♡ °𖦹〔 My eternal love 〕𖦹° ♡

°□' Todo volvio a la normalidad '□°

-No hay ships-
(Ni se les ocurra poner tcest)

Pov: Nadie

Unas horas después Donnie se despertó, el no era muy propenso a levantarse tan tarde. Al abrir los ojos vio a Leo abrazado a el, se veía muy cansado. Tenía sentido, Leo no dormía muy bien nunca por el insomnio. Después de unos segundos más de observar a su gemelo se sentó con cuidado, asegurándose de no despertarlo. Se soltó del agarre de su hermano y se levanto, estirándose en el proceso.

Se acomodo la bandana y salio del cuarto, cerrando la puerta detrás de él. Al salir sintió el aroma del desayuno, probablemente Mikey estaba cocinando. Normalmente vería a Raph en el comedor, pero al parecer la tortuga espinosa seguía durmiendo. Tal vez no era tan tarde. No se distraeria viendo la hora. El solo se dirigió a la cocina, tenía que tomar su café matutino.

Entro a la cocina y vio a Mikey, estaba cocinando el desayuno. El contrario no noto la presencia de Donnie, tenía sus audífonos puestos. Donnie solo paso detrás de él y se dirigió a la cafetera, acercándose a uno de los estantes donde estaban las tazas.

-¡Buenos días Don!- Su hermano menor dijo feliz, era algo común de él.

-Buenos días Michael- Donnie sonrió y siguió preparando su café.

-¿Leo sigue dormido?- Mikey le pregunto, aun cocinando.

-Si, lo más probable es que se levante más tarde de lo normal.

-Bueno, al menos si dormira bien hoy.

Donnie asintio, concordando con el menor. Ambos continuaron hablando de manera normal, por primera vez no era sobre Leonardo. Fue una conversación simple y normal, algo que desde hace tiempo no pasaba.

-------------- Salto de tiempo chingon

Unas horas después Leo se despertó, despues de dias se sentía lleno de energía. El se levantó y preparo, se puso una bandana limpia incluso. Antes de salir tomó su celular y se vio rápido en la pantalla de este, notando las ojeras que tenia. 《Maldito insomnio...》
Mientras se quejaba internamente por su físico, camino hacia la puerta y salio de su habitación, pensando que volvería a ver lo mismo que otras veces. Pero al parecer no, no había nadie afuera esperándolo. Además en el aire olió el desayuno, algo que antes no pasaba porque Mikey o Raph estaban ocupados o discutiendo con Leo. Antes de permitir que la nostalgia siguiera entrando, decido dirigirse al comedor.

Lo que vio fue muy agradable, Mikey y a Donnie desayunando mientras hablaban y Raph estaba preparándose un café en la cocina. Todo parecía normal, justo como lo era antes de el ataque de los kraang.

-¡Buenos días Leo!- Una voz dijo, sacándolo de sus pensamientos. Mikey, optimista y alegre como siempre.

-Buenos días, ¿Que hay de desayunar hoy?- Pregunto Leo, sentándose al lado de su gemelo.

-Prepare hot cakes, aunque también hay cereal

-Me parecen bien los hot cakes

Mikey asintio y siguió desayunando mientras Leo se servía los hot cakes en su plato.

Después de unos minutos los cuatro estaban sentados en la mesa, cada uno haciendo sus cosas. Mikey hablando con Miles, Donnie tomando su café tranquilamente y Raph desayunando mientras trataba de no dormirse de nuevo. Splinter probablemente estaría durmiendo o viendo sus comerciales. Leo solo estaba en silencio desayunando, metido en sus pensamientos. 《Si ya le dije a Donnie también les tengo que decir a ellos...》
Aunque a Leo no le gustará era cierto, sus otros dos hermanos también debían de saber, al fin de cuentas ya le había dicho a Donnie. Unos segundos después Leo respiro profundo y se armo de valor para decir lo que desde hace tiempo tenía guardado.

-Bueno...creo que ya es hora de que hablemos sobre eso.- Dijo Leo, mirando la mesa notablemente nervioso.

En menos de dos segundos los tres lo miraron, cada uno con una diferente expresión. Mikey estaba sorprendido pero orgulloso de que Leo fuera el que sacara la conversación, Raph estaba preocupado pero sorprendido y Donnie estaba apoyando en silencio a su gemelo para que continuará. Leo sabía que si iba a decir eso tenía que contar los detalles de manera correcta, algo que con Donnie no hizo. Solo le explico el porqué y una de las razones, no todas.

-Miren, las acciones que hice...bueno tienen una razón.- La tortuga de marcas rojas inicio, mirando la mesa mientras jugueteaba con sus manos- O bueno, razones...

Al decir eso último Donnie lo miro sorprendido, algo que Leo se esperaba. El solo continuo, ignorando las miradas de sus hermanos.

-Se que desde los kraang no ha sido lo mismo, no he sido el mismo de antes. Y lo admito, lo que hice, lo de sacrificarme...si tenia doble propósito. Aunque me salvaron gracias a los poderes de Mikey la idea no se fue. Se quedó ahí atorada hasta que le empecé a hacer caso, llevándome a empeorar más que antes. Y no me enorgullezco de decir que por eso deje de comer por un tiempo, es algo de lo que si me arrepiento demasiado.

La voz de Leo empezó a romperse, hablar de eso le traía muy malos recuerdos. 《No Leo, continúa hablando》 Se dijo a sí mismo, respirando hondo mientras aún miraba a la mesa.

-Y se que debí de haber pedido ayuda, pero no quería sentirme más como una carga para ustedes. Ya tenían sus propios problemas y que les sumará los míos no era algo que quería hacer. Por eso mismo me aguante todo eso y fingí mejorar, ignorando el hecho que solo fui para atrás. Cuando empezaron a notar el que no estaba tan bien los pensamientos se volvieron más frecuentes, casi siempre aparecían. Intenté olvidar eso, de verdad que lo intenté.

Cada segundo que pasaba la voz de Leo se rompía, este no quería empezar a llorar en frente de ellos. No quería que sus hermanos vieran ese lado de él, quería evitarles el descubrir eso.

-Después de conocer a Usagi, considerablemente todo mejoro, dejé de sobrepensar y esos pensamientos se fueron. Hasta que me recordaron que por cosas así era una carga para ustedes. Me sentí mal, por lo cual decidir terminarlo todo antes de avanzar. Cuando me di cuenta que no lo logré, que seguía con vida me sentí aún peor. Una carga para ustedes, algo que si descuidaban un segundo haría algo malo. Por eso no salía de mi habitación, evitaba cualquier conversación sobre eso.

En estos puntos Leo estaba a nada de llorar, veía borroso y su voz estaba quebradiza. Antes de poder continuar Mikey lo abrazo, seguido por Raph y Donnie. Algo que Leo no se percato de fue que sus hermanos también estaban al borde de llorar, no tenían la menor idea que su hermano se sentía así.

Los cuatro se abrazaron en silencio, segundos antes que Leo llorara como nunca lo había hecho. Tantos meses que se aguantaba esas lágrimas, y vaya que se sentía bien soltarlas después de tanto. En unos pocos minutos sus hermanos lo acompañaron, llorando también. Después de tanto tiempo por fin saco eso que lo molestaba, algo que lo consumía por dentro.

Minutos después se calmaron por completo, aun abrazándose. Ninguno quería soltarse, no después de lo que el de azul había dicho. En silencio se prometieron estar ahí para apoyarse entre ellos, sin importar lo que sea la situación o su solución. Al fin de cuentas para eso sirven los hermanos.

Tanto tiempo paso para que todo regresara a la normalidad.

Fin.