¡Date cuenta! |Tsukkiyama|

Cap 9

Los días pasaban y los sentimientos y celos del de lentes se hacían más fuertes, ya habían salido de vacaciones así que su amado no podría ver a Oikawa pero siempre le contestaba los mensajes, y lo sabía por que su amigo de pecas siempre le contaba sobre el cosa que ya lo estaba empezando a irritar.

"¿Debería declararme a Tadashi?"

Esos pensamientos carcomían la cabeza de Tsukishima desde que salieron de vacaciones, ya no veía a su amado todos los días y no podía poner una excusa tonta para ir a verlo.

Quería decirle sobre sus sentimientos en ese momento y que nadie más lo viera, tenerlo solo para él, aunque eran pensamientos bastante infantiles lo pensaba seguido.

El campamento estaba a la vuelta de la esquina y no sabía que iba a hacer con Oikawa, las palabras que le habían dicho resonaban en su cabeza una y otra vez.

"Diablos"

No podía más con el encierro y le pidió a Yamaguchi verse.

:Tadashi
:¿No quieres ir a comer un helado?
:Yo te invito ;)

El rubio estaba emocionado, su amigo nunca le decía que no a salidas con él pero sentía que faltaba algo en esos mensajes.

:Te extraño

Sintió un ligero cosquilleo en su estómago, se sentía como una colegiala tratando de conquistar a su amor platónico de la escuela.

Al otro lado de la pantalla se encontraba un peli-verde pataleando en su cama al leer el último mensaje de su amigo, estos últimos días se dio cuenta que había estado actuando más amable y ¿cariñoso? de lo normal, aunque trataba de negarlo sus sentimientos sellados por el rubio querían salir.

:Yo tambien te extraño mucho Tsukki!!
:Clqro y je iré contigo
:Cairo*
:que*
:CKAEO*
:CLARO*
:Perdón es que estoy muy emocionado, hace muchísimo no nos vemos
:Como una semana :(
:Y que tú me invites lo hace muy especial!!

Yamaguchi miraba su pantalla pensando si enviar el mensaje que tenía escrito o no.

:Te quiero mucho <3

Aventó su celular lejos de él esperando que Kei se lo tomara bien, sentía nervios en su estómago.

"¿El corazón fue mucho?" "¿Habré sido muy infantil?" "Estoy actuando muy infantil por un mensaje"

De pronto escucho una notificación en su celular asustándolo más.

:Yo también te quiero Tadashi <3
:Te parece si vamos mañana?
:Te re cojo en tu casa
:Recojo*

Lo que el peli-verde no sabía es que al otro lado de la pantalla se encontraba el rubio muy sonrojado por los mensajes que acababa de mandar, se acostó en su cama con su cara aún ardiendo por la vergüenza, dudo sobre haberle enviado el corazón a su amigo por que le parecía muy vergonzoso pero al final lo hizo, haría lo que fuera por Tadashi.

Pensaba sobre si declararse sería buena idea, quería hacerlo pero temía demasiado sobre la respuesta del pecoso.

"¿Y si me deja de hablar?" "¿Y si yo no le gusto y me odia para siempre?"

Esos pensamientos le carcomían la mente pero no podía guardárselo para siempre, se convenció a sí mismo que Tadashi no le diría nada feo ni le dejaría de hablar, en el peor de los casos le rechazaría y las cosas seguirían igual.

"Mañana me declararé"

Los colores se le subieron al rostro nuevamente, no tenía idea de cómo declararse a alguien, nunca lo había hecho pero quería que fuera especial, así que no tuvo otra opción que recurrir a su hermano.

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Era el día siguiente, Tsukishima se despertó temprano, aunque no pareciera los nervios lo carcomían por dentro, hoy se le iba a declarar a su mejor amigo, la persona que había estado con él desde que eran niños, podría tener un final muy triste o un final feliz.

Se arregló lo mejor que pudo luciendo con ese toque casual, quería verse bien ante su amado, su hermano le había aconsejado que le comparaba flores y que mejor lo llevara a un restaurante.

"Espero que estas flores le gusten"

Tsukishima escogió los lirios amarillos por que sabían que esas flores le gustaban a su amigo, alguna vez le había contado sobre eso, cosa que no se le olvidó al rubio.

:Dashi ya voy para tu casa
:Llego en 10 minutos

Trataba de mantenerse calmado, aunque su mente lo estaba traicionando cada vez más, agarró su mochila, las flores y se revisó una vez más en el espejo antes de salir, caminaba tranquilo mientras sentía unos ligeros cosquilleos en su estómago no quería preocuparse.

:Ya llegué :)

Tocó el timbre apretando ligeramente las flores que traía en sus manos, la puerta se abrió dejando ver a un peli-verde sonriente por ver a su amigo, su expresión cambió a confusión al ver que el mayor tenía flores en sus manos.

—¿Por que traes flores?— su corazón se estrujó —¿S-se las vas a dar a alguna chica?— las palabras le costaban salir.

—Claro que no tontito— Soltó una pequeña risa causando aún más confusión en Yamaguchi —Son para ti— le dio la mejor sonrisa que pudo.

Tadashi no podía creer nada de lo que su amigo le decía, le parecía imposible que una persona tan genial y linda como lo era Kei le regalara algo tan bonito, siempre le había parecido difícil de creer que alguna persona se interesara en él y que su amigo le diera tan lindo detalle hacia que sus ojos se cristalizaran.

—Son tus favoritas Tadashi— Era cierto, Yamaguchi no había notado que eran sus flores favoritas.

"Recordó cuáles eran mis favoritas"

Esto solo hizo que el pecoso quisiera llorar a mares pero no era el momento así que trato de controlarse lo más que pudo.

—M-muchas gracias Tsukki— Tomo las flores y las empezó a ver con mucho amor —De verdad gracias— Abrazo a su amigo fuertemente, sentía que lo necesitaba.

—No hay de que Dashi— con una cálida sonrisa le devolvió el abrazo.

—Pero ¿por que me das flores Kei?— se alejó ligeramente.

—Es que hoy es una noche especial, decidí que mejor iremos a un restaurante, no es elegante pero sí muy lindo— trataba de controlar sus nervios aunque no era notorio.

Por otro lado el pecoso estaba confundido, no entendía por que su amigo estaba actuando tan extraño, le diría algo importante pero no descifraba que era.

"Sería muy lindo que me dijera que le gustó"

Se dijo para sus adentros, en su interior quería que pasara eso, que hubiera alguna posibilidad aunque sabía que no era posible.

"Deja de pensar esas tonterías Tadashi, tal vez te diga que ya tiene novia y no te hablara nunca más y esta sea su última salida juntos, compórtate"

—¿Nos vamos?— Le dedica una linda sonrisa, una sonrisa verdadera que solo sacaba cuando estaba con el.

—¡A-ah sí!— Empezaron a caminar dirigiéndose hacia el restaurante.

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