Diez

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Yoongi.

 Dure cuatro horas en una sex shop hace como tres días, pregunte como mil cosas de los lubricantes, la mujer que me atendió me tuvo mucha paciencia pues le explique mi nada experiencia en el sexo con hombres, por lo que le pedí que si decía algo idiota me lo dijera.

Termine comprando como diez botellas diferentes y cajas de preservativos, Minnie nunca ha estado con nadie, pero el que padece virgen soy yo. Estoy nervioso de arruinarlo en cierta parte.

—En verdad es sorprendente —mira dentro de la mochila — son demasiadas botellas.

—¿Estas burlándote? —lo empujó a la cama y me subo encima — solo quiero que esto lo disfrutes —beso su cuello.

—Yoon—sus dedos se metieron en mi cabello mientras seguía bajando por su cuello hasta las clavículas —yo confío en ti.

—Eso es bueno —muerdo la piel y gime —Porque estoy teniendo tanto autocontrol, estoy desesperado por poseerte.

—No te controles, por favor.

En cuanto pronunció esas palabras, me puse de rodillas sobre la cama para quitarme la camisa, me observo y sus mejillas se encendieron, no puede ser más adorable, baje para desnudarlo  también.

—Abre bien las piernas Jimin —me chupe dos dedos —Debo dilatar ese estrecho agujero tuyo…

Jimin.

Es imposible, no pensé que fuera a ver más sexy, pero verlo lamer así sus dedos fue terrible para mi autocontrol, su cuerpo está marcado por el deporte, aunque sea delgado sus músculos se notan bastante y tiene un tatuaje por todo el pecho, la vez pasada lo note pero hoy lo hace lucir amenazante con su aura de depredador.

Tomo una de las botellas de lubricante y que esparció en medio de mis nalgas, tome mis muslos para separarlos, me daba mucha pena estar así tan expuesto, pero el me veía con tanto deseo que haría lo que me pidiera.

—Eres tan perfecto Jimin —la punta de sus dedos rodeaban mi entrada —relajate y si duele me dices —Esta siendo demasiado considerado y hace que mi corazón lata más rápido.

Lamio entre mis muslos, hasta llegar a mi miembro, lo metió en su boca con tranquilidad al mismo tiempo que sus dedos se hundian en mi interior, es un poco molesto pero no me duele mucho, mi concentración esta en su lengua qué lame mi tronco hasta la punta.

Me aferre a las sábanas con ambas manos,  las succiones subían de nivel, hasta que doblo sus dedos dentro de mi y mis gemidos se convirtieron en un grito ahogado de placer.

—¡Yoon! ¡voy a correrme!

Intente apartar su cabeza, pero entre más movía los dedos menos fuerza tenía, no resistí mucho vaciándome en su garganta. No hizo caras de asco, al contrario al alzar la cabeza su lengua paso por sus labios en un movimiento lento, como si hubiera comido algo delicioso.

—Esto es estimulante —saco los dedos y me mostro tres llenos de lubricante —Supongo que no sentiste los tres.

Jugo con la viscosidad del lubricante, para quitarse el pantalón, tomo un paquete de condones.

—Tu mi lindo Minnie —abrió el condón para ponerlo en lento sobre su erección  —vas a montarme, a tu ritmo, porque de la manera en que deseo follarte aun no se puede, tomaras el control, hasta que sientas que puedo destrozarte querido.

Like a Virgin (Yoonmin +18)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora