Capítulo 14. Misiones

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Como amo escribir.

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No hay tiempo para recuperarse, con el brazo vendado y algo medicada se pone de pie para hacer frente a la batalla.

-¡General Mon-El!- a su grito el hombre está de inmediato a su lado.

-¡¿Cuáles son sus órdenes?!

-Organiza a los altos mandos, alisten las tropas, médicos, recursos, quiero una línea de comunicación ordenada con todos para evitar confusiones ¡Ahora!

-¡Si su majestad!

-¡Comandante Ko! Quiero que los vigías mantengan su posición, aunque los metropolitanos vengan por el sur ¡No quiero que descuiden ni un solo hueco de la barrera! Despierte a la mitad de nuestras tropas civiles, entraremos en combate.

-¿Solo la mitad?

Kara detiene el paso para voltear a ver al militar.

-¡SÍ!- reitera agitada antes de retomar el paso a su ciudad hacia el centro de mando desde donde dirigirá la defensa de la ciudad-. No me hagas perder el tiempo, vamos a ser asediados toda la noche, la única forma de que podamos resistirlo será solo si nuestras fuerzas  descansan turnándose ¡Almirante Par! Lleven nuestros misiles al sur, empezaremos el ataque y liberen a la mujer que me salvó, es militar, el verdadero atacante fue Querl Dot, fue enviado por los Luthor para asesinarme, debe seguir por la ciudad, ella puede cazarlo en lo que hacemos frente.

-¡Si su majestad!

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Es un calvario, toda la noche llueven bombas. Las familias de Argo viven una pesadilla en sus propias casas, los albergues saturados ahora solo se encuentran habitados por aquellos que no son capaces de apuntar un arma contra sus semejantes, así que se ocupan de otras cosas como atender a los heridos.

La heredera al trono no duerme ni un segundo, pues las bombas con las que los atacan son de tanques que sus enemigos han robado, no cuentan con su propio armamento pues el movimiento Metropolitano es civil en su mayoría por lo que solo están usando fuerza ciega, desperdiciando munición.

Además la angustia de que en cualquier momento la torre en la que está Lena caiga al ser de las más altas de la ciudad le está destrozando los nervios ¡Si se acaba la comida en los próximos días, alimentar prisioneros será la última propiedad!

-¡Majestad!

La rubia levanta la mirada del mapa, está sola en el centro del mando, sus soldados solo se comunican por radio siguiendo sus órdenes.

-¿Qué pasa Lane?- dice volviendo su vista al mapa.

-¡Cinco horas de búsqueda! Rastrear a Dot se ha vuelto imposible con la destrucción de los edificios de la zona oeste.

Zor-El grita golpeando la mesa con su mano sana.

-¡Aaah! No importa gracias, no puede entrar aquí de todas maneras, no mientras sigamos bajo ataque.

>Kggg Frente sur destruido<

Desesperada, toma el comunicador.

-Dígale al capitán Gee que usen las armas antiaéreas, no tenemos que preocuparnos por aviones de momento.

Escucha quejas pero luego hay silencio en la línea, el estrés es tanto que destruiría la radio si no fuera crucial este momento para comunicarse con sus tropas. Podría llorar hasta que recuerda que Lane sigue ahí, mirándola del otro lado de la mesa con las manos tras la espalda. Parece tan fuera de lugar, como una muñeca, delgada, de baja estatura, mirada inexpresiva, sus ojos azules contrastan con su cabello oscuro y piel morena, nadie que la viera podría dimensionar la amenaza que es en realidad.

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⏰ Última actualización: 5 days ago ⏰

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