmente presente en ella, ‘’el dolor que pudiera estar sintiendo Dan, que duro seria todo eso para el ‘’ cosas en su mente que no le permitieron seguir conectando con los demás asistentes.

Ya después de dar fin al festejo y agradecer a todos la asistencia, dieron por concluida la celebración. Mario y lucero comenzaron a limpiar.

-Me puedes explicar que te paso

-¿Qué me paso de qué?

-Después de preguntar por el vecino del 58 fuiste otro

-A eso- suspiro para continuar- Querida ¿puedes si quiera imaginar su dolor? pensar perderte me vuelve loco

-Eres el hombre más bueno y empático que conozco- Lo abrazo y beso- pero no hay nada que puedas hacer y estar pensando en eso solo te perjudicara a ti, ya déjalo

-Si lo hare – pero no fue así, en cambio trato de buscar una estrategia para conversar con Dan