Omega de verdad.

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— Dios, esto es muy fuerte.

Escupió la otra alfa delante de él al verlo retorcerse en sus sábanas, con el cuerpo caliente y el pecho subiendo y descendiendo. Ella después de reprenderle solo se dedico a tomar paños húmedos y colocárselos en la frente aunque sabía que no serviría de nada.

— Gracias, Yoonah — Articuló Wonwoo aún tirado, sintiendo su piel sensible ante el frío. Estaba agitado a un paso de estallar, su hermana lo supo porque no era la primera vez que lo atendía en su celo — ¿a... qué hora llega p-papá?

— Ya va a llegar, intentará traer supresores — se detiene un minuto sacando el pedazo para colocar otro en su frente — Wonwoo, tal vez deberíamos llamar a Jun y...

Las feromonas de celo la estaban hostigando un poco mientras el alfa pelinegro empujaba la cabeza negando instantáneamente.

— N-no — jadeó decidido — No necesito a un omega, yo podré p-pasarlo s-solo...

Yoonah iba a remitir algo al respecto pero un golpe en la puerta los interrumpio, ambos hermanos giraron su rostro vislumbrando a otro alfa entrar a regañadientes. Su gran abrigo negro que lo cubría fue colocado en el perchero, cuando lo dejó colgado caminó hasta la mesa que estaba al lado de la mayor de sus hijos.

— Deberías traer a tu omega para que él te atienda, no puedes hacer lo que él quiera — se acercó a quitarle los paños de su frente perlado — Tú eres el alfa de la relación y él el omega, debe hacer lo que tú pidas.

— Papá no empieces — rogó él en un hilo de voz.

El hombre mayor suspiró.

— Solo te faltan unas diecisiete horas, campeón tú puedes — alentó con una voz paternal entonces, el alfa agradeció en su interior — Yoonah, llama a tu tío, hoy pasaremos la noche ahí otra vez.

A él si le interesaba como estaba su cachorro pese a que el alcohol a veces le juegue en contra y lo destape como un hombre avaro y alfista con su familia. Sin embargo, Jeon los quería, aunque sus demostraciones no lo ayudaban. Para Wonwoo él era un mal padre por ello y no era como si pudiera contradecirlo.

Lo era.

— ¿T-trajiste los supresores? — susurro de repente su hijo y Jaehyun se sintió miserable.

Él no los pudo robar en esta ocasión.

.......

Hoy Wonwoo había faltado a clases un día después de ver la película y Jun estaba alicaído.

Sus amigos lo presenciaron con un comportamiento bajoneado, los hombros del omega no se sacudían y sus saltos hiperactivos no se veian por ningún lado. Era como si su amigo los hubiera estafado con su personalidad todos estos años y ahora resultaba que era otra persona.

Seungkwan y Seokmin, se hallaban preocupados por obvias razones. Contaban con la suerte de compartir muchas clases con él así que solo era cuestión de hablarle en el receso y hacerle compañía, hasta tal vez distraerlo. Y eso hicieron.

Ahora se hallaban en la cafetería del instituto, formados en un circulo de tres, las feromonas tristes del omega afectando un poco sus sentidos del olfato. Seokmin fue el primero en atisbarlo con un degradado de inquietud en sus orbes, el omega intentaba comer pero le salía de forma desganada, y hacia como si la presencia de sus amigos no existiera.

— Hey, Junnie — le habló luego de un silencio y Jun levantó un poco la mirada hasta insinuar que obtenía atención de su parte — ¿En serio te afecta lo de Wonwoo?

El omega, al escuchar el nombre de su alfa no dudo en abultar sus labios mientras una capa lagrimal bañaba sus ojos gatunos.

— Extraño mucho a Wonu — gimoteó lloroso sobando sus párpados con la manga —¿Y si le pasó algo y no me dijo?

¿Y si rompió su promesa y ya no soy bonito para él?

Cada vez que Wonwoo no daba indicio de presencia su estado era deplorable. Pensaba con terror las cosas y podía llegar a crearse un fanfic angust en la cabeza. Pero era Jun, su naturaleza iba en dramatizar la mayor parte deltiempo. Solo que ahora lo sentía diferente.

Como... como un presentimiento.

— Tal vez se enfermó — demoró en proponer Seungkwan a su lado, que también se hallaba triste. Jun era el que pintaba de rosa su pequeño grupo, y verlo apagado también le afectaba.

Inmediatamente Seokmin asintió de acuerdo con él.

— Me hubiera avisado...

— Tal vez también se le haya caído el teléfono de sus manos luego de dar un gran estornudo. Ya sabes como estornuda él, la otra vez casi me saca volando — intenta armar el omega más joven. Jun solo niega con la cabeza y la hunde entre sus brazos, dejando en claro que paren con las irrisorias suposiciones.

Sintió dos manos colarse en su espalda sobando ésta con delicadeza, el castaño sabía que sus amigos estaban para él en ese momento y que tal vez debería dejar de ser tan paranoico.

Pero si Wonwoo se hubiera enfermado ¿Por qué no le había avisado? ¿Acaso él no era totalmente consciente del como se ponía cuando su adorado alfa faltaba?

— Hoy es su celo — una voz desconocida se cuelga en la conversación y los tres amigos levantaron la cabeza para divisarla con claridad. Era Kim Dahyun, la presidenta del consejo estudiantil y gemela del novio de su hermano Minghao. Jun arruga el ceño, aquella omega no le agradaba, antes de que Wonwoo y él fueran pareja decían que Kim pretendía al pelinegro.

— ¿Y tú como sabes eso, Kim? — Seokmin de los tres habló primero. Presenció amenaza ni bien Jun hizo una mueca.

La pálida solo tiró una risita mostrando las encías rosadas y Jun juro querer quitarle la sonrisa.

— ¿No recuerdas la lista de los celos? — preguntó, claramente divertida — Los profesores tienen uno para saber cuando van a faltar sus alumnos, así no podrían colocar faltas injustificadas.

Seungkwan y Seokmin la miraban dandole la razón mientras Jun caía encuenta de un detalle; su alfa jamás le había dicho cuando cae su celo.

Y sí Wonwoo se hallaba en ese estado eso solo significaba una cosa.

— Lo que debería ser un drama, es que tú estés aquí — volvió a hablar la pelinegra, caminando hasta él — Wonwoo es tu alfa y tú su omega. Y supongo que eres algo mayorcito para no atenderlo en su celo.

Dahyun quería llegar a algo, el castaño lo supo cuando vio el tinte de sus ojos oscuros combinarse con rabia.

— ¿Acaso este es el tipo de omega por el cual él no me aceptó? ¿Por un omega que le pide de todo pero que ni puede hacerle el favor más básico como ayudarle en su celo? — se burló arqueando una ceja y cruzando de brazos — ¿qué omega eres, Wen? ¿Un omega falso, infantil y abusivo?

— ¡Cierra la boca, Dahyun! — le gritó Seungkwan, verdaderamente se hallaba molesto al darse cuenta que a su mejor amigo le estaban llegando las palabras a su punto sensible.

La pálida se sorprendió un poco, ella juraba que Boo era un omega callado y sumiso incapaz de levantarle la voz a alguien. Como no buscaba más en ese lugar de todas formas, solo se peino un poco el flequillo y a paso de fémina candente se retiró de su mesa para ir a la suya.

Ni bien ya no sintieron su olor ambos amigos se dedicaron a abrazar a Jun intentando reconfortarlo. Él aceptó todo acto para tranquilizarse.

Al momento que tocó el timbre ellos se pararon dejando las bandejas a un costado para recurrir a la próxima clase, limpiaron un poco acomodando las sillas y esperaron a que el castaño saliera del baño para irse juntos a donde el horario les indicaba. Después de cinco minutos éste salió y caminaron juntos entre los pasillos intentando sacar plática de por medio.

Pero Jun estaba pensando muy profundamente las palabras de Dahyun.

Soft Sex | WonhuiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora