El comienzo

Aquellos días

No pasó mucho para que una profesora tocará la puerta del salón diciendo:

-Valeria Infante-

-Presente-dije levantando mi mano derecha

-Señorita, hubo una confusión, su salón no es este sino el de al frente-

Me quedé congelada, todos hicieron un profundo silencio, mientras me mantenía algo nerviosa...

-Vamos, aliste sus cosas, por cierto...está en el salón la señorita Tasia, ella también se retira, por favor-

Miré a Tasia, me alegraba que nos cambiarían de salón juntas, salimos contentas del salón mientras los demás nos miraban extrañados, al salir...me llevé una grata sorpresa...

-Saloo-grité mientras corría a abrazarla, pude ver a Salomé con su mochila, supuse que también la reubicarían

-Valeee-dijo ella con un gran sonrisa, y luego me dio un cálido abrazo

Tasia también estaba ahí, se unió al abrazo, mientras sonreíamos  nuestras risas llenaban el ambiente, qué felicidad...ahí estaban mis amigas, mis verdaderas amigas. La profesora nos guió a un salón, nos dijo que entraramos mientras los demás nos miraban perplejos, seguramente pensaban que habíamos llegado tarde, pensé. Habían 3 sitios en diferentes lugares, por lo que no tuvimos de otra que sentarnos alejadas. Me senté algo ajetreada, miles de pensamientos revoloteaban en mi cabeza, pero estaba feliz. A mi lado se sentaba un chica, parecía concentrada en escribir la clase pues no volteó a mirarme.

Para mi sorpresa pude ver, que adelante mio, se sentaban Jonathan y Anghelo, su primo, no se dieron cuenta que de que estaba ahí, por lo que sin querer estuve escuchando sus conversaciones. Vi a la chica que estaba a mi lado, parecía ser alta, llevaba el cabello corto y sujetado, delante de sus ojos habían unos lentes rosados...decidí hablarle pero ella se adelantó, volteó y dijo rápidamente

-Hola, me llamo Isis, y tú?

-Hola,mm...me llamo Valeria, mucho gusto, jeje

-Qué lindo nombre, el gusto es mio-dijo Isis-me cayó bien, parecía ser una buena chica...

Empezamos a hablar, del colegio, los profesores, compañeros, en fin...tal vez hablamos algo fuerte pues Jonathan y Anghelo voltearon a ver que pasaban, y me reconocieron

-Hola, Vale-dijo Jonathan, a lo que respondí con un único "hola"

Luego vi que su primo, Anghelo, también había volteado para ver que estaba pasando, me vio, al verlo pensé que era callado y algo introvertido...

El tiempo me demostraría que Anghelo era todo lo contrario a lo que yo me imaginaba en ese preciso instante...

-Hola, Valeria-dijo él secamente

-Hola, Anghelo-le dije amigablemente

Los 4 empezamos a hablar, hasta que sonó el timbre para el primer recreo. Me despedí de los muchachos, y me reencontré nuevamente con Salo y Tasia, salimos al recreo juntas y comimos algo que compramos en el cafetín, que mágicos momentos, no importaba cuánto frio estaba haciendo en ese momento, sencillamente ellas evitaron mi hipotermia con sus cálidas sonrisas y dulces risas...

El resto del día no hice más que prestar atención a clases, hablar con Isis, Jonathan y Anghelo, y compartir mis demás recreos con las chicas...fue un buen día, casi cuando íbamos ya a salir, nuestra tutora dio nuevamente un discurso de bienvenida, y finalizando eso salimos del colegio...

Me despedí de mis amigas, aunque deseaba ir con ellas, a mí me recogían, así que busqué rápidamente a mi papá, antes de que la llovizna que caía en ese momento se convirtiera en una torrencial lluvia. Luego ya de algunos momentos vi a mi papá y fui con él, por más que deseaba mucho ir sola a casa prefería que mi papá me recogiera, me hacía sentir segura y feliz <3. Ibamos caminando hacia nuestro carro, cuando divisé a unos 50 metros más o menos a alguien conocido. Alto..., con el cabello negro y lacio...era Antonio; al fin lo volvía a ver después de aquella separación, lo vi, ahí estaba ese chico alto, con ojos comprensivos, dulces y soñadores...me vio.

Le regalé una de mis más lindas sonrisas, él hizo lo mismo, Antonio estaba en medio de la lluvia mientras me miraba con sus brillantes ojos, nunca ninguno de mis pocos amigos me había mirado así, parecía que mediante esos ojos marrón oscuro me transmitía una cálida alegría, una alegría que decía cuanto apreciaba haberse encontrado conmigo en ese momento, que decía cuanto apreciaba haberse conocido aquel día, ahí estaban sus brillantes ojos...

