Capítulo 18

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Me desperté sin ganas (como siempre), ni siquiera entendía para que lo estaba haciendo si de todas maneras iba a repetir este año. Pero tenía que cumplir. 

No quería cruzarme con mi padre, pero no me quedaba otra opción. Al bajar a la cocina él ya estaba allí sentado, con el celular en sus manos, mientras tomaba un café. 


-Hija tenemos que hablar --dijo al verme--

-Llego tarde... --contesté--

-Es importante.. 


Di un gran suspiro y me senté en frente de él.


-Te quiero pedir perdón, puede que me halla equivocado, yo sólo quise darte lo mejor y ahora entiendo que al estar lejos y solamente mandarte dinero no es lo adecuado. Mírate como estás de flaca, tus ojeras, tu cabello, tú.. tú estás mal y no entiendo porque siempre te he mandado mucho dinero para que puedas comer, salir con tus amigos, comprar ropa, pero mírate como estás... 

-No necesito tu lástima --contesté seca--

-Hija, soy tu padre, no me hables así. Sabes bien que tú eres la única persona que tengo en el mundo, la niña de mis ojos, y puede que te haya descuidado por el trabajo, por eso te pido perdón. 

-Esta bien papá, llegó tarde, chau --contesté-- 


No tenía ganas de hablar, sentí los gritos de mi padre pero seguí con mi camino, las ganas que tenía de ir al colegio se me habían ido. 


Saqué un cigarrillo y comencé a fumar. A mi padre lo único que le importaba el dinero, yo no le importaba ni un poquito..


-A dónde iremos hoy? --preguntó Franklin-- 

-A la discoteca del Centro ? --contestó Guzmán--

-Me gusta, me gusta la idea --respondió Sergio--

-Qué dices Lucía, vienes con nosotros? --preguntó Guzman--

-Obvio --respondí, chocando su puño con el mío--


Al salir del colegio, nos quedamos con mis amigos fumando unos cigarrillos juntos y luego cada uno volvió a su casa. Cosa que yo ni siquiera quería hacer. 


-Me has dejado hablando solo --dijo mi padre enfadado--

-Lo siento, tenía que irme --respondí--

-No sé que hacer contigo, te me estás yendo de las manos... --respondió--

-Y yo no sé que hacer con mi vida..

-Hija..

-Voy a darme una ducha --contesté--


Dejé la mochila encima del sofá de la sala. Subí a mi dormitorio y me metí en la ducha. 

Busqué mi computador y me puse a chatear con algunos amigos... 


Al bajar me encontré a mi padre con la mochila en mis manos y la caja de cigarrillos en ella. 


-Me puedes decir que significa esto? --preguntó mostrando la caja de cigarros--


MI PROFESOR DE MÚSICA!! / Anthony Santos y tú. [Pausada temporalmente]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora