El encuentro con Horus Black
Yumeko – oye Emoa ¿qué sabes de los demonios alados?
Emoa – solo sé que no les gustan los crucifijos y el agua bendita, la verdad dudo que eso sirva, Yumeko déjamelo a mi tengo una cuenta pendiente
Yumeko – bien yo me ocupo de las patrullas
Salta y empieza a volar para atacar a las patrullas, antes de seguir cabe decir que las parejas que ya habían tomado el control de unos anti aéreos, se fueron a terminar la carretera, volviendo con Emoa y Yumeko, Horus Black mira fijamente a Emoa
Horus Black – espero que esta vez no huyas
Emoa – veamos quien de los dos sale huyendo
Horus Black – de aquí no sales viva -lanzando unas ráfagas cortantes-
Emoa – -salto y ruedo- estuvo cerca -empiezo a correr hacia el mientras materializo mi atuendo de combate, y saco una pistola para comenzar a distraerlo-
Horus Black – -cubriéndome con las alas, y lanzando ráfagas cortantes- donde he visto esa armadura, si no mal recuerdo en los escritos del mundo antiguo, no creo que sea -elevándome y lanzando ráfagas cortantes- pero quizás el brujo Sorkin sepa algo de ella -viendo que salta a la altura que estoy- imposible
Emoa – -disparándole cuatro veces- no perforan su piel -aterrizando y esquivando otras ráfagas cortantes- ¿Yumeko cómo vas?
Yumeko – dame un momento -destrozando al último de la patrulla- estoy libre ocupas mi ayuda
Emoa – este tipo es resistente al daño por armas de fuego, tienes alguna idea
Yumeko – -cargando mis cañones- intentare algo -voy volando hacia él y le pongo los cañones en el pecho- haber esto debe funcionar
Horus Black – -salgo disparado hacia el suelo- jajaja sus armas no son nada, eso ni un rasguño me produjo -lanzando 4 ráfagas continuas-
Las chicas evaden el ataque con tiempo…
Yumeko – empiezo a creer que es un demonio católico
Emoa – no creo su nombre suena más a los del desierto de áfrica, los egipcios, ¿puedes distraerlo?
Yumeko – -acercándome para golpearlo con mis garras, solo alcanzándole a dar tres cortes- este tipo es duro
Emoa – oh sagrada daga del progenitor dame tu fuerza para eliminar el mal -una daga dorada es materializada en mis manos- hey idiota a ver si sigues en pie después de esto
Ella corre hacia él y salta dándole con la daga en el hombro derecho encajándosela, Horus Black enfurece y con el cuchillo daga con su mano derecha se la extrae esta aun sostenida por Emoa empujándola al suelo, para así retirarse dejando desprotegida la torre de comunicaciones, las dos se dirigen a poner la memoria que les dio Narumi para así tomar control de las comunicaciones, solo Yumeko dice…
Yumeko – y a si sintió el verdadero terror
Emoa – jajaja -introduciendo la memoria en el puerto en el panel de control-
Se carga un Hackeo en el cual le da acceso a Narumi quien sin dudar conecta la señal al Bunker…
Emoa – ahora que, vamos a regresar o nos quedamos a cuidar
Yumeko – yo diría que regresar, pero hay que comunicarnos con Narumi -llamando a Narumi por la radio- oye Narumi ¿qué es lo siguiente que tenemos que hacer?
Narumi – a partir de ahora tendremos que proteger la torre, enviare una pareja con suministros, no tardaran mucho en llegar, por cierto, les llevaran equipo para acampar -dejando la radio-
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Ellend, La Tierra de Pruebas
ActionOh querido lector está es la historia de unos cuantos guerreros que terminaron aquí sin recuerdos de batallas pasadas un reseteo que sufrieron por cierta chica que usaba sus habilidades indiscriminadamente, si tienes tiempo de leer, te lo agradecerí...