The Happiest Girl «Chaesoo»

Capítulo 7

Pov Rosé:

La gira continuaba su curso y, con cada nueva ciudad, me esforzaba por encontrar un equilibrio entre mi deseo de acercarme a Jisoo y mi necesidad de mantener distancia para proteger mi corazón. El ambiente en el hotel de lujo en París era elegante y tranquilo, pero mi interior estaba en un torbellino.

Mi habitación estaba en silencio, salvo por el suave resoplido de Hank, mi leal compañero. Me encontraba sentada en la cama, revisando mi celular mientras el tiempo pasaba sin piedad. A pesar de mis esfuerzos por distraerme y alejarme de Jisoo, el constante flujo de videos y fotos relacionadas con ella me mantenía atrapada en una espiral de pensamientos.

—¿El juego acabó? —susurré mientras recordaba las palabras de Jisoo.

Flashback

Recuerdo aquella conversación crucial con Jisoo después de una actuación agotadora. La preocupación en su rostro era evidente, y la forma en que me miraba me hizo sentir un nudo en el estómago.

—Chaeyoung —comenzó Jisoo—, te he notado cada vez más distante. Si hay algo que te molesta, por favor dímelo. No quiero que esto cree una barrera entre nosotras. —Resopló—. Te siento lejos y estás tan tranquila como si no pasara nada... —seguía observándome—. Dije que lo descubriría, pero tú... pareces rechazarme y alejarte en cada oportunidad.-

—No es nada, unnie —respondí finalmente —. Solo... no quiero que mis sentimientos te causen problemas.-  La tristeza en los ojos de Jisoo era inconfundible.

—Si eso es lo que necesitas, está bien. No quiero que te sientas presionada. Si necesitas espacio, lo respetaré.

Regreso al presente

Hank estaba acurrucado a mi lado. Sentía que Jisoo se estaba cansando de mí, nuestra relación parecía estar terminándose, y todo por culpa de estos sentimientos que no sabía cómo manejar.

La noche en París estaba clara y el aire era fresco. Decidí que necesitaba un cambio de escenario para despejar mi mente. Me vestí con ropa cómoda y salí del hotel, buscando un momento de tranquilidad en el parque cercano.

Mientras paseaba, un grupo de fanáticos me reconoció y se acercó para pedir autógrafos y fotos. Aunque estaba cansada, me mostré amable con ellos. Fue en ese momento que, al levantar la vista, vi a Jisoo sentada en un banco cerca de la fuente del parque. La sorpresa y la ansiedad se apoderaron de mí.

Me acerqué con paso vacilante. Jisoo, al verme, se levantó del banco y caminó hacia mí. Su expresión mostraba una mezcla de preocupación y frustración.

—Chaeyoung —dijo Jisoo, con un tono que transmitía cansancio —. ¿Por qué estás evitando hablar conmigo? —Al parecer, no era la única en querer despejar la cabeza.

Me paralicé por la pregunta, sin poder encontrar las palabras adecuadas. La culpa y la tristeza se acumulaban en mi interior.

—No estoy evitando hablar contigo, unnie —murmuré, intentando mantener la calma—. Solo... necesito tiempo para procesar.-

Jisoo me miró fijamente, claramente no satisfecha con la respuesta. La frustración se hacía evidente en su rostro. —Chaeyoung, esto no es justo. Me has estado apartando y no sé por qué. Si hay algo que te molesta, lo entiendo, pero no puedo seguir así.-

Sentí una punzada en el corazón al escuchar las palabras de Jisoo. La verdad era que no podía soportar la idea de perderla, pero tampoco podía encontrar la valentía para expresar mis sentimientos.

—Lo siento, Jisoo. No quiero que te sientas mal, solo... no sé cómo decirte...-

Jisoo dio un paso atrás, su frustración y enojo se volvían más evidentes. La distancia que había puesto entre nosotras estaba causando una gran tensión entre nosotras.-

—Si eso es lo que realmente quieres, Chaeyoung, está bien. Si prefieres que me mantenga alejada, lo haré. Pero no quiero seguir en esta situación donde tú te alejas y yo no sé por qué.-

Con esas palabras, Jisoo giró sobre sus talones y se alejó, no sin antes decirme: —No voy a causarte más problemas—, dejándome sola en el parque. La figura de Jisoo se desvaneció en la distancia, y me quedé paralizada, sintiendo el peso de la decisión que acababa de tomar.

De vuelta en mi habitación, me dejé caer en la cama, cerré los ojos, tratando de contener las lágrimas. La distancia que había creado entre Jisoo y yo parecía ahora insuperable. El costo era demasiado alto.

—¿Qué he hecho? —susurré, mi voz quebrada por el dolor.

La noche en París continuó, pero para mí, el silencio en la habitación era un recordatorio constante de las palabras no dichas y el amor no expresado.