➠TARAXACUM - Errorink...

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A la mañana siguiente, el de bufanda azul se despierta con una muy extraña sensación de bienestar aún en el frío ambiente. Un rico olor además le hizo sentir ganas de levantarse, se trataba del desayuno.

Lo pensó muy bien, y la verdad se arrepintió con respecto a bajar ya que esa casa no era suya y se sentía más como un intruso que como un invitado. Sin embargo, no iba a ser dejado ahí así como así, sus nuevos amigos se comportaban demasiado bien con él, tanto que le daba miedo.

--- Hey, toc toc. Nightmare dice que si no bajas a desayunar te puedo cargar como bebé hasta el comedor de todos modos.--- Horror asoma su rostro sonriente y golpea la puerta.

Error se sobresalta un poco juntando las rodillas y apretando su bufanda como niño nervioso, asintiendo. Apenas se levanta, el más alto decide que de hecho si quiere cargar a Error, por alguna razón le gustaba cargar a sus amigos, se sentía fuerte.

--- Ah...¿no peso?---

--- Bro, estás huesudo igual que los demás aquí, eres ultra liviano, no te angusties.--- Horror se ríe un poco de la situación y al llegar al comedor, sienta a Error en una silla cual bebé, dándole palmaditas en su cabeza.

Nightmare estaba encargado de la cocina el día de hoy, el desayuno eran panqueques blandos con frutas, y miel de maple si alguien quería echarle a su plato. Por supuesto nos referimos a Killer, él tiene un problema con eso de comer azúcar, simplemente le gustaba demasiado.

El esqueleto de una cuenca nota la expresión de Error al ver su plato y lo miró a la cara como mamá regañona.

--- No hagas esa cara. Come, te trajimos aquí nosotros, no te sientas tan incómodo.---

--- Eheh...bien..--- El de marcas azules come su desayuno y nota que de hecho Killer había terminado de comer bastante rápido, cuando se dio cuenta, estaba en la sala jugando video juegos con Dust.
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De vuelta con Ink, su departamento aun se encontraba silencioso, todavía no despertaba porque su noche fue comparable con la de un perro callejero con frío y miedo. Seguía desplomado en el sofá con el teléfono caído sobre una parte de las cobijas que tocaban el piso.

El artista seguía sin despertarse para nada y de hecho su teléfono tenía más de 20 llamadas perdidas provenientes de sus amigos, estaban preocupados por él que no respondía llamadas a sabiendas de que siempre lo hace, y aún más a días del entierro de Blue.

Golpes fuertes en la puerta de su departamento lo despertaron finalmente. De un brinco se levanta del sofá estirando dolorosamente su espalda y luchando por caminar recto, estaba algo mareado por haberse quedado desparramado en una sola pose toda la noche, no se le veía bien.

---¿Quién...?--- Ink pregunta sin ganas desde la puerta.

---¿Ink, hola? Somos Cross y yo de nuevo, ¿todo bien? Es que no respondías al teléfono...--- Dream habla con algo de angustia desde el otro lado de la puerta. Iba de la mano con su novio.

El artista da un silencioso suspiro del otro lado de la puerta y piensa en qué hacer con el desorden que dejó la noche anterior. Había cobijas desparramadas sobre el sofá, almohadas y su aspecto de no haber dormido no ayudaba mucho a disimular nada.

--- Todo bien, sólo estaba dormido hasta esta hora...--- Ink hace una corta pausa bostezando y tallando sus cuencas.--- En un momento les abro, es que el desorden de aquí está para morirse.---

Dicho y hecho, el artista decide ponerse una sudadera y quitar las cobijas para acomodarlas en su cama, lava un poco su cara y prepara algo de café para sus amigos. Disimular que estaba deprimido le era imposible así que no haría mucho esfuerzo en hacer eso.