criminal husband (𝐣𝐚𝐤𝐞𝐡𝐨𝐨𝐧)

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Boypussy
Boytits

A sus cortos 21 años, Park Sunghoon podía decir que su vida era perfecta.

Se casó con el amor de su vida, viven juntos y tienen una vida lujosa. ¿Qué más podría pedir?.

Su marido Shim Jake, era un criminal astuto, tan astuto que ante los ojos del mundo era sólo un hombre millonario y corriente, nadie imaginaria que él hubiese asesinado y torturado a varias personas que hicieron algún daño y no pagaron por ello. Y es por eso que el pelinegro daría hasta su propia vida con tal de proteger a su pequeño esposo.

Literalmente salvó su vida, ya que la infancia de Sunghoon fue muy dura, no tenía relación con su familia y en su adolescencia ya era un hombre independiente. Pero claramente no era fácil.

Tenía distintos trabajos para sustentarse y seguir estudiando. El cansancio era extremo pero no podía rendirse.

Hasta que conocío a Jake.

Lo cuidó desde el primer momento, lo llevo a vivir con él a su lujosa casa y pagó sus estudios, logrando así graduarse a los pocos años.

Actualmente llevaban casi 4 años casados, Jake era lo único que Sunghoon tenía. Y Sunghoon era lo más preciado en la vida de Jake.

Por esa razón, Jake cuidaba demasiado a su pareja, porque conocía el peligro al que podría exponerse y si algo le pasará al peliblanco, no se lo perdonaría.

Ahora mismo, Sunghoon pensaba en una forma de convencer a su esposo para que le permitiera ir a una fiesta a la que su mejor amigo Jungwon lo había invitado.
Quería ir, y sin tontos guardaespaldas que lo siguieran por todos lados.

Suspiró, y tocó la puerta de la oficina de Jake.

- Pasa, amor. -se escucho del otro lado-.

Giro la perilla y entro, cerro la puerta tras suyo y camino lentamente hacia su marido, viendolo concentrado rellenando unos papeles.

La oficina de Jake en casa era bastante amplia, con un escritorio y un mueble. Y un closet donde tenía un montón de armas.

- ¿Estás muy ocupado? -murmuro el peliblanco una vez estuvo cerca del mayor-.

- Para tí no. -respondio sonriendo-. Ven aquí. -palmo sus muslos-.

Inmediatamente Sunghoon obedeció y se sentó en las piernas del mayor, sintiendo a este abrazar su cintura y él enrollo sus brazos en su cuello, jugando con el cabello oscuro.

- ¿Ocurrió algo, bebé?

Sunghoon negó.

- Sólo...quería preguntarte algo. -dijo después de unos segundos-.

- Te escucho.

El peliblanco mordió su labio, un poco nervioso.

- Jungwon me dijo que hay una fiesta está noche en la ciudad. -explico- ¿Podría ir?

- Claro, pequeño. -accedio con simpleza-.

- ¡¿En serio?! -pregunto en un gritito, sorprendido-.

- Sí bebé. -respondio riendo levemente, dejando un besito en los suaves labios de su pequeño-. ¿A qué hora es? Debo decirles a mis hombres para qué-

- Quiero ir sólo. -dijo interrumpiendo-.

Inmediatamente la expresión de Jake cambio.

- ¿Qué?