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El Omega miraba con desespero las prueba de embarazo delante de el.
Y es que cuando ambos cayeron en cuenta de lo que habían descubierto, se preocuparon, sobre todo el Omega, un cachorro era algo que no podía ocultar además apenas estaba conociendo a su alfa, sería demasiado para el.
Mientras el alfa estaba nervioso por la mirada que le daba el Omega, todo era su culpa, sabía que el Omega no estaba del todo consciente y aún así no se protegio, que imbécil...
- Toma una y yo otra, la tercera la vemos al mismo tiempo ¿Bien?
El alfa asintió tomando la prueba.
– A la cuenta de tres, uno, dos, tres...
Ambos voltearon las pruebas, dieron un gran suspiro al ver el resultado.
– ¿Que dió la tuya?- Preguntó el alfa.
– Negativo ¿Y la tuya?
– Negativo.
Ambos sonrieron dejando las dos pruebas azules a un lado y voltearon la última prueba de color rosa.
Positivo
Ambos se miraron con dudas.
– Dos son más que una ¿No? Supongo que no son del todo confiable.- El Omega asintió dejando la prueba rosada a un lado junto a las otras.
– Aun así fuiste un irresponsable ¿Te imaginas que yo hubiera quedado embarazado? Sería un desastre Hoseok.
– ¿Tan malo sería?
– ¡Por supuesto! ¿Que le diría a Arin?
El alfa lo miro incrédulo.
– Incluso en esto la pones primero en este caso... Eres increíble.
El omega dejo de sonreír de alivio y miró a los ojos al alfa.
– Yo...Es que...Ya es complicado decirle que eres mi alfa... Entonces un cachorro...Bueno, no quiero verla herida ¿Sabes?
– Pero si puedes herirme a mi, ocultándome y diciéndome que no quieres un cachorro conmigo porque te importa más ella.- El alfa sonrió con ironía.
–¿Que? Estás sacando todo de contexto, no quise decir eso.
– Claro...- El alfa tomó las pruebas y camino a la cocina arrojandolas a la basura, mientras el Omega lo seguía.
– Estás molesto...
– No.
– Tu olor empieza a tornarse agrio, claro que lo estás.
El alfa bufo, saliendo de la cocina para tomar su abrigo y mochila.
– ¿A dónde vas?
– A mi departamento, tengo un trabajo que hacer.- Su voz era temblorosa, sentía nervios y su corazón latía muy rápido.
El no quiere tenerte como alfa.
Se repetía una y otra vez
– Puedes hacerlo aquí...
– No quiero hacerlo aquí, además tu amiga puede venir y sería un horror que nos viera aquí juntos.- Dijo moviendo sus manos de manera dramática.
– ¿Que dices? ¿Que te pasa?
– Nada Taehyung.- Se acercó para dejar un beso en la frente del Omega, pero este tomo sus manos.- Debo irme Taehyung...
– No te vayas Hoseok...
– ¿Quien te entiende? Quieres que me quedé, quieres estar conmigo, pero al mismo tiempo quieres mantenerme como un secreto, oculto de todos. ¿Piensas que eso esta bien?
– Me diste una semana.
_ ¿Y tú se lo dirás Taehyung? ¿Enserio lo harás? Porqué sinceramente no lo creo.
Se soltó del agarre del Omega con cuidado, para empezar a caminar hacia la puerta.
– Hoseok...
– Nos vemos en la universidad.
El alfa cerró la puerta después de salir, haciendo que el Omega se sintiera mareado por estar tan abrumado.
No sé sentía bien que Hoseok y el quedarán de aquella manera.
Mientras el alfa salía del edificio directamente a su auto, no se percató que la Omega venía entrando.
Porqué estaba tan concentrado en no perder la paciencia y cordura ante el rechazo de su propio Omega.
La Omega se escondió viendo como se montaba e iba del lugar, entonces supuso que venía del departamento de Taehyung, sus manos se apretaron en un puño y fue directamente al departamento de su "amigo"
Tocó el timbre varias veces, hasta que su amigo abrió la puerta, inmediatamente el olor mezclado del alfa y de su amigo la azotaron con fuerza, pero hizo como si no hubiera olido absolutamente nada.
– Hola Tae ¿Cómo estás?
– Arin, pasa...- el Omega empezó a ponerse nervioso, era consciente que el olor del alfa estaba por todo el lugar.- ¿Que te trae por aquí?
La Omega miraba todo el lugar como si buscara algo.
– No fuiste a la uni y quise saber si todo estaba bien.- Volteó mirando de frente al Omega.
– Me sentía un poco mal y me quedé aquí.
– Oh...¿Que te pasa? ¿Estás mejor ?
– Si si, estoy mejor.
La Omega miro al sofá, un bote de helado estaba en la mesa del centro y también habia un poco regado en el suelo.
El helado de fresa...
– ¿Estabas acompañado?- Preguntó mirando nuevamente al Omega.
– Uhmm, le pedí a Hoseok que le dijera al profesor y vino hace rato a ver cómo estaba, pero se fue hace rato.
Ella lo acaba de ver saliendo
– Oh claro...- Puso una cara triste que alarmó al omega.
– ¿Que sucede Arin?
– Hoseok ya no me quiere Tae.
El Omega tragó grueso.
– ¿Por qué dices eso?
– Tiene un Omega nuevo.
Taehyung empezaba a sentirse nervioso y su lobo empezaba a gruñir.
– ¿El te lo dijo?
– Si, pero ¿Sabes? Averiguare quien es ese Omega y te juro que lo haré pedazos, si ese alfa no es para mí no será para nadie más.
Taehyung podía jurar sentir la mirada de la Omega intensa sobre el entonces, pasó algo que nunca vio venir.
Su lobo le gruño tan fuerte a la Omega que incluso ella pudo oírlo.
Estaba marcando territorio.
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