-1-

12 1 0
                                    

Había vivido durante toda su vida con los Dursley, toda su miserable vida, cuando era más pequeño Harry soñaba una y otra vez que algún pariente desconocido iba a buscarlo para llevárselo, pero eso nunca sucedió; los Dursley eran su única familia.

Amaba cuando pasaba el verano en casa de los Weasley, él tenía en claro que no eran su familia, estaba agradecido con todo lo que siempre hacían por él, en especial estaba agradecido con los señores Weasley, ya que a pesar de no tener mucho recibieron a Harry de esa manera tan cálida que lo hizo sentir amado por primera vez en su vida, y estaba tan avergonzado por lo que había pasado con la familia de su mejor amigo desde que se conocieron, sabía que él era el problema, cuando vió con sus propios ojos como la vida le era arrancada a Cedric tras el regreso del señor tenebroso, supo que todo había terminado, Voldemort lo buscaba a él, y solo a él, después de lo qué pasó en el departamento de misterios en el ministerio de magia no le quedó más remedio que aceptarlo, si él moría todos estarían mejor.

Dejó una carta sobre su cama y dirigiendo una última mirada a su mejor amigo, salió de su habitación dando un largo suspiro. Sus pasos eran cada vez más pesados, sentía que se quedaba sin aire y una gran sensación de tener el estómago vacío lo inundó, cuando finalmente llegó a la torre de astronomía no se percató que alguien se ocultaba entre las sombras, tampoco notó aquel leve susurro que mencionaba su apellido, se tomó un minuto para apreciar el bello paisaje y la noche estrellada, en otro momento le habría parecido lo más bello jamás visto, pero en aquel momento solo hizo que sus ojos terminaran llenos de lágrimas sin derramar.

Tomando toda la valentía que tenia subió al barandal que lo protegía, y sonriendo decidió lanzarse. Lastimosamente su último plan no pudo ser ejecutado ya que algo lo detuvo o más bien algo, dirigió su mirada hacia quien había sido el culpable de no completar su objetivo, Malfoy, Draco Malfoy tenía la mirada más desesperada que jamás había visto mientras trataba de sujetarlo.

- Resiste Potter ... resiste un poco más - el tono de Malfoy era entre preocupación y desesperación, sus ojos estaban llenos de lágrimas y Harry podría jurar que las uñas de Malfoy se enterraban en su piel, no podía entender como su enemigo jurado intentaba salvarlo, tenía tantas preguntas que no sabía de qué manera ejecutarlas.

- ¿Qué haces aquí Malfoy?- Dijo cuando finalmente logró tocar el suelo de aquella torre y se encontraba a salvo provocando un jadeo de disgusto del contrario.

- ¿Dirás eso después de que te salve? -una sonrisa de lado con justificada molestia.

- Gracias ... - el resto de la protesta del rubio fue interrumpida por las sinceras palabras de Potter, sabía que Malfoy también la pasaba mal pues su padre había sido encarcelado y estaba seguro que Voldemort entraba y salía de la mansión Malfoy tantas veces como quería.

- Puedo... es decir, eres un idiota eso es seguro, pero ¿eres tan idiota como para terminar con tu vida? ¿O a caso estabas bajo un hechizo? - No hubo respuesta además de aquel sollozo salido de la boca del pelinegro por 5 minutos. - Si no quieres decirlo está bien... tus razones tendrás.

Ambos miraron el cielo estrellado, después de todo solo eran dos adolescentes con demasiados problemas mostrándose débiles por primera vez ante el que consideraban enemigo. Harry sabía que abrirse ante Malfoy no sería la mejor opción porque podría usarlo en su contra, y Malfoy solo quería saber que había orillado al que consideraba su única esperanza de salvarse para llegar a aquellos extremos.

- Es solo que .. he tenido una vida asquerosa, he deseado por años ser feliz y cada vez que creo que podré serlo sucede algo peor que lo anterior - Definitivamente no era la mejor opción pero si la única pues no se veía capaz de contarle esto a sus mejores amigos.

- Si esto es por esa Ravenclaw de verdad que no vale -se vió interrumpido por un sonido de desaprobación de parte de Potter.

- Yo lo sé,Cho solo quería acercarse a mi para saber más de la muerte de Cedric y aún así lo dejé pasar porque ella me gustaba, pero todo esto va más allá, Voldemort -Aunque no pudo verlo supo que su aquel chico había temblado - se hace más fuerte cada vez y todos, incluso Dumbledore esperan que acabe con él, pero no sé cómo hacerlo, vamos que ni siquiera puedo usar otro hechizo para atacar que expelliarmus - encogió sus piernas y soltó una leve risilla - ¡Aah! Mis tíos estarán tan furiosos cuando sepan que tuve la oportunidad de morir nuevamente y no la aproveché.

- Tus Tíos.. ¿quieres decir los muggles? ¿Por qué se molestarían ? -rodó los ojos ante esto- de seguro te tienen en un altar tal y como los demás lo hacen.

-En realidad.. dormí en la alacena bajo la escalera durante 10 años -una lagrima resbaló por su mejilla mientras recordaba - cada año en mi cumpleaños le daban obsequios a mi primo frente a mi, y cada 31 de octubre me recordaban que mis padres murieron por mi culpa, yo creí sin saber nada del mundo mágico creyendo que mi padre había sido un borracho y que mi madre era una cualquiera, mis tíos dijeron que ellos murieron en un accidente de coche - una suave sonrisa de nostalgia surgió de su boca cuando recordó la noche en que Hagrid lo encontró - cuando mi carta llegó no la pude leer pues no lo permitieron, no fue hasta que Hagrid llegó a donde yo estaba para poder explicarme que era un mago, antes de eso tenía prohibida la palabra "magia" - el rubio aunque al principio incrédulo, escuchó con atención aquella historia - de hecho de no haber sido por él habría ido a stonewall -al notar la cara de confusión del rubio añadió - es una escuela secundaria para muggles de bajos recursos y además seguiría durmiendo bajo la escalera.

Draco quedó en silencio, no tenía idea de todo lo que había pasado Potter, y tampoco sabía porqué Dumbledore siendo el gran mago que era había permitido que el niño dorado pasara por todo eso, pero lo que sí sabía es que se arrepentía de haber hecho la vida de Potter más miserable durante todos estos años, pero solo era un niño... un niño muy presumido que quería llamar la atención de Potter, ni siquiera quería ser su enemigo, solo quería ... poder pasar tiempo con él. Se hundió tanto en sus sentimientos que no se dió cuenta de cuando Potter se levantó de su sitio.

- Ha sido una plática agradable, no importa si la usas en mi contra después, gracias por haberme ayudado y escuchado.

Dejó que Potter se marchara primero y luego pesadez en sus ojos y piernas fue hasta su habitación con cuidado de no ser visto por Filch o su gata, había sido una noche pesada y extraña, pero de alguna manera sentía que debía ayudar a aquel pelinegro torpe que había querido quitarse, definitivamente Draco debía estar cerca de él, con este último pensamiento se dejó abrazar por morfeo.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Sep 09 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Dernière danseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora