Park Jimin es un padre soltero que, debido a una estafa, termina compartiendo casa con un desconocido.
Min Yoongi, un hombre solitario que oculta un doloroso secreto, ahora se encuentra con dos inquilinos en su hogar.
★Advertencia: esta es una histo...
-Necesitamos hablar - pide con seguridad Bohyun, observando directamente al doncel.
Ignorando intencionalmente la pregunta que el mayor le había hecho, no le importaba en lo más mínimo el hombre. Su único interés era el doncel que tenía delante de él.
Bohyun sabía de los muchos errores que cometió en el pasado, pero ahora las cosas eran diferentes y quería de alguna forma compensar lo que había hecho, estuvo durante dos años buscándolo.
-No tengo nada que hablar contigo - respondió directo el doncel.
Jimin estaba seguro de que Bohyun preguntaría acerca de su bebé y no se lo iba a permitir.
-Ya lo escuchaste - acota Yoongi con el ceño fruncido.
-Por favor Jimin, hablamos, te he buscado durante todo este tiempo - suplica nuevamente el hombre.
La mirada del doncel se oscurece más, Jimin ya no era ese joven ignorante y anhelante de amor que Bohyun había conocido, ya no creía en sus sucias palabrerías.
- Llegaste tres años tarde Bohyun, ya tengo mi vida resuelta y en ella no tengo la necesidad de agregarle problemas innecesarios.
La sinceridad en las palabras del doncel tranquilizaron el corazón de Yoongi, que lo observaba con admiración. Jimin era una persona tan madura y segura de sí misma.
-Papá - susurra la pequeña, aun escondida en el cuello del mayor. Estaba asustada, no le gustaba el señor que la miraba raro.
Yoongi se encontraba al margen de toda la situación, no iba a meterse más si Jimin no se lo pedía, pero sentir el miedo en el pequeño cuerpo de su pulga fue suficiente para actuar.
-Jimin... - intenta nuevamente hablar Bohyun.
-Suficiente, largo - gruñe Yoongi deteniéndolo.
Bohyun le dio una mirada de total desagrado al mayor.
-¿Por qué mierda te sigues metiendo tú? Esto entre Jimin y yo- escupe con molestia.
- Por mi familia me meto en dónde sea - declara el mayor mientras se va acercando mucho más al hombre - y la única mierda aquí, eres tú - termina con una mirada oscura cargada de asco sobre Bohyun.
Bohyun también dio un paso desafiante, Yoongi tenía unas inmensas ganas de golpearlo desde que averiguó quién era el infeliz, pero tenía a su pequeña pulga en brazos, no podía hacer nada.
El hombre intenta hablar, pero nuevamente es detenido por la voz de una mujer mayor que se les acercaba. Hyuna quién se encontraba sirviendo algunas mesas presenció toda la situación y antes de que fuera peor decidió interceder.
-Caballeros están incomodando a los demás clientes, les pido amablemente que se retiren - expresa la mujer acercándose.
-No te preocupes madre, Bohyun ya se estaba retirando - comenta rápidamente el doncel avergonzado por todas las miradas puestas en ellos, Yoongi asiente con una sonrisa triunfante.
-Esto no termina aquí Jimin, volveré - dicta retirándose muy molesto del lugar, la mujer que lo acompañaba salió apresurada detrás de él.
Jimin soltó un suspiro - Gracias - expresa con cariño a su madre, Hyuna asiente con una sonrisa y su mirada se dirige al pelinegro presente.
-Min Yoongi, tan idéntico a Taehoon... Impulsivo y perspicaz - anuncia y Yoongi asintió un tanto avergonzado.
-Hola - saluda el mayor con una sonrisa de labios cerrados.
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El día había continuado de lo más normal, nadie comentaba absolutamente nada acerca del encuentro con Bohyun, y a pesar de que era un tema pendiente, Jimin agradecía inmensamente el no concentrarse en algo sin importancia. Yoongi aún se sentía un poco avergonzado por la manera en la que tuvo que conocer a su futura suegra. Hyuna le había dicho al menor que subieran para pasar el mal rato.
-¿Se durmió? - consulta el doncel acercándose.
Yoongi se encontraba sentado en la sala esperando a Jimin, donde anteriormente estaba jugando con su pulga y Haru, antes de que se quedase dormida. Desde que el mayor había llegado, no se había despegado de su lado, tenía miedo que se volviera a ir y estuvo luchando con su propio sueño, pero fue vencida por el cansancio.
-Sí, quedó agotada - responde el mayor, observando a la pequeña dormir en sus brazos
El doncel se sienta a su lado y con una sonrisa le extiende un vaso de té, sabía que a Yoongi le encantaba.
-Te he extraño mucho - comenta acercándose mucho más a ellos.
Yoongi sonríe - También la extrañé - gira su cabeza en dirección al doncel - Los extrañé - expresa con amor observándolo directamente a los ojos. El doncel sonríe sonrojado ya había escuchado eso.
Yoongi ya no podía aguantar desde que lo había visto, anhelaba bastante besarlo y sin previo aviso junta sus labios con el doncel en un casto beso lleno de sentimientos, Jimin lo recibe gustoso también lo había extrañado bastante. Yoongi lo sujeta del cuello, empujó tímidamente su lengua pidiendo permiso que Jimin le concedió. No sabía cuántos minutos había pasado, pero ambos seguían sumisos en su beso que se estaba tornando más fuerte hasta que Jimin decide separarse lentamente, quedando a centímetros del rostro del mayor, ambos se encontraban muy agitados.
-Jimin tengamos una cita esta noche - pide Yoongi.
El doncel lo observa sorprendido - ¿Una cita?- consulta confundido.
-El hotel que reservé no está muy lejos de aquí - declara.
La sonrisa del doncel se desvanece - ¿No te quedarás con nosotros? - pregunta.
-No quiero molestar cariño, además creo que tu madre no se llevó una buena impresión de mí - declara nervioso.
Jimin ríe ante las palabras de Yoongi, a su madre le había agradado bastante por defenderlos, pero solo estaba fingiendo ser una suegra mañosa.
-Mi madre ya te adora - acota.
-No lo parece -
-Nos defendiste, créeme ya te ama - declara con seguridad.
Yoongi entonces pudo sentir que la preocupación se desvanecía dentro de él, lo menos que quería era no agradarle a la madre de Jimin.
-Entonces... ¿Park Jimin, tendrías una cita conmigo?- consulta nuevamente acercándose para robarle un beso.
-Si - responde con total felicidad.
El mayor sonríe verdaderamente contento, esta noche tenía un plan y una sorpresa para su flor.
Por otra parte, estaba un hombre muy molesto pensando en la forma de comprobar que la pequeña era suya, él estaba sumamente seguro que la niña era de él y se encargaría de probarlo cómo sea. Si Jimin no quería conversar a las buenas, buscaría la vía legal de la justicia, pelearía por la tutela de la niña.
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