Día 83

3 0 0
                                    


Otro año más... Otra vuelta en este planeta, otro día más... Solo para estar sentado, tomando llamadas, tal vez haciendo horas extras, y como siempre, tratándose más de tu abuela que de ti...

Otro año más... Siento una simple luna... Opacada por los habitantes de este planeta, donde pocos sacan su tiempo para observarte, para ver cómo tu luz se apaga...

Faltan 23 días, 23 días para que Colón se encuentre con América, 23 días para que un 14 de octubre de hace casi 79 años naciera la persona por la cual todos estarán atentos... Para cuando muera... ese día sea más miserable.

Sábado 14 de octubre del año 2000 a las 10:32 de la mañana... El día en que este loco sin sentimientos naciera... El día en que fui regalado, más no cuidado.

Otro día más, otra semana más... Para confiar en nuevas personas, para recordar que muchos han perdido mi confianza, para recordar que soy uno más.

Para recordar que este día es más importante para otros y yo soy solo un accesorio.

Para recordar aquel 26 de abril donde casi muero, aquel 1 de noviembre donde las voces en mi cabeza casi ganan...

Para recordar que pase lo que pase debo seguir trabajando en el seguro gringo.

Para recordar que se me dificulta mantenerme vivo...

Cada día que pasa, la sensación de vacío se hace más profunda. Las risas y las conversaciones a mi alrededor se sienten lejanas, como si pertenecieran a otro mundo, uno al que no tengo acceso. La soledad se convierte en mi única compañera, una sombra que me sigue a todas partes, recordándome constantemente mi insignificancia.

Las noches son largas y llenas de pensamientos oscuros. Me pregunto si alguna vez encontraré un propósito, algo que me haga sentir completo. Pero cada mañana me despierto con la misma sensación de desesperanza, atrapado en un ciclo interminable de tristeza y desilusión.

El trabajo, que debería ser una fuente de estabilidad, se convierte en una carga insoportable. Las horas se arrastran y cada tarea se siente como una montaña imposible de escalar. Me esfuerzo por mantener una fachada de normalidad, pero por dentro, me estoy desmoronando.

Las fechas importantes, que para otros son motivo de celebración, para mí son recordatorios dolorosos de lo que he perdido y de lo que nunca tendré. Los aniversarios de momentos traumáticos se clavan en mi mente, como espinas que nunca puedo quitar.

A veces, me pregunto si alguien notaría si desapareciera. Si mi ausencia dejaría algún vacío o si el mundo seguiría girando sin inmutarse. La idea de desaparecer se convierte en un pensamiento recurrente, una tentación que se hace más fuerte con cada día que pasa.

Pero a pesar de todo, sigo aquí, aferrándome a la esperanza de que algún día las cosas mejoren. Que encontraré una razón para seguir adelante, algo que me haga sentir que vale la pena luchar. Hasta entonces, solo puedo seguir poniendo un pie delante del otro, esperando que el mañana sea un poco más brillante que hoy.


Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Sep 22 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Helpless BoyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora