𝑿𝑿𝑽𝑰𝑰

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Ya habían pasado los meses y en medio de tu embarazo los tres hombres te trataban como si fueras de la realeza, cuando dijeron que no te dejarían hacer ningún labor hablaron enserio. Shinichiro te cumplía tus antojos incluso si fueran a las 3am.

Todos sus amigos y familiares los visitaban a cada rato, tu mamá se la pasaba dándote consejos como cremas que te ayudarían y demás. Sota y Enzo aún no se lo creían, una parte de ellos aún no procesaba que en un abrir y cerrar de ojos estabas casada y a punto de tener un hijo.

T/h fue el que más se enojó, amenazo a shinichiro pero de igual forma te felicito por tu embarazo, si contigo era celoso con el futuro bebé sería más. Yumi y Tamayo estaban más que felices, incluso te llevaban juguetes y demás.

...

Pasaron los meses y el bebé nació, fue un hermoso Niño. Estabas en el hospital con tu bebé en brazos mientras esperabas a los tres hombres. Shinichiro en cuanto lo vio comenzó a llorar.

Izana: Dios que bueno que salió a su madre-

T/n: Jajaja, Izana ¿No lo quieres cargar?-

A Izana se le iluminaron los ojos por completo, claro que quería, pero tenía miedo ya que él nunca había agarrado en brazos a un bebé. En cuanto Izana lo cargo le empezaron a salir lágrimas, Shinichiro, Kakucho y tú rieron por esto.

Kakucho: Apúrate, yo también lo quiero agarrar-

...

Pasaron los meses y el bebé era el consentido de todos, incluso tú madre te pedía que se lo prestaras unos días para cuidarlo, lo cual aceptabas con mucho gustos, tener un bebé era cansado, pero tener familia que te apoyara lo hacía menos.

¿Que pasó con Goyo? Nunca más supieron de él, lo último que escuchaste fue que se regresó al extranjero. ¿La empresa? Pues ahora eras jefa y madre, era muy estresante pero tu esposo te ayudaba con muchas cosas del hogar, y ni se diga Izana y Kakucho, hasta habían aprendido a cambiar pañales. Eras feliz, sin duda no podías pedir más.

...

Pasaron los años y Izana ya no vivía con ustedes ni Kakucho, habían crecido y habían hecho su propia empresa. Lo admitías, no querías que se fueran de la casa, lloraste mares junto con tu hijo.

Izana: Tranquila mamá, vamos a venir siempre que podamos— te abrazo

Kakucho: Adiós Ichiro, pórtate muy bien y obedece a mamá— le sobó la cabeza

Ichiro: Ya estoy grande Kaku, no hagas eso— se quejó sonrojado

Kakucho: Que dices jajaja, solo tienes 4 años tonto-

...

Y así pasaron los años y años, estabas en la computadora concentrada, hasta que una voz te interrumpió.

Hoshi: Mamá, ¡el tío Mikey se comió mi postre!-

Mikey: Oye hoshi pensé que éramos amigos-

T/n: Jajaja, déjalo no pasa nada, luego te puedo comprar otro-

T/h: Vamos hoshi... te voy a comprar otro— dijo para darle un golpe a Mikey y caminar a la puerta

La pequeña Hoshi solo tenía 5 años. Ichiro ya tenía 11 años, el se la vivía acompañando a su padre al taller, le encantaban las motos, que casualidad.

Hoshi era la consentida de sus tíos, T/h, Izana, Mikey, Emma, Kakucho, Sota y Enzo, la trataban como una princesa y hasta se dejaban maquillar por ella, Hoshi era una niña muy inteligente, ella sacó el color de ojos de su padre, pero siempre que se enojaba tenía la misma mirada que tu, le encantaba robarte el maquillaje y maquillar a su familia.

