CAPITULO. 33

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Nicolasa llegó a casa de Dulce, tocó la puerta y esperó que ella abriera

Dulce: Nicolasa!! Pasa por favor!
Nicolasa: gracias señora
Dulce: a qué debo el placer de tu visita? Siente por favor

Nicolasa se sienta, estaba muy nerviosa no era una mujer de decir mentiras y pensar que tendría que mentir la ponía aún más nerviosa

Nicolasa: señora, vine por si usted tiene trabajo para mi
Dulce: ( frunció el ceño) y Christopher?
Nicolasa: me corrió
Dulce: que? Bueno es que este hombre no tiene vergüenza! Como se atreve tratarte así después de tantos años sirviéndole
Nicolasa: el quiere renovar la plantilla de la cervidumbre y lo entiendo! Yo ya estoy vieja
Dulce: no diga eso Nicolasa, Usted no es de la cervidumbre, es de la familia y que ese mal nacido haga eso!! Y no me va a querer escuchar! ( cogió su celular y marcó el número de Chris)
Chris: bueno?
Dulce: a ti no te da vergüenza correr a Nicolasa de tu casa?
Chris: no, ya Nicolasa esta mayor y necesito muchachas más jóvenes y eficiente
Dulce: será para darte tus revolcones con ellas, porque más eficiente que Nicolasa, lo dudo
Chris: pues si tanto te preocupa, contratala tú, Dariana ya se fue a vivir contigo y era más como su niñera, yo no la necesito aquí
Dulce: eres un desconsiderado, un patán, te vas a quedar solo en esta maldita vida
Chris: algo más que añadir?
Dulce: pudrete! ( le colgo)
Nicolasa: tranquilicese señora
Dulce: (suspiro) Nicolasa... yo no puedo contratarte, no ganó lo suficiente como para pagarte un sueldo
Nicolasa: pero eso no me importa señora! Yo con un techo y comida me conformo, sabes que no tengo donde vivir, aparte no quiero alejarme de mi niña Dariana, en cambio yo le hago los que haceres de la casa y cuido de la pequeña
Dulce: no me parece justo Nicolasa, que hagas todo eso por solo comida
Nicolasa: por favor, no me corra usted también
Dulce: está bien, puedes quedarte y vemos que solución buscamos si?
Nicolasa: si, muchas gracias señora

La tarde pasó sin inconvenientes, Dariana se puso muy feliz porque Nicolasa estaría con ellas, ella la quería muchísimo. Al día siguiente, Dulce despertó, se dio una ducha y vistió, fue al cuarto de la bebé y ella ya tenía sus ojitos abierto

Dulce: buenos días mi amorcito! Ya tienes hambre mi vida? Ven acá

Cogió a su pequeña hija y se dispuso a darle el pecho, cuando acabó le sacó el aire y de nuevo la dejó dormida en su cunita, después fue  al cuarto de Dariana y ella dormía, se acerco a ella, la arropo mejor y le dio un beso en la frente

Dulce:, te amo mi princesita

Salió y fue desayunar

Nicolasa: buenos días señora
Dulce: buenos días! Como durmió?
Nicolasa: muy bien, la cama es muy cómoda
Dulce: me da gusto
Nicolasa: ten su desayuno
Dulce: muchas gracias, Nicolasa Valentina acaba de comer y no olvide de estar pendiente de Dariana de que se levante para el colegio
Nicolasa: de acuerdo señora
Dulce: ten ( sacando dinero de su bolso) esto para que se lo des a Dariana para el taxi y esto es por si necesitas comprar para la comida
Nicolasa: ok, que quieres para comer?
Dulce: lo que sea que hagas estará buenísimo
Nicolasa: ok, señora
Dulce: ya me voy, cuida mucho de mis niñas por favor
Nicolasa: vaya sin cuidado, las cuidaré como su fueran mías
Dulce: por favor, no deje entrar a nadie
Nicolasa: ok
Dulce: creo que no se me olvida nada, pero cualquier cosa me llama si?
Nicolasa: vaya sin pendiente
Dulce: Gracias

Dulce salió de la casa, tomó yn taxi y fue a su trabajo, la verdad que se sentía muy tranquila de que Nicolasa estuviera en casa, pues ella sabía que nadie mejor que ella podría cuidar de sus hijas.

Ivan: buenos días! ( le sonrie)
Dulce: buenos días Ivan, como amaneció?
Ivan: muy bien, estas bien como para incorporarte al trabajo?
Dulce: si, gracias por los días de permiso
Ivan: no me agradezcas, solo quiero que estés bien, que si necesitas algo cuentas conmigo verdad?
Dulce: ( sonrie) si Ivan, gracias por tantas atenciones
Ivan: no hay de qué
Dulce: me pongo al día si?
Ivan: esta bien, pero no tienes mucho que hacer, en la tarde trataba de quitarte un poco de trabajo
Dulce: Gracias!
Ivan: bueno, te dejo para que trabajes si? Cualquier duda estoy en mi despacho
Dulce: sí

Ella comenzó a trabajar, era verdad, tenía casi todo el trabajo hecho, Ivan era un amor, era tan bueno y atento... aveces quisiera poder enamorarse de un hombre así, pero en el corazón no se manada y lo que siente por Chris aún latía muy fuerte. Varias horas después.

