cosas que se me ocurren

Hora de karaoke 🎤

— ¿listo Casey? — pregunta Mikey, que sostenía un micrófono.

– Mikey yo nací listo para todo – comento Casey que puso su brazo alrededor del cuello de Mikey como juego separando se en unos segundos.

— 3, 2, 1. !Préndelo gatito! — esa fue la señal para que el minino de helado prendiera una máquina de karaoke, lanzando un micrófono a Casey, el cual lo agarro sin problemas.

Más o menos, ya que primero lo golpeó en la frente y lo agarro. El tema musical que se puso fue '¿Yo que soy¿' de Pimpinela. ¿Por qué?, esa es una buena pregunta, tal vez porque querían vivirlo como si hubieran sufrido un divorcio como una señora de 40 años.

La señora dolida aquí iba a ser nuestro lindo niño Mikey.

— ¿Yo que soy?, ¿Yo que soy?
¿Que lugar ocupo hoy?

¿Soy tu amante?, ¿Soy tu amiga?, ¿Soy una desconocida?~

Le reprochó Mikey como una señora dolida, con su gato en su hombro dándole una seña de amenaza a Casey.

— ¡Dime estando ella que hago yo en medio de tu vida!

¿Quién da más, quién da más?
¿Quién se queda?, ¿Quién se va?~

¡Tu mujer o tu querida!, ¿Quién es la favorecida?~

Lanzando fotos de ellos dos en la cara, cuando hicieron pendejas, como si fueran de una pareja en citas.

¡Si no te decides seré yo está vez quien lo decida!

Mientras sonaba la música de fondo, Casey se prepara para cantar su parte de hombre arrepentido al saber que descubrieron su engaño. Tomado una de las fotos del suelo, acercándose a Mikey tomando su mano.

— Esto no es un juego, aún no es el momento. Ten un poco de confianza ~ — tratando de abrazar a Mikey y viendolo con una cara aflijida, como si buscará el perdón como un señor con su mujer.

Pero Mikey se hizo el difícil, apartando a Casey de él, mirándolo con un desprecio fingido. A lo cual gatito helado, que estaba en su tazón en el sofá, comía galletitas viendo el drama que se cargaba su dueño, 'esto se a poner bueno'.

— ¡Yo ya no te creo, se acabó el tiempo, cumple ya con tu palabra!~

Mientras Casey, seguía con su actuación.

— Pero si me apuras, pero si te pierdo, ¡todo ha sido para nada!

Ya no habrá pasado, ya no habrá futuro.

¡Yo quiero estar contigo, para siempre te lo juro!

Le canto Casey, que trataba de abrazar de otra vez a Mikey, como si estuviera arrepentido de un engaño que cometió, pero Mikey solo se alejo de el sin que lo tocara, continúa do con su parte de doña dolida.

— ¿Yo que soy?, ¿Yo que soy?, ¿Que lugar ocupo hoy?~

¿Soy tu amante, soy tu amiga?, ¡¿Soy una desconocida?!

¡Dime estando ella,qué hago yo en medio de tu vida!

Grito con fuerza, reclamándole, mientras se acercaba de manera severa apuntando con su dedo.

¿Quién da más, quién da más?, ¿Quién se queda, quien se va?

Tú mujer o tu querida, ¿Quién es la favorecida?

Si no se lo dices, ¡seré yo está vez quien se lo diga!

Le seguía apuntando, pero ahora fue más con un tono de amenaza en su voz. A lo cual Casey, sonríe por las estupideces que se les ocurre cuando nadie está, siguiendo con u actuación.

— ¡Es una locura yo te lo prohíbo!, ¡¿Que vas a ganar con eso?!

Le seguía suplicando, pero en una acto nuevo, Casey agarro a Mikey de su costado para que estuvieraas Serca de él, miando con piedad en sus ojos.

— No te quepa duda, que yo se lo digo, ¡sabes que no tengo miedo! —

— Pero si lo haces, pero si le cuentas, ¡vas a destruir lo nuestro!

¡Yo estaré acabo, tú estarás perdida!

¡¡Maldigo el momento en que entraste en mi vida!!

Toma Mikey de la cintura con un poco de fuerza, pero Mikey con unacfra de enojo se aparta d el bruscamente.

— ¿Yo que soy, yo que soy?, ¿Que lugar ocupo hoy?

¿Soy tu amante, soy tu amiga?, ¡¿Soy una desconocida?!

!Dime estando ella que hago yo en medio de tu vida!

¿Quién da más, quien da más?, ¿Quién se queda, quien se va?

Tu mujer o tu querida, ¿Quien es la favorecida?

Si no se lo dices ¡seré yo está vez quien. Se lo diga!

Ya estando en el final de la canción, Mikey canto la últimas letras de la música.

~Ya lo sabe todo, lo lamento sigue con tu vida.~

Puntuación: 10,000

¡Felicidades a los jugadores!
¡Obtuvieron un nuevo récord!

Los dos al ver su nueva marca, chocaron los cinco felices, sentándose en el sillón descansando de todo lo que hicieron.

Pero al oir unos aplausos, le dejo la sangré helada al ver a tras suyo a los hermanos de Mikey a April, quien se aplaudían, y Rapha que se aguantaba la risa.

La cara de los dos era como tomates por la vergüenza que sentía en ese instante.