En cambio T/h era un Niño más despreocupado y que se la pasaba con sus amigos o en el taller de su padre, tenia un poco de shinichiro y un poco de ti, de shinichiro saco la pasión de las motos, y de ti su forma tranquila y madura de ver las cosas. Era un niño angelical, aunque aveces se metía en problemas con sus amigos, era un niño muy tranquilo y educado, se podría decir que era un mitsuya. No era mucho de contacto físico, eso lo sacó de ti, pero no podía esquivar los abrazos y besos de su abuela materna. En el fondo le agradaba pero no lo admitía.

Así era tu familia, Shinichiro y tú ya tenían sus vidas hechas, y estaban más que conformes con estas. También Shinichiro era muy celoso con los amigos de Hoshi, no podía permitir que a su princesa le rompieran el corazón.

Shinichiro: Bien ya terminamos con la moto Ichiro-

Ichiro: Papá ¿Amas mucho a mamá?-

Shinichiro: Por supuesto Ichiro, tú madre fue mi primera y única novia-

Ichiro: Cuando sea grande me gustaría tener una pareja con la que me ame igual como tú y mamá se aman— dijo con su típica mirada tranquila

Shinichiro: Ya verás que la encontrarás— le sonrío

Ichiro: Claro si es que llegó a tener... pero la verdad no me interesa mucho una relación-

Shinichiro: Eres idéntico a tu madre— se levanto y le sobo la cabeza— ella decía lo mismo. Solo tienes que esperar a la persona que correcta Ichiro— empezó a caminar

Ichiro solo vio como su padre se iba, se paro del suelo y fue a su lado. Shinichiro estaba esperando a Ichiro en la moto, en cuanto se subió se aseguró de ponerle el casco.

Ichiro: El casco es incomodo-

Shinichiro: Si no te lo pones tú madre me matara-

Ichiro solo río. Al llegar a la casa vieron a Hoshi comiéndose un postre felizmente en el comedor mientras T/h y Mikey estaban peleando en la sala. Shinichiro solamente suspiró al verlos y Ichiro sacó una leve risa.

Shinichiro fue a abrazarte en forma de saludo tú correspondiste felizmente

Shinichiro: ¿Ya estás menos estresada?-

T/n: Gracias a Dios ya termine... es un estrés menos— le sonreíste

Shinichiro: Me alegra porque en la noche te quiero llevar a un lugar muy hermoso-

Llego la noche y te arreglaste para salir con Shinichiro. Este te llevo al mismo parque donde te había pedido ser su novia y esposa.

T/n: Ya hace mucho no veníamos aquí— sonreíste

Shinichiro: Por eso te traje, estaba pensando en llevarte a un restaurante elegante, pero preferí este lugar por los recuerdos-

T/n: A donde sea que me lleves estaré feliz amor-

Tendieron un picnic y empezaron a ver el cielo estrellado, sin duda ese lugar había marcado muchos recuerdos hermosos e importantes de ustedes.

Shinichiro: Te quise traer aquí porque hace mucho tiempo no te invitaba a algo nosotros dos solos-

T/n: Bueno solo a pasado un mes, pero tienes razón llevamos algo de tiempo sin salir solos-

Shinichiro: Por eso te traje aquí, quiero que sepas que a pesar de que ya seas mi esposa y madre de mis hijos yo jamás voy a dejar de querer enamorarte, siempre haré mi esfuerzo para que te enamores más de mi. No quiero ser el tipo de hombre que cuando ya estás casados pierden lo detallistas porque ya enamoraron a la mujer. Quiero enamorarte todos los días de mi vida y que envejezcamos juntos perdidamente enamorados-

T/n: Shinichiro Sano yo jamás dejaría de amarte, eres el amor de mi vida y la única persona con quien quiero estar hasta el día de mi muerte-

Shinichiro: Te amo T/n-

T/n: Yo también te amo Shinichiro-

Dijeron eso para darse un cálido beso en los labios. Sin duda Shinichiro era el amor de tu vida y nada cambiaría eso, amabas a ese hombre al punto de dar la vida por el. No podías ser más feliz.














𝑭𝑰𝑵...

Noviazgo falsoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora