Muchos años atrás
Toda la familia Mikaelson se encontraba en paz a pesar de tener las amenazas constantes de su padre que en cualquier momento los podría encontrar y esa paz se iba a ir, Marcel y Rebekah estaban felices se habían casado a pesar de que al principio su hermano Klaus se negaba a que sea el prometido de su pequeña hermana, pero no podía negar lo cual feliz estaba su hermana de por fin haberse casado con el hombre que ella ama
En una noche de felicidad Rebekah descubrió que estaba embarazada lo cual al principio se asustó porque no se suponía que los vampiros no podían procrear hasta más tarde que fue con una bruja y está le había dicho que en una noche que está rodeada de magia siempre era todo posible, ella nunca quiso ser vampiro quiso ser humana porque así iba a lograr tener su propia familia pero está era su mayor oportunidad era un milagro, decidió contarle a Marcel primeramente la noticia, esperaba que su familia se lo tomara a bien
- Marcel tenemos que hablar de algo importante - mencionó la rubia suspirando y mirándolo a los ojos directamente
- Claro que si mi amor, de que quieres hablar, soy todo a oído - Marcel miraba como su amada ponía algo de salvia lo cual se alarmo le iba a decir algo que no quería que nadie escuchará, lo cual le llamó la atención
- Estoy embarazada - soltó la rubia
- Me estás hablando en serio, como que embarazada no se supone que nosotros no podemos procrear o me estás haciendo un tipo de broma - mencionó el pelinegro
- Claro que no, no es ninguna broma, al principio también me espante no es como que nosotros nos enfermáramos tuve que acudir con una bruja, ella me explicó que en una noche llena de magia todo puede ser posible y esto fue el resultado de nuestra noche, tenemos que contarles a mis hermanos -
- Estoy contigo siempre mi rubia, te apoyaré en todo lo que necesites, claro vamos a contarles -
Rebekah fue a llamar a sus hermanos para contarles la noticia aunque aún no sabía que hacer osea como iban a reaccionar
- Los llame a todos aquí, porque necesito contarles algo que sucedió, bueno últimamente me había sentido algo cansada no es como que nos enfermemos -
- Que tienes ya te sientes mejor hermana - mencionó el original Elijah
- Claro ahora que lo se si, aunque es un poco abrumador la noticia, bueno fui con una bruja a saber que era lo que tenía, me dijo que estaba embarazada -
- Tú embarazada hermana, nos estás tirando una broma cierto - mencionó el todavía no híbrido
- Claro que no hermano, al principio yo también me asusté pero me explicaron que en una noche en dónde está llena de magia todo es posible y ahora este fue el resultado, espero que ustedes mas que nadie me comprendan y apoyen, saben que siempre quise ser madre pero ser un vampiro no me lo permitía, pero ahora esto es un milagro una nueva esperanza a nuestras vidas -
Cuatro años más tarde
Rebekah sostenía a su hija en brazos, observando con amor cada pequeño detalle de su carita, como si nunca pudiera dejar de admirarla. Sarah Gerard Mikaelson no solo era el tesoro más preciado de sus padres, sino también de toda la familia Mikaelson
Desde su nacimiento, Sarah había traído un cambio profundo en todos. Lo que antes eran corazones endurecidos por siglos de traiciones y sufrimiento, ahora se ablandaban por las risas y sonrisas de una niña que representaba lo que más les había faltado: inocencia y una nueva esperanza
Elijah, siempre el protector, había encontrado una nueva razón para mantenerse firme, mientras que Kol, con su espíritu rebelde, se había vuelto sorprendentemente cariñoso, encontrando en Sarah una hermana menor a la que proteger. La familia, rota por tanto tiempo, comenzaba a sentirse más unida que nunca
