Fruto de inmadurez

Día Madre E Hijo

J: esta historia ta más muerta.

R: ni que lo digas, oye que hacemos aquí?

J: pos venimos a actualizar, que no es obvio.

R: adivino, te están amenazado?

J: qué comes que adivinas?

R: fua, bueno, iniciemos, que a esto solo le quedan 3 caps.

J: ya digiste.
_____________________________________________

Sab 9 de jul

10:30 A.M.

Era un sábado soleado,  el canto de los pájaros resonaba en el aire. La luz dorada del sol se filtraba a través de las cortinas, creando un ambiente cálido y acogedor en la pequeña casa de Rakkun.

Rakkun se despertó viendo que su esposo cap ya se había ido a chambear.

Ella bajó a la cocina disfrutando de la tranquilidad mientras preparaba el desayuno para ella y su chamaco.

El aroma del café recién hecho y las tostadas dorándose llenaban la cocina.

Después de un rato, Lorenzo, apareció en la cocina con sus ojos aún cerrados, su cabello despeinado  y la camiseta de paw patrol que llevaba puesta como pijama. (Yo quería una de esas)

Rakkun al ver a su hijo le sonrió y le dio un abrazo de madre.

Rakkun: buenos días mi lorenchito.

Lorenzo: buenos días, mamá ¿Qué vamos a hacer hoy?

Rakkun se sentó frente a él y, con una sonrisa tipo jeff de killer le dijo.

Rakkun: hoy es nuestro día especial. He planeado algo divertido para pasar el día madre e hijo.

Los ojos de Lorenzo se iluminaron, parecia los ojos de esos perros que tan en dieta y te piden pollo o carne.

Lorenzo: ¿De verdad? Cuéntame mami.

Rakkun: ta bien hijo, primero, vamos a ir al parque, y después te llevaré a esa heladería nueva que tanto te gusta para que pidas tu sabor de helado favorito.

A Lorenzo aparecia que lo había parposeído un conejo ya que se puso a saltar en su silla.

Lorenzo: sí! Vamos al parque! Puedo llevar la pelota?

Rakkun: por supuesto, pero primero hay que comer.

dijo rakkun y juntos comenzaron a comer el desayuno.

Después de comer, se vistieron y prepararon todo lo necesario para el día de hoy.

Rakkun puso una sabana en una mochila, junto con algunas botellas de agua y una pelota.

Lorenzo por su parte, se encargó de llevar su juguete favorito que era un peluche de freddy que lo acompañaba hasta para ir al baño.

Cuando llegaron al parque, el sol les pegaba más que boxeador profesional y el aire estaba impregnado del olor a hierba fresca.

Lorenzo corrió hacia el campo de juego mientras rakkun lo seguía a un paso más lento, disfrutando del alrededor.

El parque estaba lleno de niños jugando, familias haciendo picnic y parejas disfrutando de la compañía mutua.

Lorenzo: mira, mami *gritó Lorenzo, señalando un columpio colorido* vamos a jugar.

Rakkun asintió y se unió a él. Jugaron durante horas, subiendo y bajando por el tobogan, lanzando la pelota y riendo como ardillas.