Ivan: Dulce quieres ir a desayunar?
Dulce: ya es la hora?
Ivan: si, vamos?
Dulce: vamos

Juntos fueron a la cafetería de al lado y pidieron un desayuno

Ivan: como has estado estos días?
Dulce: bien, un poco agotada con la bebé y con el dolor de mi cesárea, pero Dariana me ha ayudado mucho
Ivan: mi Angélica me dijo que Dariana esta loca de contenta
Dulce: si, quiere demasiado a su hermana
Ivan: oye perdon que no fuera a visitarte y ayudarte con las niñas, tuve muchísimo trabajo
Dulce: no te preocupes, además me llamabas todas las noches
Ivan: si, es que no me gusta irme a dormir sin saber de ti
Dulce; gracias
Ivan: porque?
Dulce: por ser así conmigo
Ivan: así como?
Dulce: tan bueno, tan atento, tan cariñoso...
Ivan: bueno ese es mi espíritu y tu bondad también me contagia, no me agradezcas
Dulce: ( ella suspiro) está bien
Ivan: y ese suspiro? Pasa algo?
Dulce: estoy muy preocupada
Ivan: y eso? Que te pasa?
Dulce: Nicolasa, es una mujer que trabajaba en casa de Christopher, ella desde que Dariana nació la ha cuidado siempre, entonces la corrió de la casa y ayer vino a pedirme trabajo, le dije que no puedo ofrecerle un sueldo y me dijo que con techo y comida le basta, a cambio ella cuida de las niñas y hace los quehaceres de la casa y la verdad no me parce justo
Ivan: bueno si ella decide eso... a ti te viene muy bien
Dulce: si, me viene ideal, pero Ivan... no me parece justo con esa pobre mujer, yo no puedo darle un dinero para sus cosas personales o si quiere comprarse algo... tampoco tengo como ayudarla
Ivan: y quieres que te suba el sueldo
Dulce: no, claro que no, con la mensualidad que tengo me da bien, pero tampoco me alcanza para darle un sueldo
Ivan: bueno podemos hacer algo, yo le hago un contrato, le pago un sueldo y que siga cuidando de las niñas
Dulce: no por favor! Eso no puedo aceptarlo
Ivan: porque?
Dulce: porque no Ivan, me voy a sentir incómoda
Ivan: ok, entonces que me propones
Dulce: podrías darle trabajo en tu casa? Cocinando es la mejor, te lo aseguro
Ivan: esta bien, cuando acabemos el trabajo, te llevo a tu casa y hablamos con... como se llamaba?
Dulce: Nicolasa
Ivan: eso, Nicolasa
Dulce: Gracias, no te vas arrepentir es muy eficiente en su trabajo
Ivan: si tu me la recomiendas..   entonces puedo confiar en ella
Dulce: si, gracias
Ivan: bueno pago el desayuno y seguimos con el día!
Dulce: si

Ivan pago y fueron a la oficina, las horas pasaron, Dulce no podía dejar de pensar en lo que Chris estaba haciendo... no entendía su comportamiento, el siempre había sido bueno y justo con sus empleados, porque a Nicolasa la trató así? Si era con la que más confianza tenía, no entendía nada. Cuando terminaron el día de trabajo, Ivan llevo a Dulce a su casa y juntos entraron

Dulce: Nicolasa!
Nicolasa: ( llegó con la bebé en brazos) hola señora
Dulce: hola mi amor ( cargando a la bebe) como se ha portado?
Nicolasa: muy bien, la niña Dariana era más llorona
Dulce: si, lo recuerdo ( rie)
Ivan: Hola Nicolasa
Nicolasa: ( lo miró mal) hola señor
Dulce: Nicolasa, mire el es Ivan Maldonado, mi jefe
Nicolasa: ahh... ( seguía mirandolo mal)
Dulce: Nicolasa, he hablado con el y hemos decidido que te va a dar trabajo, te va a llevar a su casa, que te parece?
Nicolasa: ( enojada) no señora! Yo quiero quedarme aquí!, quiero cuidar de mis niñas
Dulce: pero entiende por favor, yo no puedo darte un sueldo
Nicolasa: y eso a mi que me importa? Yo no necesito dinero, solo estar con las niñas, señora sabe que Dariana es mi adoración y a la pequeña ya le estoy cogiendo cariño
Dulce: pero no me parece justo
Ivan: vamos Nicolasa, en mi casa se va a sentir bien y cuando usted quiera puede venir a visitarlas
Nicolasa: he dicho que no!
Dulce: Nicolasa, tiene que aceptar el trabajo que le ofrece Ivan, si no es así me veré en la penosa obligación de correrla también de mi casa
Nicolasa: usted no puede hacerme eso señora
Dulce: tampoco puedo mantenerla, lo siento
Nicolasa: ( comenzó a llorar, pues estaba viéndose entre la espada y la pared) no me corra por favor
Ivan: venga conmigo por favor, en mi casa la van a tratar bien!
Nicolasa:y no lo duro... pero entiende que no puedo ( decía llorando)
Dulce: pero por qué? Nicolasa... por favor, acepte el trabajo, no puedo permitir que usted haga todo por un plato de comida y techo
Nicolasa: que no señora! Que no puedo irme! Christopher me paga por cuidar de las niñas

Estalló llorando, era demasiada presión la que sentía. Dulce se quedó helada.

Fin Capítulo.

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