Jung Ho-Seok había estado en coma durante más de 7 meses cuando el médico dijo que finalmente había muerto. Fue enterrado en un día lluvioso en un pequeño cementerio a dos kilómetros de su casa.
“Que descanses en paz mi amor te amare por siempre mi lindo hobi”, dijo su esposo. Pero si embargo no lo haría . A última hora de la noche, un ladrón con una pala y una linterna comenzó a desenterrarlo. Como la tierra seguía estando suelda, llegó rápidamente al ataúd y lo abrió. Su presentimiento era cierto. Jung Ho-Seok había sido enterrado portando dos anillos: un anillo de bodas con un diamante y un anillo con un esmeralda y 2 pequeños de rubí que brillaban como si estuviera vivo.
El ladrón se arrodilló y extendió sus manos dentro del ataúd para quitarle los anillos, pero estaban adheridos a sus dedos. Así que decidió que la única manera de tenerlos era cortando sus finos y largos dedos con un cuchillo. Pero cuando esté cortó el dedo con la alianza, este comenzó a sangrar, y Jung Ho-Seok se movio. ¡De repente, el se sentó! Aterrorizado, el ladrón se puso en pie. Golpeó la linterna y la luz se apagó.
Podía oír a Jung Ho-Seok salir de su tumba. Al pasar junto a él en la oscuridad, el ladrón se quedó allí congelado de miedo, aferrando el cuchillo con la mano. Cuando Jung Ho-Seok lo vio, se cubrió con su abrigo y le pregunto "¿quién eres ?",¿Conoces a mi esposo Jackson Wang.Al escuchar hablar al “cadáver”, el ladrón corrió.Jung Ho-Seok se encogió de hombros y siguió caminando, y no miró hacia atrás ni una sola vez.
Llevado por su temor y confusión, el ladrón huyó en la dirección equivocada. Se lanzó en la tumba aún abierta, cayó sobre el cuchillo que llevaba en su mano y él mismo se apuñaló. Mientras Jung Ho-Seok caminaba hacia su hogar para llegar con su esposo ,el ladrón se desangró hasta morir.