El castaño de ojos heterocromaticos se preparaba para otro día normal, otro día común como otros. Despertar, estar en esas aburridas clases para luego irse, aunque, hoy era un día con una actividad para el, pero antes, encontró otra nota en su casillero... ¿Quién será el responsable de todo esto?
Al salir del colegio fue directo a su casa, para cambiarse de atuendo a uno más cómodo y a la moda, un short de mezclilla junto con una camisa rosa pastel y un suéter blanco, sin olvidar sus converse negros. Agarro su bolso blanco dirigiéndose al auto donde un chófer lo esperaba, sonrió y se subió, siendo llevado al lugar. Mientras el auto avanzaba veía por la ventana, no es que hubiera algo fuera de lo habitual, pero tampoco es que tuviera algo que hacer en el camino, solo esperar por llegar lo más pronto. Al parecer escucharon sus plegarias, pues hoy no había mucho tráfico llegando más rápido, se despidió para ver el café emocionado, entro para ver las lindas decoraciones de Hello Kitty y otros personajes, llegó a la mesa con sus amigos, empezando a platicar mientras esperaban la comida, aunque, sintió como Lucasta acercaba su mano hacia la suya, causando un sonrojo leve.
Una sonrisa se formó en sus labios, disimulando un poco muy mal. Por suerte sus amigos eran tarados y no se dieron cuenta, en cuestión de 30 mintió llegos la comida.
Tranquilizadad, esa era la palabra exacta para describir lo que pasaba ahora, suspiró aburrido, el amaba la tranquilidad pero odiaba ese silencio incómodo, intento seguir comiendo, pero ese sentimiento de incomodidad no se fue por toda la salida, a pesar de qué cuando acabaron de comer volvieron hablar, seguía ese sentimiento.
Mejor ya se iba.
A la mañana siguiente, se estiro dando un gran bostezo, para darse cuenta que había manchado la cama, soltó un quejido de frustración y quitó las sábanas «maldita sea la puta menstruación, que alguien me diga que tipo de naturaleza es la que te hace sangrar 5 veces al mes causando dolores y malestares.» se dijo a si mismo mentalmente, así darse un baño rápido y alistarse para la escuela. El no sabía que hacer, estaba perdido, desde hace tiempo sentía como su vida había dado un giro 360° desde hace 3 meses, se sentía solo y abrumado por cualquier cosa, aunque estuviera rodeado de personas y amigos, sentía esa soledad constante, al llegar a la escuela abrió su casillero, para encontrarse con otra carta «Como molestan ¿Será una broma?» mentalmente insulto al responsable de esto si se trataba de una broma, aunque las palabras en esa carta eran muy lindas y hermosas... Llenándolo de alagos haciendo que se sintiera mejor, solo faltaba enamorarse de alguien que no sabía quién era, ni siquiera tenía las pelotas de poner su nombre en la maldita carta.
Fue hacia las clases, a lo menos siendo visto por una figura enamorada.
Al final de clases se paseaba por el campus, hasta que se topo con su amiga Nene, la saludo con alegría, está le contesto algo seca pues estaba estresada por los exámenes, le dio un abrazo provocando leve sonrojo en la peli-rosa, sin más remedio la chica mayor acepto el abrazo, despeinando con su mano el cabello rebelde del más bajito, con una risita los dos fueron por caminos diferentes.
A lo mejor... Nah, bueno, sigamos con lo que estaba, caminar no es lo más divertido que he hecho pero no me quejo, estaba concentrado en mis pensamientos hasta que mi amiga Emikukis me abrazo por detrás cargándome, yo me intente negar pero ella era más alta y fuerte que yo, di un suspiro abrazándola resignado, para luego establecer una corta conversación. Realmente no tenía nada de que hablar.
Todo iba bien hasta qué, un chico de tercer año, alto, pelo claro y ojos cafés, qué traía un suéter morado pastel con mangas amarillas se le acercó nerviosamente.
—Am, disculpa ¿Se te ofrece algo?—Pregunto Soarinng, mirando a los ojos a el chico.
—E-em... Y-yo... Q-querer d-darte carta...—Dijo con un acento notoriamente frances o británico, no sabía distinguir. Al parecer hablaba muy poco español.
—
A letter? Thanks I guess, my name is Soarinng.—Intento hablar inglés, no era su fuerte, pero si lo hablaba bien.
—I'm Kenny, sorry for not speaking Spanish well, I'm not from here, I'm from France and Spanish is complicated for me.—
—Well, thanks, I have to go.—
—Bye, have a nice afternoon.— Esa fue su última palabra antes de retirarse.
Denme ideas, plis.
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𝗠𝗮𝗿𝗴𝗮𝗿𝗶𝘁𝗮𝘀 🌼
Romance-"¿Qué es esto?"- Todos los días, Soarinng encuentra cartas o rosas en su casillero. No sabe quién las mando, ¿quién habrá sido? -¿Locochon? No, el y yo terminamos.- -¿Aquino? Probablemente no.- -¿Duxo? Menos, es un mamón conmigo.- ¿Quién fue? ¿Y po...