Equinoccio

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Saludos nuevamente.

Después de mucho años vuelvo por estos lados, me disculpo grandemente por haber desaparecido mucho tiempo, prometo que eso no volverá a ocurrir, paso a dejarles esta pequeña historia que participara en la #DinamicaEquinoccio de la escritora Anyara Taisho, solo sin antes dejar la correspondiente notas, los hechos se desarrollan después del final de la historia de Sentimientos.

Espero la disfruten la lectura.

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Un nuevo día había llegado a la era sengoku y había mucho movimiento en el templo Higurashi debido a la cercanía del festival Shūbun No Hi, Kagome y la anciana Kaede preparaban el templo para la celebración mientras que los demás juntos con aldeanos decoraban alrededor del templo con muchos adornos, para sorpresa de Kagome su esposo había pasado mas tiempo en la aldea que de costumbre incluso no se alejaba del lugar mas que solo para conseguir leña o alguna otra necesidad.


*** Días Después***


Se llego el día del festival y para sorpresa de Kagome al despertar en su habitación InuYasha no se encontraba con ella y cerca del futón había una nota que decía.

"Kagome, te espero al atardecer en las cercanías del manantial escondido del bosque, VEN SOLA."


Kagome extrañada por la petición de InuYasha, de ir sola en primer lugar y mas en esa fecha que se celebraba el equinoccio de otoño, porque anteriormente el monje Miroku le había comentado que siempre que ocurría el equinoccio fuera el de primavera o otoño InuYasha se alejaba de la aldea y prefería estar solo y por primera vez quería que ella fuera con el.

- Sera esa la razón por la que InuYasha estuvo mas tiempo en la aldea de lo normal - Menciona al viento Kagome mientra preparaba algo para comer.


*** Horas mas tarde ***

Kagome con mucho esfuerzo se pudo liberar de la anciana Kaede y sus amigos como pudo y se dirigió al lugar de encuentro con su amado InuYasha; Al llegar al lugar faltaba unos minutos para que atardeciera y no veía a su esposo por ningún lugar.


Cuando por fin llega el atardecer ella siente una presencia demoníaca muy fuerte en las cercanías, así que prepara su arco cuando ve moverse unos arbusto cercanos y de ellos ve salir una cabellera negra que le dice.

- Kagome baja el arco, soy yo - Con una voz muy ronca.

Ella lo observa con detalles y puede observar sus ojos rojos completamente y las marcas moradas de su transformación demoníaca en su rostro.

- Tú no eres InuYasha - Le responde, sin dejar de apuntarle.

- Soy yo Kagome -

- No; No eres - Tensa mas la cuerda del arco y apunta directo al corazón del Hanyō.

- Kagome, soy yo; Se que parezco un demonio, pero estoy consciente y no te haré daño, Baja el arco por favor -

Kagome confiando en las palabras que escuchaba decide bajar el arco.

- Gracias Kagome; Perdón que me veas en esta forma, he querido contártelo hace mucho pero tenia miedo de tú reacción -

- ¿Porque tenias miedo? - Dice mientras se acerca a InuYasha.

- Porque se que cada vez que mi sangre demoníaca tomaba el control tu salias lastimada, también porque en este momento mis tres apariencia forman uno solo -

- Es raro verte así - Dice mientras se acerca mas y se ríe.

- Oye no te rías, que no es gracioso -

Justo en ese momento Kagome se acerca completamente a InuYasha y coloca su mano en su rostro tocando sus marcas moradas, cuando de repente la luz del sol desaparece completamente y cae la noche, haciendo que una olea de energía demoníaca vibre y deje ver nuevamente la apariencia normal del Hanyō.

- ¿Qué paso? -

- Al caer la noche vuelvo a la normalidad, eso que viste solo pasa durante el equinoccios -

- Esa es la razón, por la que siempre te alejas de la aldea cada vez que va pasar esto -

- Correcto Kagome, porque no siempre tengo la misma apariencia de hoy -

- ¿Como así? -

- Durante el momento del equinoccio mis tres formas la humana, la Hanyō y la demoníaca se combinan tomando algo cada una y formando un solo ser -

- Eso significa que puede que en un momento tengas tu apariencia normal pero tengas la mentalidad de tú parte demoníaca -

- Exacto y no quiero que algo malo les vaya a pasar por mi culpa, por eso mejor estar lejos de todos lo mas posible -

- ¿Pero eso no explica porque me pediste venir aquí? -

- Lo hice porque como te lo prometí el día de nuestra boda, apoyarnos en los buenos y malos momentos, siento que el que yo te estuviera escondiendo este secreto no es muy bueno de mi parte -

- InuYasha - Dice mientras se acerca a su rostro y le da un corto beso en los labios.

- Ademas quería agradecerte por hacerme la persona mas feliz del mundo Kagome -

- ¿Pero yo no he hecho nada? -

- Claro que si, estar a mi lado y permitirme ser tu esposo es mucho para agradecerte y quería recompensarte confesándote este secreto que nadie mas sabe -

- Eso quiere decir que no se lo comentaras a los demás -

- Aun no creo que sea el momento oportuno para que lo sepan los demás; Pero bueno dejando de lado lo de mi transformación, también te cite aquí para otra cosa -

- ¿Para que mas quería que viniera aquí? -

- Para esto, ven acompáñame -

Le dijo mientras la toma de la mano y la lleva hacia el manantial detrás de los arbustos de donde salio y al llegar observa una tela extendida en el piso con una cesta y frente a ellos el manantial que reflejaba la luz de la luna.

- InuYasha -

- Te lo mereces, estos días haz hecho mucho y creo que debo consentir un poco a mi esposa -

Después de sentarnos en la tela, InuYasha abre la cesta y dentro habían mochi, toma uno y se lo acerca a su esposa.

- Mi esposa merece comer cosas dulces, para seguir siendo dulce y tierna conmigo -

A lo que ella solo hace un puchero mientras da una mordida al mochi y disfruta el sabor de este.

- Que rico, tú los hiciste Inu -

- No, los conseguí de un aldeano como pago por un trabajo -

- Están deliciosos, prueba - Dice mientras agarra uno de la cesta y se lo da InuYasha en la boca.

- Que rico, creo que ya se que nuevos dulces le pediré a mi esposa que me haga en nuestra casa -

Kagome ante el comentario de InuYasha solo hace una pequeña risa y luego continúan disfrutando mientras observan en el manantial la luz de la luna y luciérnagas iluminando el lugar.

FIN.

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Nota.
Shūbun No Hi:
(秋分の日) o Día del Equinoccio de Otoño.

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Espero les haya gustado y haya disfrutado; Esta historia marca mi regreso a la escritura después de varios años, así que espero sus comentario.

Se despide cordialmente su amigo y escritor.
Fenix Escarlata Taisho.

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