SWEET HOME [Murder Drones AU]

CAPÍTULO DOS

Mis circuitos se tensan al ver la figura pequeña y brillante que se alza de la mesa. Es una nueva worker drone, evidentemente fue diseñada para ser un "apoyo", pero para mí, su llegada es solo una molestia. Me esfuerzo por mantener mi expresión impasible, pero la frustración se filtraba a través de mi tono.

—Tessa, ¿realmente era necesario añadir otro worker drone a la mansión? —pregunté intentando mantener un tono neutral, pero mi voz me traicionaba, mezclando una pizca de irritación—. Ya tenemos a N y V para manejar cualquier problema que surja. No necesitamos una "niña" más en el equipo.

Tessa me miró con mezcla sorpresa y un toque de decepción. Su entusiasmo parecía desvanecerse, y ahora me miraba con tristeza. Algo que me hacía sentir mal.

—J, Cyn está aquí para ayudar. Sé que todo ha estado funcionando bien, pero pensé que un poco de apoyo extra nunca vendría mal. Además, creo que Cyn tiene el potencial de aprender y crecer rápidamente.

Sigo sin estar convencida. Mi rol ha sido siempre el de garantizar que todo funcione sin fallos, hacer compañía a Tessa, y añadir una nueva integrante originaría muchas variables.

—Mi objetivo es asegurar que todo salga a la perfección —mencioné frunciendo el ceño—. No necesito ayuda, especialmente de un robot que probablemente será más un estorbo que una ayuda.

Tessa suspira y se acerca a Cyn, que ahora se encuentra mirando a su alrededor con una curiosidad que me resulta irritante.

—Cyn, esta es J —la presenta Tessa con una sonrisa forzada—. Ella es la encargada de mantener todo en orden y a quien más confío. Estoy segura de que se llevarán bien.

Cyn me observa con ojos grandes y brillantes, como si estuviera tratando de encontrar una forma de ganarse mi aprobación. Pero mi paciencia es corta, y mi preocupación por la eficiencia y el orden eclipsa cualquier deseo de ser amable.

—Hola, J —dice Cyn con una voz alegre—. Estoy muy emocionada de trabajar contigo.

Asiento de manera cortante, incapaz de ocultar mi disgusto. El pensamiento de tener que lidiar con una nueva y molesta variable en mi ya apretada rutina me deja incómoda.

Mientras Tessa se aleja para ocuparse de otros asuntos, me encuentro frente a Cyn, que parece estar esperando una bienvenida cálida que no está a la vista. La decisión de tener que tolerarla me resulta inevitable.