Se casó con el hermano villano de la escoria Gong

38: "Señor, parece que me han mordido..."

Dándose la vuelta abruptamente, Shen Yijin vio al joven que se había hecho una bola en la bañera. Bajo el agua casi transparente, el joven se abrazó con fuerza. No tan desprotegido como antes, se cubrió con firmeza, con el pelo negro húmedo colgando bajo, medio levantó la cabeza y balbuceó: "No, no solo un novio, nos vamos a casar pronto. ¡Yo tengo un prometido! Mi prometido es increíble... ¡Nos amamos mucho!"

"Jingxun", después de volverse, Shen Yijin ya había dado un paso inconscientemente y regresó a la bañera en dos o tres pasos.

La garganta de Shen Yijin se rodó dos veces, sus brazos eran largos, a pesar de que la bañera redonda era grande, fácilmente podía alcanzar sus brazos desde el costado para llevar al joven a su costado. Pero esta vez, la mano extendida no sabía dónde aterrizar, Shen Yijin tuvo que bajar la cabeza y dejar un beso en los labios rosados de la otra parte.

"Xiao Xun, mírame."

Shen Yijin ralentizó deliberadamente su discurso y suavizó su voz, el sonido de una textura similar a un violonchelo sonó de repente en el baño, lo que dejó atónito a Jingxun, sus ojos siguieron automáticamente los labios que acababa de besar solo para sentir un olor único y familiar entre sus respiraciones.

... Era el olor del señor.

"¿Hm?"

Después de un rato, el joven de la bañera levantó la cabeza confundido, llevaba mucho tiempo enterrando la cabeza, cuando miró hacia arriba de nuevo, Jingxun estaba deslumbrado por la luz del baño y no podía ver las cosas con claridad, pero descubrió que indudablemente seguía siendo el baño del dormitorio principal de Shen Yijin, que aún reconocía.

... Jingxun recordó que el Señor Villano lo llevó a casa, no había posibilidad de que lo encerraran en una pequeña habitación oscura. Pero, ¿qué pasó hace un momento?

Inconscientemente, Jingxun miró a los ojos de Shen Yijin, que brillaron, incluso más cándidos y gentiles de lo habitual... Este fue de hecho el señor. Pero el que tenía esos ojos oscuros en este momento también era el Señor. Además, todavía recordaba la frialdad...

Al pensar en esos ojos que depositaban viento y nieve, el cuerpo de Jingxun se encogió y quiso sumergirse más en agua tibia. Este fue el resultado de la lenta respuesta del cerebro, completamente subconsciente. El cerebro caótico no entendía por qué las emociones del Señor cambiaban de un lado a otro ciento ochenta grados, pero Jingxun siempre había sido franco, por lo que preguntó directamente sobre las cosas que no entendía. Sin embargo, esta vez fue la otra parte la que habló primero.

"Xiao Xun", Shen Yijin dijo: "Di lo que acabas de decir de nuevo."

Jingxun: "¿......?"

Las largas pestañas de Shen Yijin estaban caídas, lo miraba con una mirada gentil y encantadora, diciendo lentamente: "Mi prometido es muy asombroso."

Jingxun: "......"

"Nos queremos mucho."

Jingxun: "............"

El vapor en la bañera se evaporó y el olor a alcohol se elevó, haciendo que la tez de Jingxun fuera aún más rubicunda. Abrió los ojos levemente y ya no abrazó sus brazos con tanta fuerza, después de todo, era muy difícil y agotador sostenerlo todo el tiempo. Pero una vez que se dio cuenta de que Shen Yijin todavía lo miraba condescendientemente en este momento... del tipo que podía ver todo, le fue imposible relajarse por completo.

Jingxun curvó los dedos de los pies avergonzado y finalmente decidió fingir que no escuchó nada. Para aliviar aún más la vergüenza, se alejó nadando un poco, luego pensó en algo y encendió el botón de masaje de la bañera.