Stay Away From Him ➳ Luke Hemmings

卌Attitude, not personality

Narra Kate:

¿ Alguna vez sintieron como si las cosas malas solo les pasaran a ustedes solos ?, bueno yo si. Ahora me encuentro en frente de mi armario sin saber si vestirme para salir y despejar mi mente o quedarme en mi cama, sinceramente no tengo las fuerzas como para salir, pero decido que es lo mejor y comienzo a vestirme. Abro las puertas de  mi pequeño armario celeste pastel y busco que ponerme, luego de unos 5 minutos escojo un top  blanco, una pollera estilo 'skate' naranja y mis converse blancas bajas. Cuando termino de cepillarme  el cabello noto que mis ganas de salir bajan, pero por otro lado se que si no salgo estaré deprimida toda la tarde, prefiero airearme y despejarme.
  Recojo mi teléfono, lo coloco en mi bolso y estoy lista para irme. Comienzo a bajar los peldaños color café de la escalera y llego a mi gran cocina, agarro una manzana y me la termino antes de darme cuenta, estaba muerta de hambre, claro, si no comí ayer por la noche. Recuerdo cuando estaba en Los Ángeles con Calum, todas las veces que me he quedado en su casa su madre me cuidó más de lo que mi verdadera madre ha hecho en toda mi vida. De todas formas, la manera en la que los describo no refleja su verdadera personalidad, mis padres, nunca estuvieron para mi, trabajan todo el tiempo en el hospital y casi nunca los veo, pero no es que me traten mal,  cuando los veo me preguntan como estoy o me peguntan por mis notas, el tema nunca va más allá de eso, pero por lo menos aprecio que se "interesen" aunque sea un poco. Se que suena infantil lo que estoy diciendo, pero creo que dirían lo mismo sí no tuvieran una relación estrecha con sus padres, desde que naces sabes que estas solo en lo que hagas, es lo que yo pensaba, por lo menos hasta que apareció Calum. En tantos recuerdos se me pasó la hora y ya  eran la 1:45 p.m. Salgo de mi casa. Cuando cierro la puerta me volteo y puedo ver a Luke  a unos metros de mi, apoyado contra su auto. Llevaba pantalones ajustados negros, zapatillas del mismo color y una remera azul de nirvana. Cuando advirtió mi presencia se acercó.

-¿ Puedo ayudarte en algo?- dije con mi mejor sonrisa falsa.

-Vamos Kate, solo dime porque te fuiste tan a la defensiva cuando te traje ayer.- Rodé los ojos, Pude notar como la mandíbula de Luke se tensaba, desconozco la razón y tampoco me interesa  averiguarla.- Sigo esperando.

- ¿ y porqué tendría que darte una razón? ¿ qué te hace tan especial para tener que hacer lo que me digas?.- ví como una sonrisa se dibujaba en su rostro.

-Cariño, soy Luke Hemmings. Eres nueva por aquí, ve acostumbrándote.- me guiñó un ojo, no podía creer lo imbécil que era.

-Escucha Hemmings, sea  nueva o no, tú no me dices que hacer,  ve acostumbrándote..- Luke levantó una ceja, yo tomé eso como una invitación para irme y así lo hice, dejándolo con la palabra en la boca, cuando estaba caminando hacia mi auto podía escuchar sus pisadas detrás mío, no le temía, solo quería irme. Cuando estoy por abrir la puerta del auto, Luke apoya su mano en la puerta, empujando para que no pudiera abrirla.

-Luke... quita tu maldita mano de la puerta. Ahora.- pronuncié con rabia. La verdad es que nunca me caracterizé por tener mucha paciencia.

- ¿ por qué ? ¿ qué me harás?.- me sonreía ya que él sabía que no haría nada.

-Esta bien, me iré caminando.- le guiñé un ojo y me volteé, comencé a caminar y paro en seco cuando escucho la voz de Luke hablándome.

-Oye Kate! también venía  a avisarte. Fiesta en mi casa hoy, ponte algo que sea fácil de quitar, así me ahorras la perdida de tiempo.- Me quedé con la boca abierta, no podía creer que acababa de gritar todo eso. Luke ríe ante mi expresión y se coloca unos lentes ray ban negros que tenía colgados en la remera de Nirvana, esa remera dejaba ver todos los tatuajes que tenía  en los  brazos, aparentaba exactamente ser el gilipollas que era. Le dio la vuelta a su auto y se subió a este, en un pestañeo de ojos ya se estaba alejando a toda velocidad. Los pelos de mi nuca se erizaron, no podía creer como alguien iba tan rápido sin querer morir. De pronto tengo una imagen  de mi tía y muevo mi cabeza intentando que ese pavoroso pensamiento se esfume. De pronto mi teléfono comienza  a sonar.