cuarenta y seis

91 6 0
                                    

Links

Y bueno, así estamos

El ambiente no podía ser más tenso e incómodo, yo aún seguía parada en la puerta del tren, el sonido que hizo mi garganta al tragar saliva, pudo haberse escuchado hasta en los últimos vagones del tren

Mis piernas temblaban, no sabía que hacer o como reaccionar, la mano de Tom yacia aún en mi zapato, pues al subirme, sentí como bajo la mano por mi espalda y estaba en mi zapato

Frente a mi, estaba Matheo, furioso, con una cara de pocos amigos, su rostro mostraba irá y rabia, sus ojos estaban algo llorosos, pero sabia que era debido al enojo en el, tenia la mandíbula apretada y el ceño levemente fruncido, sus manos reposaban en sus lados, echas puños, por otro lado Tom estaba con una leve sonrisa en su rostro, esta mostraba despreocupación y un poco de satisfacción. Lamió sus labios, con una radiante sonrisa en su rostro, sabía lo que había ocasionado con sus acciones, lo sabía y estaba sumamente satisfecho por ello

Matheo miraba a Tom como si estuviese a punto de matarlo, se lo comía con la mirada, sus ojos en la mano de Tom, quemaban, me estaba comiendo con la mirada, me sentia mal, los cólicos me golpeaban y la mirada de ambos hermanos igual, entonces, Matheo tragó saliva mirándome, parecía que había dejado de respirar, y solto una sola palabra

-Links, ven.- las palabras salieron de su boca con amargura y veneno, yo, por mi parte, pestañee varias veces y tragué saliva, todo mi cuerpo temblaba, y no de la buena manera, no me gustaba, temblar de miedo, y no de Matheo o de Tom, si no de lo que eran capaces de hacer

Mi mente no reaccionó de inmediato, por su lado, me quede unos micro segundos pensando en que hacer, mi cuerpo estaba aqui, parado en la entrada del tren, pero mi alma estaba a punto de tocar el cielo, y yo que siempre pense iría al infierno

Que ironía

El sonido del tren me hizo alertarme, me asusté y miré a Matheo nuevamente, y así mismo, mire a Tom, quien me miraba intentando decifrar mi rostro, yo me agarre fuerte de la puerta y baje, casi cayendome

Acomodé un poco mi ropa y caminé hacía Matheo, todo en mi me temblaba, de los pies a la cabeza, con cada paso que daba, no era un miedo de dolor, si no uno diferente, no tenía miedo por si iba a doler, temia que algo más pasara, y perdiera a alguien

Mientras más me acercaba, lo único que quería era un fuerte abrazo, que me dijera que todo estaba bien y que yo no hice nada malo, tenía miedo y quería que se me quitara, es como la adrenalina que sientes al ingerir, pero cuando te preocupas y te duele el corazón de la adrenalina, así se siente

Cuando estuve tan cerca, me quedé parada frente a el, esperando a su próximo movimiento o acción, Matheo me miró y me jalo del brazo, atrayendome hacía el, mientras pasaba su brazo por mis hombros, abrazándome a el, su mirada seguía fija en Tom, fulminandolo, apreté su camisa llamando su atención, el entonces reaccionó y comenzó a caminar hacía un lugar mas solo, despegando la mirada de Tom

Y lo curioso era que, aún a espaldas de el, podía sentir sus ojos clavados en mi espalda, sentía un peso en mi espalda, y simplemente no queria voltear

Caminamos alejándonos de los demás, pues a esta hora, no había casi nadie, ya que todos deberían estar subiendo al tren, por lo que me preocupa, que este tan enojado, conmigo en un lugar tan alejado, sin nadie que vea o escuche

Okey, esto parece una película de suspenso, nadie va a matarme, solo tengo miedo, no de Matheo, ni de Tom, ni de nadie, el miedo es interno, supongo, y bueno, también quiero suponer

Mientras caminábamos solo podía sentir su mano sobre mi brazo, su toque aunque no brusco, era caliente y firme, siempre era firme, pero estaba vez más. Cuando ya estuvimos lo suficiente alejados de todos, dentro de un baño, el me soltó, cerró la puerta con seguro y se recargó sobre el lavamanos, suspirando pesadamente

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Sep 06 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

¿Juntos Por Siempre? (Matheo Riddle Y Tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora