• capítulo 1 •

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La vida ha sido muy buena para ellos, tienen un hijo, una hija y dos en camino, aman a sus hijos y saben que amarán a los próximos, pero siempre hay un problema.
Dicho problema, tiene por nombre, Minato; es un hombre muy amable, es muy buena persona, es muy fuerte y decidido, pero ahí está el problema, ya que a Zahorí, no le agrada para nada el anteriormente nombrado, después de todo, ambos dioses tienen títulos completamente distintos. Otro problema es que, Minato es el hermano mayor de Shinji, la esposa de Zahorí, pero ese no es el mayor problema, el problema más grave es que, Minato es el №1, en cambio Zahorí es el №2...

Ránking de dioses:
Minato: №1
Zahorí: №2
Yuuki: №3
Shinji: №4
Nile: №5

La primera parte del ránking de dioses es así, los primeros cinco puestos, y no cambiarán en aproximadamente un milenio, eso sí no muere algún dios y lo suplantan.

Narra Zahorí

-diossss, me estoy durmiendo...

-aguanta un poco más, ya casi llegamos -dije con ligero fastidio, Shinji ha estado cansada todo el día, y no es de extrañarse ya que esta embarazada, y de gemelos- solo un poco más...

-está bien, pero apresúrate... -dijo cansada, esos niños estaban drenando toda la energía que tenía, cosa que era rara, ya que es una diosa, la 4°ta más poderosa, tiene más energía de la que puede gastar, pero su embarazo la deja casi sin nada de energía -estos cachorros serán muy poderosos... -dice con tono cariñoso mientras acaricia su enorme vientre y luego suelta una risita -como anhelo poder tenerlos ya entre mis brazos...

-pronto..., ya estás en tu último mes de embarazo, falta muy poco para que nazcan nuestros pequeños... -dije mientras estacionaba el auto -ya llegamos...

-¡Aleluya...!

Sonrío y ayudo a Shinji a bajar del carro, ella ha estado insoportable últimamente, pero sé que no es su culpa y, aunque ha estado embarazada antes, nunca de gemelos, por eso sé que es algo distinto para ella y no puedo reclamarle por ello, además fui yo quien le pidió más hijos.

-te sientes mejor...?

-si, muchas gracias...

-bien, iré a por algo de comer, ¿Tú gustas al... -detengo mi pregunta al voltear y ver a Shinji plácidamente dormida en la cama. Sonrío, voy hasta la cama, la arropo, beso su frente y me voy para que ella duerma tranquila-

Al bajar, me encuentro con Konekomaru, mi hija menor.

-hola, padre... -dice la pequeña con una sonrisa -¿Cómo se encuentra mi madre...?

-hola pequeña... -dije mientras le daba un abrazo -Shinji está dormida, ¿Y tu hermano?

-Indra está en su alcoba, la está ordenando

-ya era hora, ese niño siempre es tan desordenado... -dije con una mano en la frente, haciendo reír a mi preciosa hijita -oye, Kon, ¿Sabes que?

-¿Que sucede, padre?

-te quiero... -dije mientras la miraba con una sonrisa, haciendo que ella salte hacia mis brazos y me de un fuerte abrazo, el cual correspondo con igual intensidad-

-y yo a usted, padre...

Zahorí estaba a punto de responder, pero se escuchó una puerta abrirse y un trote rápido bajar por las escaleras, luego algo cayó sobre el.

-¿Pero qué...? -dice volteando, viendo a su pequeño hijo sobre su espalda -Indra!, ¡¿Que te he dicho...?! -dice con la voz alzada, más no con enojo-

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⏰ Última actualización: Oct 19 ⏰

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