A Genya se le aplastó el corazón. No sabe si fue porque Muichiro sabía lo que era la vela y lo que significaba para ellos o porque no quería el rechazo de Muichiro.
Llegó a la conclusión de que eran ambas cosas. Definitivamente ambas cosas.
Muichiro también estaba alterado. No tan vívidamente como Genya, pero alguien podría notarlo si estuvieran de cerca. Ambos pensaban demasiado antes de hablar, y nadie habló durante un rato. No dejaban de mirarse, demasiado asustados para decir algo que interrumpiera el incómodo silencio en el que se encontraban. El único sonido que llenaba la habitación era el de la combustión de la mecha, que en ocasiones producía suaves crujidos y estallidos.
El primero en hablar fue Muichiro. "Entonces, ¿es así?"
Ambos sabían la respuesta. Pero Muichiro quería oírla, quería oír a Genya decirla.
Genya asintió lentamente y bajó la mirada. No podía atreverse a mirar a Muichiro cuando lo dijo.
"S-Sí... lo es".
Genya sintió que sus piernas flaqueaban. No quería perder a su mejor amigo. No quería disgustar a Muichiro con la idea de estar con él. La idea de estar con un tipo como Genya, alguien que no es perfecto y puede ser un completo desastre e idiota. Muichiro no se merece eso. No se lo merece. Muichiro se merece algo mejor, mejor que Genya. Las lágrimas comenzaron a llenar sus ojos. Genya no podía que estaba llorando hasta que cuando se limpió la mejilla, estaba húmeda. Fue entonces cuando se quebró.
"Lo siento. Lo siento, lo siento mucho, Muichiro, no sabía cómo decírtelo cuando lo oliste. Tenía miedo de que pensaras que era raro o que dejaras de ser mi amigo porque soy un maldito perdedor..." Genya sintió de repente que su torso era rodeado. Abrió los ojos que antes había cerrado para detener el flujo de lágrimas y vio a Muichiro abrazándole. Genya se quedó mirando al chico. Todo estaba en silencio. Esta vez fue Genya el primero en romper el silencio.
"¿Muichiro...?"
"Cállate. Ninguna de esas cosas que dijiste son verdad, aunque tal vez eres estúpido por pensarlas. Eres... increíble Genya." Muichiro miró a Genya, su rostro carente de emoción estaba presente pero Genya sabía que eso no significaba que no le importara. De hecho, él sabía cuánto le importaba a Muichiro ahora.
La respuesta era: mucho.
Mucho, joder.
Tanto que dolía.
Muichiro no quería admitirlo. No quería perder a otra persona cercana a él. No podía volver a hacerlo, y con el trabajo de ser un Pilar, no está exactamente garantizado que sobrevivas. Eso era lo que le dolía a Muichiro. Que él sería el que dejaría a alguien atrás esta vez. Que dejaría atrás a Genya.
Su alma gemela.
Muichiro odiaba la idea de tener a alguien. No quería dejar que estos sentimientos se interpusieran en su camino. Tendría más voluntad de sobrevivir por alguien, esto lo haría descuidado con sus deberes. Y odiaba ser descuidado.
Pero no odiaba a Genya.
De hecho, la vela hizo que Muichiro se diera cuenta de que le gustaba. En un principio pensó que Genya era una molestia como esa persona con quien compartía el mismo apellido, pero cuando se hicieron amigos es cuando hizo clic. Él lo ama. Ama a Genya.
Lo amaba tanto que no quería lastimarlo muriendo.
Muichiro nunca había estado tan confundido.
"Entonces... ¿no me odias?" La voz de Genya atravesó los pensamientos de Muichiro. Genya parecía asustado, sin saber si Muichiro sentía lo mismo o no.
"No idiota, no te odio, pero me estás poniendo de los nervios creyendo que lo hago". Muichiro gimió. Continuó abrazando a Genya. "Es raro, esto es raro y da miedo, pero no te odio por ello". Muichiro se separó del abrazo y tomó la mano de Genya, alisándole las asperezas de la piel.
