¡Batman es mi papá!

02. Soy yo

Colegio Universitario de Gótica, Ciudad Gótica, 7:30 hrs

Las lágrimas no tardaron en escurrir por sus mejillas.

— Alejandra... — murmuró, sentía su corazón comprimirse, ella era su mejor amiga y ahora ni siquiera lo reconocía, dolía, le dolía demasiado. Era como comenzar de nuevo.
Minutos después de calmarse, entró al colegio, ya era bastante tarde y apenas le dejaron pasar al salón.
Los alumnos le miraron atentos, era algo incómodo que le observaran, Dann bajó la mirada y tomó asiento hasta la parte de atrás.
El profesor se quedó extrañado por el comportamiento del joven Kent-Wayne, normalmente se mostraba como alguien egocéntrico, extrovertido e incluso rebelde, pero ese día se le veía distinto. Como si no fuera él...

La clase transcurrió de manera normal, o al menos así fue para los demás; Dann seguía pensando en lo que había pasado más temprano y el día anterior a ese, ¿Cómo había llegado ahí? ¿Por qué todos le veían como un bicho raro? ¿Quienes eran los que estaban "mal"? ¿Él o los demás?
Esas y muchas más dudas surgieron en su cabeza, normalmente él pensaba y nunca actuaba, sin embargo, era diferente esta vez, necesitaba de sus amigos. Ellos debían ayudarle a saber que estaba sucediendo.

Una mano en su hombro lo despertó de su trance, volteó a ver y era el profesor.

— Joven Kent, la clase acabó ya — dictó aquel hombre de piel morena, el azabache miró a su alrededor y cuando no vió a nadie se levantó de inmediato

— Lo siento profesor... — intentó recordar el nombre de aquel docente, cuando el mismo fue quien lo completó

— J'onzz, Doctor o Profesor J'onzz — le dijo, Dann se quedó perplejo, ¿su maestro era el Detective Marciano?, para no cargarla asintió y rápidamente salió en busca de sus amigos — Creo que este no es nuestro Dann— murmuró para sí mismo el marciano, una vez que el adolescente salió de su visión.

La siguiente clase era de deportes y Dann aún no tenía el uniforme puesto, por "sentido común", fue a donde se encontraban los vestidores, al llegar chocó con un chico, sin camisa, de piel blanca - algo bronceada - de cabello castaño y ojos cafés, tenía rasgos asiáticos y de su cuerpo, ni hablar. Él era completamente su tipo. Tenía unos grandes pectorales, unos brazos fuertes y un abdomen algo marcado. Avergonzado por la situación se disculpó y buscó su casillero de prisa para cambiarse de ropa e ir en dirección al gimnasio.

El profesor de deportes había llegado, por lo que se estaban asignado equipos para un juego de baloncesto, en lo cual Dann era horrible, en general, no servía para ningún deporte. Luego de prestar atención a todas las condiciones y no entender nada, el profesor dió inicio a la clase.

— Bien, comienza Kent — el viejo tiró el balón a Dann, quien apenas pudo tomarlo en sus manos.

¿Qué se supone que tenía que hacer? No conocía a ninguno de los chicos que conformaba su equipo, por lo que cuando uno pidió el pase, se lo dió para que corriera a la canasta de los oponentes...
Al final del juego, el equipo de en que estaba Dann perdió, él recibió varios balonazos en el rostro, lo penalizaron por viola, anotó dos veces en su propia canasta y parecía tener dos pies izquierdos, pues se cayó al piso más de una vez.
Los chicos, sus "amigos", que estaban en la misma clase de deportes, habían estado observando todo el partido, "Que patético" pensaron al ver al azabache ser un completo desastre en el juego.

— Estoy comenzando a dudar si de verdad es Dann, — dijo el moreno

— Concuerdo, se ve demasiado estúpido — comentó el azabache

— Pero estúpido en el buen sentido, ¿no? — preguntó la chica bajita el azabache se quedó callado y acomodó sus lentes — Axel...

— Mira, en mi defensa, Dann no era tan estúpido como lo es ahora en los deportes, parece que nunca ha tocado una pelota en su vida — se cruzó de brazos mientras sus amigos le miraban