Me alegré tanto de verlo, después me enteraría que él estaba en un salón selección, para nuestra mala suerte los recreos de los salones selección y regular no coincidían, al pasar cerca de él le saludé y luego me despedí nuevamente con una sonrisa...

Llegué a mi casa, después de almorzar y avanzar en hacer mis tareas, me alisté para ir al MyELT, la academia de inglés a la que asistía de lunes a jueves. Cuando llegué vi que Estrella y Hiro me habían guardado sitio, me senté al lado de los dos, yo estaba al medio.

Hiro me sacó tema de conversación, hablamos animadamente durante varios minutos, tomé algunos apuntes y cuando la clase terminó, los tres decidimos acompañarnos a nuestras casas, (mi papá trabajaba en ese trance de tiempo por lo que no podía recogerme, y mi mamá también paraba ocupada durante esos momentos). Caminamos mientras hablábamos de nuestros distintos colegios, ellos seguían en el mismo colegio donde habían estudiado desde niños. Yo les conté mi experiencia, y me di cuenta de que mientras ellos hablaban de todos lo defectos de sus colegios, yo no encontraba defecto alguno en KEANE, mi nuevo colegio. Sencillamente me parecía ideal, perfecto, lo amaba por todos lados y me requeencantaba, me gustaba todo de KEANE, presentía de que este sería un excelente año... 

Y claro que tenía razón, aunque habrían muchos altibajos, este iba a ser un mágico año, uno que recordaría con mucho cariño e ilusión...

Mientras seguíamos caminando bajo el estrellado cielo, hablamos más de otras cosas, no faltaron las incoherentes bromas de Hiro, los regaños de Estrella y mis risas...

Cuando pasó el tiempo, descubrí que la mayoría de las personas que me conocían amaban mi risa, yo no hallaba motivo en eso pero según ellos mi sonrisa era mágica, dulce y algo tierna, y mis risas...mis risas eran demasiado contagiosas...

Terminamos riéndonos de todo lo que había pasado, pues además de todos los chistes que se nos ocurrieron, Hiro dijo que nuestro profesor se parecía a "Mi villano favorito" no solo por su nariz, sino también por sus delgadas piernas y su voluminoso cuerpo, esas bromas eran...no tenía palabras, solo risas jajaja, pobre profesor Steven.

Después de algunos minutos, llegamos al punto donde nos separabamos, Hiro se fue por un lado y Estrella y yo tomamos el habitual camino que nos conducía a nuestras casas. Trella y yo seguimos hablando...hablamos de nuestras ocurrencias, de nuestros pasatiempos...de cada cosa que se nos ocurrió. Trella me parecía alguien en quien podía confiar, compartíamos muchas situaciones similares, teníamos algunos gustos en común pero la quería como una buena amiga, lo era.

Lo era

Llegué a mi casa, después de todo lo que tenía que hacer y después de completar algunas tareas, me fui a dormir, antes de que mis ojos se cerraran pensaba en todos los recuerdos que crearía en KEANE, de las experiencias que obtendría con el tiempo, de cada cosa que viviría...

Valeria, pensaba en todo que viviría ese año, que apenas comenzaba, habían tantas cosas por descubrir, por disfrutar, tantos amigos con los que nunca pensó coincidir, pasaría días mágicos, cada día era y sería un nuevo recuerdo, un recuerdo muy valioso que atesoraría en su corazón durante los  siguientes años. Vale se daría cuenta de tantas cosas... Cada mes tendría diferentes y lindos recuerdos, diferentes emociones y situaciones, habrían altibajos, diferentes percepciones, sus sentimientos se mantendrían iguales, algunos se intensificarían más, por supuesto.💛 Pero a pesar de eso Valeria descubriría que de verdad podría encajar en su nuevo cole, ella seguiría siendo la dulce, inteligente y divertida que siempre fue, se daría cuenta de que un cambio puede cambiar intensamente su vida. Valeria pasaría por tormentas, tormentas tan fuertes que pensaría que no resistiría...y también por momentos tan preciosos que iba a desear congelar el tiempo, iba a desear que eso durara para siempre...a pesar de tantas cosas este año sería diferente, y aunque ella cambiaría un poco seguiría siendo la misma chica de siempre. Seguiría siendo la chica de cabello ondulado-rizado y café claro, de ojos brillantes y avellanados, seguiría siendo dueña de esos ojos marrones, de esas blancas perlas en su boca. Seguiría amando los atardeceres, la música, los libros y la poesía; las series de Netfilx, los k-dramas, todo lo que amaba lo seguiría amando...❤