09. mysterious leader

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Sunghoon no tenía idea de qué hacía con su vida. Meses después de que salvaran al páramo él simplemente no se podía sacar de la cabeza a Keary, los demás trataban de hacerle entender que no podían estar juntos, que estaba prohibido, que no volvería a verla. Él se trataba de convencer de lo mismo, intentaba seguir adelante sin volver a pensar en ella, pero siempre le fue imposible.

Dos años pasaron y él aún la pensaba, aún la añoraba, los chicos nunca volvieron a nombrarla frente a él, Sunghoon notaba como siempre evitaban ese tema, había intentado comenzar de cero con alguien más, quiso darle una oportunidad a las relaciones cuando empezó a juntarse más con Gea, aunque sabía que a los chicos les caía mal porque tenía actitudes algo molestas, pero parecía ser la única que lo escuchaba cuando quería hablar de los eventos de ese tiempo, se había ganado su confianza.

Sin embargo, ese día en el lago todos sus planes de derrumbaron cuando volvió a escuchar su nombre, cuando volvió a verla parada frente a él luego de pensar que no la vería jamás, cuando volvió a abrazarla, a ver sus ojos, a sentir su calidez, no podía reprimir lo que sentía; pero por su lentitud al tomar decisiones y sus intentos fallidos de confesarle a Keary que aún se sentía igual, Jungwon tomó ventaja y se acercó a ella, y tal vez Keary... Sí había decidido seguir sin él.

Sunghoon sabía que a Jungwon le había interesado Keary en un principio, lo había notado cuando a veces llegaba interrumpirlos, pero nunca hizo caso a eso porque sabía que al estar junto a ella Jungwon no haría nada para separarlos... Pero ellos no estaban juntos ahora ¿no?

—¿En qué piensas? —dijo Gea dándole leves palmaditas en el rostro para que le prestara atención.

—¿Mhm? En nada.

—Te quedaste mirando a la fuente por un buen rato, estabas ido, ¿y no pensaste nada? No me mientas.

Sunghoon suspiró al saber que Gea no lo dejaría en paz hasta que le dijera algo.

—En los hangwols, y la guerra, y esas cosas...

—¿Y Keary?

Sunghoon apretó los labios sin querer contestar, Gea se cruzó de brazos y lo miró con molestia.

—¿Sigues pensando en Keary? ¡No pueden estar juntos! Ella no pertenece aquí.

—Intento no pensar en ella, pero lo haces más difícil si la nombras.

Gea bufó y se volteó en el asiento para mirar la fuente frente a ellos, pero de pronto una sonrisa algo maliciosa apareció en sus labios.

—No creo que a ella se le haga difícil no pensar en ti.

Sunghoon frunció el ceño y se giró para ver lo que ella veía. Jungwon estaba cargando a Keary al estilo princesa mientras correteaba rumbo al bosque entre risas.

Su pecho dolió ante esa imagen.

—¿Ves? Solo enfocate en mí y ya, no es difícil, lo estuviste haciendo todo este tiempo que ella no estuvo, ¡No debería cambiar ahora que está!

Sunghoon seguía mirando por donde se habían ido los otros dos.

—¿Me estás escuchando? Dije que es mejor si te fijas en mí, porque...

Sunghoon se volteó hacia Gea y le hizo una seña para que guardara silencio antes de pararse de allí e irse hacia su casa sin decir una palabra. No quería pensar en Keary, no quería escuchar a Gea, ahora mismo solo quería golpear a Jungwon e insultarse a él mismo pero no sabía qué más hacer en ese momento.

(...)

Por otro lado, un portal parecía abrirse en los suburbios de El Páramo. Habían grupos gigantes de Hangwols dentro, era una dimensión distinta llena de aquellas personas que practicaban la magia negra en sus dones, todos esperando el momento de debilidad para poder atacar.

Aquella dimensión era oscura y pequeña pero lo suficientemente grande para poder ocultarlos de los ojos de los guardias que los habían descubierto antes. Unas pocas antorchas alumbraban el lugar, solo lo necesario para poder verse las caras, y habían huesos en el suelo que parecían ser restos de guardias o animales que habían devorado.

Una persona se acercaba a pasos firmes hacia una de las mujeres en el centro de todos. Su mirada era fría pero sonreía levemente con cada paso que daba, aquella la sonrisa desprendía crueldad en todo su esplendor.

—¿Cuándo es el momento, líder?

—Todo a su tiempo, Zoora...

Respondió aquella persona a la señora, la misma que había atacado a Keary días antes. Todos observaron en silencio a su líder, se notaba que querían preguntarle más cosas, pero solo Zoora se atrevía hablar.

—¿Atacaremos a la princesa?

—No... No.

Su líder volvió a sonreír de manera espeluznante mientras tomaba asiento en un intento de trono hecho de piedras.

—Al parecer la princesita tiene otras debilidades que estábamos pasando por alto... Y esas son las que debemos atacar poco a poco, casi sin que lo noten, antes de apoderarnos de todo.

—¿Cuáles?

La persona se quedó en silencio y soltó una risa nasal antes de responder:

—Los salvadores del páramo.

PAST SECRETS ── ENHYPENDonde viven las historias. Descúbrelo ahora