☆¡Ships De Norcorea!★

🇰🇵Norcorea × Japón🇯🇵

Contenido: Violento y temas delicados. Si se sienten incómodos recomiendo no leer esta parte.

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Demente

Japón era una 'persona' mal de la cabeza, tal vez era su pasado o su historia. Una persona demente, que se había enamorado de un ser con problemas y también mal de la cabeza.

Norcorea una persona con bastantes traumas, destruido mentalmente, demente y mal de la cabeza.
Tan solo faltaba que otro tipo llegara y lo arruinará más de lo que ya estaba.

Pero raramente se amaban, apesar que sus problemas los afectarán a ellos y su relación.

Su amor abusivo y lleno de enfermedades.

Tantos momentos enfermos.

–Perdón...–

Tantas disculpas que ya se había vuelto algo común.

¿Como podrían ser una pareja normal y limpia cuando ellos no eran normales y estaban sucios?
Pero ambos conseguían consuelo en ambos, estaban igual que jodidos.
No importaba los golpes, las peleas, los ataques...

–¿Sabes que te amo mucho?–

Decía aquel hombre, aquel japonés.
Que movía su cuerpo al ritmo de la música.

–Te tendré para siempre conmigo, a mi lado. Muerto o vivo, estarás conmigo para toda la eternidad, bailare con tu cuerpo, tendré relaciones con el y le diré todo lo que pienso.–

–Estas demente, Japón...– Norcorea levantó la mirada y se encontró con los ojos carmesí de su pareja.

Tenían varios momentos románticos y la verdad nunca faltaba aquel mensaje enfermo o incomodo.
Pero, tenían también momentos violentos y grotescos.

–¡Abre esa puta boca y habla! ¡¿Que mierda tienes con ese tipo?!– Los gritos de parte de Japón. Aquellos celos enfermizos y...

Dum.
Primer golpe.

–¡Tienes mierda en la cabeza, estas enfermo, Japón!–

¿Se podía decir que era un amor abusivo y extraño?
¿Un amor enfermo y demente?

Uno de por sí estaba jodido y el otro estaba jodido, que por culpa del otro había empeorado a una situación crítica.

Norcorea se quemaba, esas palabras 'románticas' eran una manera indirecta de decir que al final nunca iba poder salir de ese lugar.
Y que apesar estando muerto ese tipo utilizaría su cuerpo como un muñeco, para saciar su soledad y consuelo, sus ganas y necesidades.

Para entenderlo mejor, Japón ya era una persona que estaba arruinada a un punto muy abajo y Norte aún no estaba tan abajo, pero Japón lo empujaba hacia abajo, lo undia al fondo junto a su demencia.

Japón

Yo bailaria con tu cadáver, lo trataría como un muñeco, al cual cuidaría y le demostraría mi amor.
Tu lindo cuerpo saciará mis fetiches, mis más grandes imagiciones.

Te amo
Te amo
Te amo
Tanto como para dejarte ir de mi vida.

Conservaré tu cadáver, tu cabeza, tu ojo, tus labios...
Serás mio por todo la eternidad.

De: Japón
Para: Norcorea

–¿Lo ve? Es un demente enfermo.– Dijo Norte para aquella organización al frente suyo.

ONU, leyó la carta, cada una de sus palabras. Hizo una mueca y después miro al Asiático.

–¿Hace cuanto que terminaste con el y huistes?

–Hace cinco meses y no ha dejado de enviarme cartas de ese tipo.

Si, Norcorea recapitulo y le puso un fin.
Pero como decía Japón, Norte no iba escapar de sus manos.

ONU asintió con la cabeza y dejo la carta en la mesa.
Pensando en una solución, entendía a Norte.
Era difícil que al tipo el cual te enamoraste sea un loco demente.
El cual cometería necrofilia con tu propio cadáver.

–Tendrás un guardaespaldas y también mantendremos vigilado a Japón.

–Bien...

–Te diré algo, cuídate ¿si?– Norte lo miro y sonrió un poco.

–Tu preocupación me ayuda.– Dijo Norte, su mirada bajo hasta la carta y después habló. –Quiero que me cumplas un deseo o un favor, como lo quieras tomar. Si llego a morir en un futuro... quiero que quemes mi cuerpo.

ONU entendía porque aquella petición.
Asintió y sonrió un poco.

–Lo haré...