LOS CUENTOS DE ALBA.

Soledad|| 01

"Escribe lo que no debe ser olvidado"

Cada escritor tiene el hechizo de atraparte entre sus frases y  abrazar tu corazón con una fuerza dominante. Pero... Por que sucede esto? La respuesta es tan sencilla como decirte que la pasión y el amor con que escriben sus oraciones te envuelve como  las sabanas  en una mañana fría  y tormentosa.

Clara la vidente plasmaba sus memorias en la mesita de tres patas con una paciencia y amor todos los días. Pasaba en la casona como si fuera un fantasma con sus batonas de seda de color blanco dejando un aroma a  manzanilla y canela, siempre con sus mejillas ruborizadas y sus rizos de oro alborotados,  perdida en su mundo, los vecinos creían que estaba loca pero ella solo entendía el poder de  anotar cada acontecimiento de su vida, era una familia numerosa lo que le daba la oportunidad de escribir en su cuaderno de anotaciones todos los días sin falta, era risueña y tenía una belleza que cautivaba al que  sea.

Clara aveces recibía visita de espíritus amigos, también la visitaban  las hermanas mora donde se sentaban junto a una mesita de cristal por las tardes para tomar el te y charlaban por horas   sobre el futuro hacían levitar las tazas de te, y se sumergian  en un mundo donde tan solo ellas conocían. Salía con las mejillas alborotadas por el calor de aquella tarde de verano donde la sed es más continua que nunca,  tomaba un baño que le refrescaba cada parte de su cuerpo. Y se recostaba en su cama con las sabanas limpias  con una sonrrisa calmada en su rostro.

Cuando llego su final ella lo sabía y aun asi mantenía su belleza. Mi abuela era mi todo a pesar  que aveces estaba sumergida en los rincones de la casa dejando su aroma  y pasando como una rafaga de cometas en el espacio sin importar quien estuviera y moviendo cada objeto espantando al que sea, era tan inteligente y sabía que despues de su muerte me haría falta sus consejos que tenia que descifrar, aveces tomaba días en decirmelos pero era como un acertijo de cada mañana y lo hacía tan divertido porque podía pasar toda la noche pensando y sacando conclusiones, incluso entendía un poco a lo que se refería.

Luego de su nefasto fallecimiento me quedo un amargo sabor de boca y mi corazón fue envejeciendo junto conmigo en esa casona tan solitaria y fribola, pero descubrí objetos que conservaba mi abuela y entre ellos... Los libros de anotaciones. Donde revelo su niñez, las amantes del abuelo de media noche, y las travesuras  de mi madre los secretos no tan secretos oscuros de mi abuelo  y un poco de mi niñez entre el jardín corriendo con los pies descalzos y mojados del barro . Supongo que este descubrimiento me entretuvo un par de meses o quizas años quien sabe.

Pronto mi familia se fue separando cada quien fue a donde la vida lo coloco. En mi caso sigo en esta casa añorando cada parte de mi abuela y mi abuelo... No me voy de esta casona porque los puedo sentir, como en una mañana casual tomando el cafe y una brisa  entra refrescando la cocina dejándome adormecida como si fuera un sutil beso en mis mejillas. O en las ocuras y frías noches dandome el calor dentro de mis sabanas  como si me arrullara. También en mis sueños en  un campo cerca de un río que corre  apasiblemente y el sonido es como un cántico de unos ángeles en mis oídos.

Aveces quiero irme siento que me estoy volviendo loca andando y danzando con los espíritus de esta casa. Creo que heredé el don de Clara La Vidente o solo es ella que me muestra cuando quiere cosas... Cosas que debería saber antes de que sucedan.

"Quien abandona a alguien, ese Alguien busca la manera de distraerse" Me digo en mi. Mente.

De algo estoy segura que mi abuelo me dejo un regalo muy lindo! Esta casa. Casa que en el rincon  más clandestino encontraras la precencia de Clara andando  sin alguna importancia junto a sus espíritus, juntitos. Pero no te asustes, que son solo buenos amigos.

(inspirado en la novela de Isabel Allende,  La cada de los espíritus.)