°•Windsor•°

°•El comienzo•°

~Nos volvemos a cruzar, no es así lector? Que bueno que hayas decidido parar un tiempo y leer esto, prometo que no se arrepentirá al haberme elegido, vamos a darle un comienzo a esto...1 de enero de 1820, un nuevo año para todos, en especial los Windsor, su preciada y exigente reina amanece como cada día al frente de su ventana con...el mismo y aburrido té de siempre, esperando a oír lo que su gente tiene para contar.~

~Por otro lado, sus dos hijos todavía no despertaban, o eso es lo que su madre creía, en una habitación bastante ordenada pero algo rara se encuentra Alexis, el hijo menor por un año de Katherine, la reina, el es un chico...para nada callado, más bien todo lo contrario, tiene algo y es no importarle lo que la sociedad opine de él y toda su herencia junta, al ser el heredero debería de importarle la mínima cosa pero, al parecer no, quien somos para juzgar? Al menos se divierte en su mundo...
El príncipe se alistaba, ordenando su cama, colocándose un moño en su traje algo desordenado pero formal y finalmente saldría de su habitación para tocar la puerta de su hermana varias veces haciendo ruido apropósito, del otro lado estaba Samantha, una chica callada y observadora, su paciencia no era la mejor pero su hermano lograba sacar un lado de ella jamás visto, y es que como era posible que un hombrecito de esa edad tenga ese comportamiento...~

-¡Alexis Windsor! ¿Puedes por un segundo no ser una molestia?

*Samantha exclamaba mientras abría la puerta dejando ver su cara de irritación, Alexis seguía con sus risitas mientras colocaba una mano en su cintura*

-Agradece que tienes algo divertido en tu vida, alistate, mamá seguro querrá dar un paseo por ahí como todos los días.

*Al terminar de hablar Alexis bajaba las escaleras para ir con su madre mientras que Samantha suspiraba y se alistaba, esta vez dejaría su corsé a un lado e iría con un simple vestido bordado.
Con fastidio bajaba las escaleras mientras se dirigia con su madre y hermano que ya la estaban esperando, la reina pidio un carruaje y se subieron a este*

-Otra vez vamos a caminar por ese aburrido lugar? Todos miran y juzgan. *Dijo a lo bajo Alexis cruzándose de brazos, su madre lo miró y suspiro*

-Nada de berrinches hoy, ninguno de los dos, no quiero ni verlos pelear, ¿queda claro?

*Ambos hermanos se miraron para asentirle a su madre, no prometían nada ya que eran como perro y gato.
Al llegar al lugar la familia bajó del carruaje para ser bienvenida por los pueblerinos, todos observaban con admiración, algunos con envidia, las calles estaban algo llenas, de la nada alguien de la multitud tropieza cayendo enfrente de la reina, Katherine abre sus ojos y observa hacia abajo*

-Por todos los..., cuidado por donde vas!

*La persona se levanta y se inclina rápidamente al darse cuenta de lo que estaba pasando...*

~Alto, alto..., antes de seguir con esto hay que hacer una pausa ¿No? Hay mucho más por delante, como sus personajes e historia, pero, como dice el dicho...todo a su tiempo, esta autora no tiene mucho de él pero hará todo lo posible por ustedes, con esto dicho, hasta no muy pronto~