Naruto - La Bendición del Caos sobre este Maravilloso Mundo

Capítulo 4: Probando el nuevo grupo

- Bosque de Axel -

El sexo entre dioses era todo un espectáculo. No era algo habitual, pero ocurría de vez en cuando en los muchos mundos humanos.

"Ay, Aqua, vas a crear un nuevo río si sigues goteando así...".

"Oh cielos, Caos, estoy lista para ti...".

"Un momento. Me gustaría ver cómo te mojas".

Si alguien pasara por allí, se asombraría de lo que vería. Allí estaba Aqua, la diosa del agua, con Naruto, el dios del caos, detrás de ella, con sus dedos jugando con su coño, que goteaba absolutamente con su esencia.

Estaba empapando las tablas del suelo, con los sonidos de los dedos húmedos procedentes de su coño.

Naruto le besó la clavícula y se la mordió suavemente, utilizando la otra mano para acariciarle los pechos a través de la ropa. "Siempre me ha gustado lo mojada que te pones, Aqua. Quiero ver más. Échate un chorro para mí. ¿Puedes hacerlo?", susurra antes de sacar los dedos y frotarle el clítoris con ellos.

Aqua mueve las caderas en respuesta al movimiento, emitiendo fuertes gemidos por la boca. "Oh, Caos..."

Esos gemidos de placer se acallan rápidamente cuando sus labios se encuentran con los de ella. Finalmente llega a su límite y empieza a chorrear, creando un charco de agua aún mayor bajo los dos dioses.

Sus muslos tiemblan y se estremecen por el orgasmo que la atraviesa antes de desplomarse sobre el pecho de Naruto. Los dos dioses rompen su beso y el rubio la mira con una sonrisa.

"Vaya, Aqua, es realmente excitante verte hacer un charco así". La mano de él se aparta de su coño, que aún mana a borbotones, para unirse a su otra mano y acariciarle los pechos. "Me dan ganas de acostarme contigo hasta que ya no puedas andar y tener otra hija. ¿Te gustaría?"

La diosa del agua no deja de agitarse y gemir mientras cabalga hacia un orgasmo que no cesa, en parte gracias a la forma en que su amante juega con sus pezones duros como piedras a través de la fina tela de su camisa. "¡Oh, sí! ¡Por favor, fóllame! Me he vuelto loca por no poder sentir tu polla estirándome, Caos. No me importa si eso significa que Tsukiumi tiene una hermana pequeña".

"Eso está bien".

Naruto la inclinó y puso su pene en su entrada, pero justo cuando iba a empujarla, Aqua empujó su trasero hacia él, de modo que llegó hasta su vientre.

La diosa suelta un gemido profundo y gutural cuando su coño aprieta con fuerza la gran y carnosa herramienta, llegando hasta lo más profundo. Pone los ojos en blanco y empieza a chorrear de nuevo, con la lengua fuera.

Naruto gime cuando las paredes de ella aprietan su polla. Empieza a empujar al ritmo de sus caderas. "Vaya, Aqua. Estás apretada y húmeda al mismo tiempo. Ya estás haciendo que me corra...".

Tras lo que a ambos dioses les parece una eternidad, Naruto llega por fin a su límite. Da un último golpe con las caderas, forzando otro torrente de jugos femeninos de Aqua, y su semilla se precipita en el vientre vacío de la diosa. Ella suelta otro gemido de placer mientras se convulsiona de éxtasis, cayendo finalmente de su percha tras perder el agarre al árbol y acabar de bruces en un charco de sus propios fluidos femeninos.

Apenas tiene tiempo de recuperar el aliento antes de que la den la vuelta y la penetren de nuevo, y el proceso vuelve a empezar.

Empujar. Chorro. Correte. Cambia de posición. Repite.

Aqua se llena de placer mientras ella y Naruto siguen practicando sexo durante todo el día, celebrando su reencuentro.

Resulta que los dos dioses estaban tan absortos en sus cuerpos que ni siquiera se dieron cuenta del enjambre de monstruos repollo voladores que sobrevolaban sus cabezas, dirigiéndose directamente hacia Axel. Tampoco oyeron las alarmas que sonaban con fuerza, llamando a los aventureros a defender la ciudad.