Capitulo 13

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El sonido del teléfono interrumpió el silencio pacífico que había envuelto a Todoroki y Bakugou.

Todoroki, despertando con un leve sobresalto, abrió los ojos y notó la claridad de la mañana que empezaba a filtrarse por la ventana.

Aún sentía el peso y el calor de Bakugou reposando en su pecho, tenía uno de sus brazos descansado tras la cabeza de bakugou y con un movimiento lento y cuidadoso, trató de no despertar a Bakugou mientras extendía su mano para tomar el teléfono.

El teléfono vibraba desesperadamente, y Todoroki, sin hacer ruido, se deslizó cuidadosamente de la cama para responder la llamada. Con un susurro para evitar perturbar a Bakugou, contestó la llamada.

—¿Hola? —dijo Todoroki.

—¡Todoroki! —respondió Midoriya con entusiasmo— Pensaba que sería bueno salir a tomar aire fresco. ¿Quieres venir?

Todoroki frunció el ceño, parpadeando un par de veces.

—¿Ahora? —preguntó

—Sí, hoy tenemos el dia libre. Ven, te vendría bien un cambio de aire.

—Lo siento, no puedo —dijo, tratando de mantener su tono conciliador.

—¿Eh? ¿Por qué? —preguntó Midoriya, claramente decepcionado.

—Estoy en algo importante ahora, no puedo ir —explicó Todoroki

—¿En serio? Pero será solo un rato, nada mas

—Lo siento no iré

 —Está bien —dijo Midoriya —Pero me debes una salida— menciono haciendo un puchero audible incluso a través del teléfono

—Lo siento de nuevo —replicó Todoroki antes de colgar.

Dejando el teléfono en el mismo lugar de antes, Todoroki volvió su atención a Bakugou.

Con suavidad, pasó su mano libre por la cintura de Bakugou, atrayéndolo más cerca de sí.

Todoroki se acomodó de nuevo en la cama, asegurándose de que Bakugou estuviera bien arropado y cómodo.

Todo lo que importaba ahora era el bienestar de Bakugou

El silencio en la habitación volvió a ser apacible, con Todoroki abrazando a Bakugou y aferrándose a la tranquilidad del momento compartido.

Bakugou, moviéndose ligeramente y susurrando con voz baja, rompió el silencio de la habitación.

Ve con él —dijo, sus palabras llenas de una mezcla de resignación y determinación.

Todoroki se sorprendió, soltando el abrazo un poco, sin querer interrumpir el descanso de Bakugou.

—No estás haciendo nada importante —replico Bakugou, su voz apenas audible

—Estoy contigo, es importante —respondió Todoroki con firmeza, tratando de hacerle entender que su presencia era crucial para él en ese momento.

Bakugou, sin embargo, insistió.

—Solo vete. Antes lo había hecho.

Todoroki sintió un nudo en el estómago al escuchar esas palabras. Recordaba claramente la primera vez que ocurrió todo esto, cuando recibió la llamada de Midoriya y había salido rápidamente, dejándolo atrás.

No lo había hecho por una urgencia de ver a Midoriya, sino porque necesitaba desesperadamente aclarar sus pensamientos, ordenar las emociones que lo abrumaban sobre el. Pero era obvio que Bakugou no lo sabía.

sᴀɴᴀɴᴅᴏ ᴄᴏʀᴀᴢᴏɴᴇs // TodoBaku-OmegaverseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora