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Una semana y un poco más había pasado, las cosas parecían avanzar bastante bien tanto en la condición física de Felix como en la relación que se iba forjando entre ellos dos... Pero Seo aún no lograba hablar con él al respecto.
Lo intentaba, sí, pero cada vez que lo intentaba se sentía como un niño pequeño aprendiendo a soltar sus primeros balbuceos, así que terminaba cambiando el tema sin más.
Contrario a él, Hwang HyunJin había estado haciendo un excelente trabajo en investigar al increíble sujeto que había transformado a su mejor amigo heterosexual masculino en una masita de emociones encontradas que le impedían decir más de dos palabras en su presencia. Tener a alguien tan imponente como Seo ChangBin en ese estado era casi imposible, pero había una sola persona que lo había logrado sin hacer demasiado esfuerzo.
— Lee Felix, estudia en la facultad de danza, es bastante popular por su apariencia física, su personalidad amable y su talento para el baile, la verdad es que me sorprende no haber escuchado de él antes, el chico es increíble, ¿sabías que ganó casi ocho premios en el primer semestre? ¿Te imaginas lo difícil que es eso? Por supuesto que no te lo imaginas, pero te lo juro, es increíble, si yo fuera él, sería muy arrogante, no dejaría que nadie se acercara a cinco metros de mí, llevaría guardaespaldas y pediría cojines en los asientos, porque créeme, los asientos de la universidad están diseñados para joderte el trasero.
— Te estás yendo, vuelve al tema principal — habló Seo, no estaba dispuesto a escuchar charla innecesaria, debía saber más sobre él.
— Encima te pones exigente, no pues, ahora no te digo nada. Te hago el favor, ¿y así me pagas? Por eso uno debe de cuidar a quién llama amigo... Escucha, ChangBin, amistad es amigo, y los amigos no exigen.
— No te estoy exigiendo nada, tú solito te ofreciste a investigarlo.
— ¡Tenía curiosidad! Quería saber cómo era la persona que te tiene tan jodido, en serio, eres imposible, no te dió pena tirártelo no sé cuántas veces, ¿pero te da pánico de solo pensar en confesarte? Con todo respeto, pero no mames.
— ¡Es que es muy difícil!, no estás siendo objetivo, ¿siquiera lo has visto? Yo lo veo y siento que estoy viendo una pintura antigua muy valiosa, la primera vez que tuvimos sexo no pude dormir en toda la noche, mi mente no es capaz de procesar lo hermoso que es.
— Sí, te descompuso, tendré que llevarte a reparar o algo, no estás funcionando bien y-
Su comentario fue pausado al escuchar el timbre del apartamento.
— ¿Esperabas a alguien?
— No, dame un segundo, voy a ver quién es.
Mientras no fuera la intensa de su ex...
Su corazón se relajó cuando vio la imagen de Lee MinHo frente a la puerta, sosteniendo unas bolsas de compras en las manos y con una mochila en la espalda.
