Hoy es un día más, como los de siempre, tenemos firma en Sevilla y yo sigo aquí, en mi cama tumbado, mirando al techo.
- ¡Dani despierta! -Grita desde la
otra habitación mi hermano.
- Ya va, ya va. -Susurro.
Miro el despertador y son las 10:00 de la mañana y tenemos firma a las 11:00, empieza bien el día.
Voy hacia el armario y me pongo una camiseta blanca básica, unos pantalones y unas vans, ¿para qué arreglarme más? mis fans siempre me ven perfecto.
- ¡Vamos Dani que llegamos tarde! -Grita de nuevo Jesús pero esta vez entrando en mi habitación.
- Cómo no Jesús. -Ahogo una carcajada.
- ¿Qué? -Responde confuso.
- Tus vans, ¿no las lavas nunca?
- Oh perdón, don camisetas blancas.
- ¡Jesús y Daniel os quiero ver en medio segundo metidos en la furgoneta! -Grita nuestra madre haciendo que Jesús y yo salgamos corriendo del hotel dirigidos hacia la furgoneta.
Entramos en la furgoneta y en poco tiempo estamos ya firmando a miles de chicas, lo que yo no sabía es que una de ellas me cambiaría la vida por completo, nada sería igual después de ella.