Sarah no solo era una luz en sus vidas, sino también el eje que los mantenía unidos, recordándoles lo que realmente importaba. Klaus, quien siempre había sido el más solitario y calculador, encontró en su sobrina una razón para cambiar. La pequeña, con su sonrisa traviesa y mirada inocente, fue capaz de romper las barreras que ni siglos de lazos familiares habían logrado derribar
Incluso comenzó a buscar la aprobación de sus hermanos y, por primera vez en mucho tiempo, se sintió parte de algo más grande que su ambición personal. Fue ella quien lo llevó a despertar a Finn, su hermano mayor, tras haberlo mantenido apartado por tanto tiempo, porque Sarah merecía crecer rodeada de amor y estabilidad. Y aunque Finn había rechazado durante mucho tiempo su vida inmortal, el saber que una pequeña Mikaelson lo esperaba con los brazos abiertos le dio una razón para quedarse, a pesar que algo en el ocultaba, tenía miedo por aquella promesa que había hecho Dahlia a su madre sobre todos los primogénitos, sabía que tenía que decirles la verdad a sus hermanos sobre su hermana Freya lo que le sucedió, si era necesario él protegería con todas las fuerzas a su sobrina
El hogar de los Mikaelson, que en otros tiempos había sido escenario de rivalidades, intrigas y desconfianza, se había convertido en un refugio de risas infantiles, conversaciones sinceras y una paz que no conocían desde hacía siglos. Rebekah, siempre deseosa de una familia propia, encontró en sus hermanos un apoyo inquebrantable para criar a Sarah
Juntos, compartían las responsabilidades y los pequeños momentos: desde ver a Sarah dar sus primeros pasos, hasta escucharla balbucear palabras que llenaban la mansión de vida. Los desayunos, antes solitarios, ahora se compartían alrededor de la mesa, con Kol haciendo bromas, Elijah y Finn discutiendo pacientemente sobre los libros que le leía a la pequeña. Klaus, quien solía ausentarse, ahora pasaba más tiempo en casa, observando cómo Sarah se convertía en el pegamento que los mantenía unidos. La niña les había enseñado lo que significaba ser una familia, algo que nunca habían tenido de manera genuina
Pero siempre cuando todo estaba en paz y armonioso tenía que suceder algo, la felicidad que por muchos años les costo a la familia Mikaelson de nuevo fue amenazada, no solamente por Dahlia que ya sabían toda la verdad, si no que una noche Sarah Gerard Mikaelson desapareció nadie sabe lo que ocurrió con ella, toda la familia se volvió loca queriendo encontrarla, se desesperando tanto, hasta que un día descubrieron que ella había muerto, alguien había matado a la niña mas linda y genuina, no sabían lo que había pasado con ella hasta que encontraron un collar en un incendio Rebekah se culpo tanto por no hallar a su chiquita que su humanidad se apago, había sufrido meses por ella y ahora descubrir que había muerto la volvió loca
Lo que nadie se esperaba es que en realidad ella no se encontraba muerta, alguien o más dicho varios fueron causantes de su desaparición, Katherine Pierce, había sido perseguida por el tío de Sarah Klaus, lo cual había matado a su familia y todo por venganza contra ella, cuando supo que ellos ahora habían cambiado y bajado la guardia decidió secuestrar a la niña, bueno mando a dos de sus secuaces Stefan Salvatore y Damon Salvatore, la mantuvieron en un cautiverio haciéndole la vida imposible, hasta que logró ella escaparse de Katherine
Una nueva historia llena de drama algo así, no se hasta donde me llevará está historia, en si espero que les guste, en si se me ocurrió hace unos días pero no había podido todavía iniciarla, tengo tantas cosas en mi mente con historias así que poco a poco iré actualizando algunas de ellas
Primero capítulo, que les pareció

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Revenge Is Sweet
FanfictionLa vida de Sarah Gerard Mikaelson, da un giro inesperado cuando es secuestrada por uno de los enemigos de su tío, es llevada muy lejos de su familia, lo único que busca más adelante es venganza, cuando ella logra escapar de Katherine Pierce, han pas...