Genya miró fijamente a Muichiro. Sonrió y resopló. "Haremos que funcione de algún modo, ¿Sí?".
Muichiro asintió. "Sí".
Los dos se quedaron allí hasta que a Genya se le ocurrió una idea. Una idea estúpida. "Oye, ¿quieres... preguntarle a alguien qué opina de la situación?". Los ojos de Muichiro se abrieron ligeramente.
"¿Preguntar? ¿Quién se tomaría esto en serio?" Genya sonrió.
"¡Conozco al tipo adecuado!"
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Tanjiro miró a los dos chicos confuso. De hecho, todo el grupo los miraba extrañado.
"Así que... ¿tú y Genya son almas gemelas?" Preguntó Tanjiro.
"Sí." Respondió Muichiro.
"¿Y lo sabes por una vela que te dio Shinbou?".
"Si..." respondió Genya.
Tanjiro tarareaba mientras pensaba. De repente sonrió y les hizo un gesto con el pulgar hacia arriba. "¡Bueno, felicidades!"
Zenitsu esbozó una pequeña sonrisa y le dio unas palmaditas en la espalda a Genya. "¡Sí! No sabía que fueras capaz de salir con alguien remotamente guapo!".
Genya intentó golpear a Zenitsu, pero falló. Gimió molesto. "¡Cállate! ¡Y no estamos saliendo!"
Tanjiro levantó una ceja. "¿Pero son almas gemelas?"
Muichiro asintió. "Sí, pero no sabemos qué debemos hacer ya que ambos tenemos miedo de lo que pueda pasar. Así que necesitábamos conocer la perspectiva de otra persona sobre la situación".
Zenitsu se cruzó de brazos. "Así que lo que estoy oyendo es... ¿quieren que les digamos si deberían salir o no?".
Tanjiro frunció un poco el ceño. "¡Eso no es algo que debamos decidir por ustedes!".
Inosuke se rió y agarró sus dos espadas, desenvainándolas. "¡YO DIGO QUE LUCHEN PARA VER SI DEBERÍAN SALIR O NO!"
Genya se estremeció. "¡No voy a pelear con Muichiro! Sólo... por favor Tanjiro... cualquier cosa ayudaría..."
Tanjiro suspiró. "Bien... supongo que ustedes dos deberían..." Tanjiro miro a los dos idiotas con almas atadas. Sonrió y golpeó un puño contra la palma de su mano. Tenía una idea.
"¿Por qué no pasam el rato juntos?"
Muichiro miró a Tanjiro como si su respuesta fuera la mierda más tonta que jamás hubiera oído. "Pasamos el rato todo el tiempo. ¿Qué lo haría diferente?".
"¡Que los dos saben que sienten algo el uno por el otro!".
Muichiro se sonrojó. "Eso... está bien".
Genya sonrió y agarró la mano de Tanjiro. "¡Gracias Tanjiro! Ahora saldremos de dudas. Muchas gracias, chicos".
Genya tendió la mano para que Muichiro la tomara. Muichiro miró la mano y luego a él.
"¿Vamos? ¿A una... cita?" preguntó Genya.
Muichiro suspiró y la tomó. Una suave sonrisa sustituyó a su expresión plana. "Sí. Tengamos una cita".
Los dos salieron de la mansión mariposa cogidos de la mano.
Así no es como Genya se hubiera imaginado que iría el día de hoy.
Pero no está enfadado por ello.
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Bonus:
"¡NO PUEDO CREER QUE GENYA HAYA EMPEZADO A SALIR CON ALGUIEN ANTES QUE YOOO!"
"Zenitsu... por favor baja la voz, estoy tratando de dormir."
"Lo siento, Tanjiro..."
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Canela Resplandeciente - Genmui
FanfictionShinobu no se lo pensó mucho cuando le dio una vela que encontró en una de sus misiones al nuevo recluta del cuerpo; Genya Shinazugawa. Venía con una historia tonta, que solo tu alma gemela podía percibir el aroma de la vela, y una vez que lo oliera...