Rojita.

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Hace un mes de la partida de Chloe y estoy a punto de volverme loca.

El reloj se descompuso y mi madre me lo quito y ahora no tengo como volver a verla.

La extrañaba demasiado, había recaído en las autoleciones, comía muy poco y siempre estaba acostada en mi cama sin hacer nada más que llorar.

Sentía que estaba muerta en vida, pero como seguir ¿Si el amor de mi vida ya no está?

Ella fue quien me enseñó lo que era el amor pero ella ya no estaba.

Al segundo mes fue mi primer intento.

Tome un frasco de pastillas, no sé cuántas exactamente, pero demasiadas para empezar a ahogarme pero me encontraron, por desgracia.

Tercer mes.

Mi segundo intento fue clavar una hojilla en mis venas, también me encontraron y me privaron de cualquier objeto afilado.

Estaba con mi madre quien me vigilaba, pero yo ya no quería vivir, no tenía sentido.

Sin ella nada tenía sentido para mí.

Solo quiero volver a escucharla decirme "rojita"

Pase noches en vela, lamentandome, ¿Por qué ella y no yo? ¿Por qué no me dejaban ir con ella?

Era lo único que deseaba.

Así como último intento, esperando que de resultados me lance de mi terraza.

Pensé que había funcionado pero desperté un mes después en un hospital.

La muerte me odiaba.

Fuí internada en un hospital psiquiátrico, mi estadía al principio fue horrible pero después de las terapias todo se sintió un poco mejor.

Entendí que Chloe no iba a volver y por mucho que yo quisiera irme con ella, Chloe se culparía siempre por eso, simplemente por ella dejé de intentarlo.

Mi felicidad nunca estaba completa, el único día que fuí feliz fue cuando nació mi pequeña hija, Chloe.

De cabellos rojos y ojos miel, era idéntica a mi.

Fue mi tesoro más preciado a partir de ahí.

Y cada un año iba al cementerio a hablar con Chloe, y le hablaba de mi pequeña.

Se que Chloe la amaba tanto como yo.

Un día por fin pude volver a encontrarla.

No supe exactamente que sucedió solo se que dónde estaba, estaría bien y feliz, completa.

Oh claro que sí. Y más cuando ví una cabellera rizada correr hacía mi. Y otra vez tenía veintiun años que fue cuando se fue.

Corrí a abrazarla, Dios cuánto había extrañado esto.

— Hola rojita. He estado esperándote. ¿Lista para terminar lo que empezamos?

Otra vez pude escucharla decirme rojita, pero no entendí a qué se refería, así que solo la seguí.

— Princesa ¿Cómo así?

— He estado esperándote para reencarnar juntas y siendo esas chicas lograremos amarnos sin límites. — dijo y pego su frente con la mía para después besarme.

Cuánto había extrañado esto.

Estaba lista para una nueva vida.





———————






Soy Kylie Cantrall y hoy es mi primer día de escuela, estoy realmente emocionada.

Iba caminando pero me distraje y choque con alguien.

— Oh disculpa no te vi. — dije a una chica de cabello rizado y hermosos ojos chocolate.

— Descuida yo también estaba distraída, ¿Eres Kylie? ¿No? — me preguntó la otra chica, ¿Cómo sabe quién soy?

— Eh si ¿y tú eres?

— Soy Malia. — dijo sonriendo y ofreciendole su mano como saludo.

Malia. Hermoso nombre, me acordé que ese nombre sale en la lista de mi compañeros ¿Será?

— Ah somos compañeras ¿No? — dije aceptando su mano. Sentí algo extraño, pero increíble, como una electricidad recorre mi cuerpo.

— Si, sabes siento que te conozco de antes, que raro.

— Si yo también lo siento, que extraño, pero bueno vamos entremos. — dije y entramos juntas agarradas de las manos.

Este iba a ser un año interesante...





•••

Una "segunda parte" de este one-shot posiblemente haga una historia corta de como fue que avanzo la relación de Kylie y Malia, pero eso sí, tomará tiempo, no soy tan buena escribiendo, pero haré lo mejor que pueda :D



Angels cryDonde viven las historias. Descúbrelo ahora