Todos, todo el mundo cercano a mí, puede irse bien a la mierda. Es un puto cumpleaños y sólo les interesa ir si MI familia los puede llevar en vez de buscar otros medios. Son tan asquerosos, me repugnan. Malditas plagas. Me hacen sentir como la peor escoria del mundo por un maldito evento al que "no pueden asistir". No sé ni para qué los invitan.
Sólo hacen que odie más a mi persona. Seres inservibles.
Tal vez no merezco ser amada más allá de un objeto ya sea para la satisfacción o el blanco fácil de los chistes. Probablemente deba resignarme. Nadie nunca me querrá tal cuál soy en este mundo de apariencias y ya me lo demostraron muchas veces.
Gracias, por nada.