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Capítulo 1: Secretos ocultos

Defteros se sentó en su asiento de siempre en la clase de Administración de Empresas, su mirada perdida en el profesor que hablaba sobre estrategias de marketing. Tenía 22 años y estaba en su último año de universidad, pero su mente estaba en otro lugar.

Mientras el profesor escribía en la pizarra, Defteros no podía evitar pensar en Asmita, su cuñado. Siempre había sentido algo especial por él, algo que no podía explicar. Era como si su corazón latiera más fuerte cuando Asmita estaba cerca.

Defteros recordó la primera vez que conoció a Asmita, en la boda de su hermano gemelo, Aspros. Asmita era el novio perfecto, guapo, inteligente y amable. Defteros se sintió atraído hacia él de inmediato, pero sabía que era imposible. Asmita estaba con su hermano, y él no podía permitirse sentir lo que sentía.

La clase terminó y Defteros se levantó, recogiendo sus cosas. Se dirigió hacia la salida, perdido en sus pensamientos. ¿Por qué no podía dejar de pensar en Asmita? ¿Por qué sentía que su corazón pertenecía a él?

Al salir del aula, se encontró con su amigo Kardia, que lo esperaba con una sonrisa.

"Eh, Defteros, ¿qué pasa? Pareces perdido en tus pensamientos", dijo Kardia.

Defteros sonrió débilmente. "Nada, solo pensando en mi familia".

Kardia lo miró con curiosidad. "¿Todo bien en casa?"

Defteros asintió. "Sí, todo bien".

Pero no era cierto. Defteros sabía que su secreto podría destruir todo lo que había construido con su familia. Y sin embargo, no podía evitar sentir lo que sentía.

¿Qué pasará cuando Defteros no pueda ocultar sus sentimientos más? ¿Cómo reaccionará Asmita al descubrir la verdad?












Mientras caminaban juntos por el campus, el teléfono de Defteros vibró en su bolsillo. Lo sacó y sonrió al ver el mensaje de Asmita.

"Hey, ¿cómo estás?"

Defteros se emocionó solo de ver el mensaje. Su corazón latía más rápido y su sonrisa se hizo más amplia.

Kardia, que caminaba a su lado, lo miró con curiosidad. "¿Quién es?"

Defteros intentó disimular, pero Kardia ya había visto la sonrisa en su rostro.

"Es Asmita", dijo Defteros, tratando de parecer indiferente.

Kardia levantó una ceja. "Ah, el cuñado favorito, ¿eh?"

Defteros se ruborizó ligeramente. Kardia sabía su secreto. Habían sido amigos desde la infancia y Kardia siempre había sido perspicaz.

"Kardia, no digas nada", dijo Defteros, mirándolo seria mente.

Kardia sonrió. "No te preocupes, Defteros. Tu secreto está a salvo conmigo. Pero tienes que admitir que es un poco complicado, ¿no?"

Defteros suspiró. "Lo sé. Pero no puedo evitar sentir lo que siento".

Kardia puso una mano en su hombro. "Estoy aquí para ti, amigo. Siempre".

Defteros sonrió, agradecido por la comprensión de Kardia.

Mientras continuaban caminando, Defteros no podía dejar de pensar en Asmita y en la posibilidad de que algún día pudiera revelar sus sentimientos.














Asmita llegó a su casa, sintiendo una mezcla de alivio y nerviosismo. No había visto a Aspros en todo el día y temía que su esposo estuviera en uno de sus malos humores.

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⏰ Última actualización: Sep 27 ⏰

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