02

208 28 0
                                    


⌗  ⨯  ◟ 🦊  🐥  🐻

Era la décima vez que Matthew mensajeaba en el día a Taerae sin obtener una respuesta y aquello era extraño. Matthew conocía perfectamente las horas en que Taerae estaría durmiendo y al comprobar la hora nuevamente, sabía que el debería estar viendo alguna caricatura ¡Y debía estarle respondiendo! Aunque reconocía que tampoco le tomaría mucho tiempo cruzar la calle y entrar a por Taerae ¡No tenía derecho a ignorar sus mensajes!

Resignandose al mensaje número veinte y dispuesto a ir por Taerae, abrió la puerta del hogar de su amigo sin percatarse en nada más de lo desconsiderado que era su mejor amigo, ¡Le estaba invitando al cine y no le daba una respuesta! Por lo que, al abrir violentamente la habitación de Taerae y notar las penumbras de esta, poco a poco olfateo el aire, notando un aroma fuerte y dulzón.

Vainilla y caramelo entrando tan intensamente por sus fosas nasales que lo hacían tambalearse en su lugar, sosteniéndose del picaporte de la habitación de Taerae, demasiado perdido en el aroma y sus propios jadeos que en la voz adolorida de su mejor amigo bajo las mantas de su cama.

— ¿Matthew? — habló en un hilito de voz, lentamente el nombrado volviendo a duras penas a todos sus sentidos, cerró la puerta tras de si y encendió la luz, acercándose a la cama con pasos tambaleantes y la confusión notable en su rostro — ¿Qué haces aquí, tonto?

— Yo... Te estuve mensajeando — el menor cerró sus ojos con fuerza, frotándose la nariz al sentirse tan ahogado y excitado — Quería invitarte al cine y no respondías..., así que vine p-por tí.

Taerae siguió cada reacción de su menor, inquieto al no saber si sus reacciones eran por el asco de su aroma o algo más. Por lo que, al correr las mantas y sentarse sobre la cama observó sorprendido de como Matthew daba un paso hacia atrás cerrando sus ojos a causa del placer que le causó el movimiento del mayor, porque el aroma era demasiado intenso y lo estaba volviendo loco.

— Estoy en celo, Matthew... no puedo salir — pero las dudas de Taerae fueron respondidas sin haberlas preguntado directamente, porque sin que pudiera detenerlo o esperarlo, Matthew se subió a su regazo, olisqueando en el cuello de Taerae ansioso, gimiendo bajito por cada inspiración que daba sobre su piel.

— Hueles tan bien.... oh, por dios — jadeó Matthew sobre su piel, no pudiendo reprimir las humedas lamidas que explotaban el cuello del castaño, provocando un estremecimiento en Taerae que lo tenía fuertemente de la cintura, al intentar, inútilmente, ahogar sus jadeos.

Inesperadamente un nuevo aroma envolvió la habitación, mezclándose con el dulzón aroma de vainilla y caramelo. Una exquisita combinación de melón y te verde que provenía de la suave piel de Matthew, el aroma que tenía a Taerae mucho más sensible de lo que ya estaba.

— ¿Estás en celo también? — pregunto entre jadeos al menor, hundiendo su nariz en el cuello expuesto de Matthew — ¿Te he hecho reaccionar? — Seok era un manojo de gemidos entrecortados, sin ser del todo consciente como su semi erección se frotaba contra la dura erección del mayor, quien apretaba sus dientes sin saber cómo controlarse.

— Si, sí... oh, Taerae... — No hubo palabras, no hubo miradas dudosas ni críticas, porque... maldición, se sentía bien. Ambos lo sentían tan correcto, estar así en lo brazos del otro, frotando sus erecciones y perdiéndose en la brillante mirada del otro Omega. Oh, dios...

Cuando sus labios se encontraron por primera vez en un beso torpe, siendo el primero de ambos, gimieron al unisono. Porque nunca algo en sus vidas se había sentido tan placentero como estar besándose, deslizando sus lenguas dentro de sus bocas y estar recorriéndose por primera vez con tanta desesperación y necesidad.

⌗  ⨯  ◟ 🦊  🐥  🐻

.

.

.

Dos Omegas y un Alfa [Matt | Rae | Park]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora