Prólogo

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La nada y la vida

"En el principio, sólo existía la nada y la nada era todo, en el inmenso vacío habitaban criaturas de dimensiones inimaginables y sus creaciones, posteriormente llamados titanes y dioses, respectivamente.

Los titanes eran criaturas glotonas, capaces de devorar galaxias enteras de un sólo bocado, galaxias que los dioses creaban para ser devoradas, pues inmenso era su poder, pero no igualaba la fuerza de un titán, ni juntando a 3 dioses, fue así durante eones, hasta que uno de entre los dioses, sintió repentinamente un aumento de su fuerza divina, proveniente de una de las galaxias que había creado de reserva para cuando un titán tuviera más apetito, inundado por la curiosidad se asomó a observar a aquella galaxia, que hasta había olvidado que creó, esto lo descubrió quien más adelante sería el Gran Yhreos.

Para él, que el tiempo era una nada, en esa galaxia ya habían transcurrido millones de años, el azar hizo lo suyo, las condiciones atmosféricas y efectos tectónicos habían hecho lo suyo, había surgido vida. Curioso por dicho acontecimiento, vigiló meticulosamente el planeta, seres acuáticos aún primitivos, cuya vida brindaba de fuerza, poder y vitalidad, su descubrimiento no duró mucho, ya que toda la galaxia junto con ese planeta, fueron engullidos por uno de los titanes, pero este hecho fue clave en la existencia de los dioses, quienes atónitos de tan grande descubrimiento, empezaron a orquestar un plan, para acabar con el yugo de sus creadores los titanes, cuyas tareas asignadas agotaban la vida de los dioses.

La sublevación de los dioses

Ahora que sabían de como aumentar su poder, empezaron a crear galaxias, en las que replicaban las condiciones exactas en las que la vida surgía, acelerando el proceso, hasta ese punto, no importaba la vida inteligente, sólo la vida, una vez preparado todo, los dioses, liderados por Yhreos el Grande, los dioses gemelos Yrüel y Arüel, Durhändyl el herrero de los dioses y Grescös el malévolo. Juntos empezaron la batalla milenaria contra los titanes, a ciencia cierta no se sabe cuánto duró, ni cuántos dioses murieron, tampoco cuántos titanes fueron exterminados, sólo se sabe que acabaron con la existencia de los titanes, después de que Durhändyl creó un arma para cada dios, en una batalla feroz, éstas armas jugaron un papel crucial: La Lanza de Yhreos, las espadas gemelas de Yrüel y Arüel, el hacha de Ikheros, la maza de Durhändyl y el tridente de Grescös, dichas armas terminaron destruidas durante la última batalla y sus restos quedaron perdidos en medio del espacio infinito, desapareciendo en la eternidad.

La creación de Everndyl

Una vez acabada la guerra contra los titanes, los 6 dioses primarios, Yhreos, Yrüel, Arüel, Ikheros ,Durhändyl y Grescös, decidieron centrarse en un sólo planeta y ver brotar y desallorarse la vida, fue entonces cuando pusieron su atención en una roca espacial de buen tamaño, que mientras ellos batallaron por millones de años, estuvo flotando alrededor del sol más cercano que se topó, flotando a una distancia prudente para que pudiera existir la vida.

La superficie

Los primeros en obrar fueron Yrüel y Arüel, crearon todo animal y criatura viviente, también creadores del cielo con su gran belleza y su manto protector, también de la tierra verdosa, los áridos parajes de los desiertos, los montes y volcanes, también la inmensidad de los océanos y mares, los escurridizos ríos, los espléndidos lagos y para resumir, todo cuerpo de agua, tierra y roca, fue obra de los dioses gemelos de la creación.

Los enanos

El siguiente en obrar fue Durhändyl, quién todo rocas y les dio vida, seres de piel dura como roca y corazón frío como la nieve que baña sus montañas, incivilizados e impulsivos, de temperamento explosivo, pero disciplinados en el campo de batalla y líderes natos, los enanos, con una estatura promedio de 135 cm, de aspecto tosco y descuidado, mineros expertos, sus reinos los labraban en medio de las montañas, tan profundos como el abismo; estos ocuparon montañas rocosas y grandes minas naturales a las faldas de los volcanes.

Los hombres

El siguiente en obrar fue Ikheros, creador del hombre en todas sus formas, los hombres de piel negra, cuya piel era como una coraza natural (no tan dura como la piel de los enanos), resistente al sol, cuya altura oscilaba entre los 184 cm y los 210 cm, de gran fuerza y tamaño, sus cuerpos resistían trabajos muy pesados para los otros hombres, estos habitaron los áridos desiertos y construyeron ciudades y fuertes las gruesas capas de arena del desierto.

Los hombres de ojos rasgados, con una inteligencia y eficacia ligeramente superior al resto de hombres, fueron ubicados en las tierras orientales, lugar designado para ellos, expertos en el arte de domar y también domesticar bestias, disciplinados en todos los sentidos, sensatos y de cabeza fría a la hora de tomar decisiones y habidos guerreros.

Los hombres blancos, tan ordinarios como obstinados, sus habilidades en todo eran muy promedio, lo que a su vez era una ventaja al tener un poco de talento para todo, esto los hacía multifuncionales, mayormente dedicados a la agricultura, ganadería y la herrería.

Los elfos

Estos últimos seres, longevos por naturaleza, llegando a vivir hasta un máximo de 3200 años, su crecimiento y desarrollo es como el de un humano hasta cumplidos los 25 años, cuando cumplen esa edad, su físico se mantiene intacto, su envejecimiento se congela hasta llegar a los 1000 años, donde ya empiezan a envejecer a un ritmo lento, de describirlos físicamente, se sabe que sus cabellos suelen ser Rubios como el oro, rojizo como la sangre, también castaño como las hojas otoñales, su altura oscila entre 170 cm y 185 cm, de complexión delgada semi-atletica, de orejas largas y puntiagudas, disciplinados en el arte de la guerra, pero muy pacifistas, buscarán cualquier medio diplomático antes de ir por las armas, su posición en cualquier conflicto siempre será de mediadores, estos se asentaron principalmente en los bosques, pero también están los elfos rocosos, que viven en grandes montañas rocosas llegando a convivir o compartir hogar con enanos, también los elfos del desierto, de piel morena y orejas menos prominentes, para protegerse de las tormentas de arena.

Esto es pues, la historia resumida del origen de toda vida en Everndyl, pasemos a la siguiente lección muchacho...

El Caballero De La Luna Y El Bosque: Trono De SangreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora