La feria de la plaza abría sus puertas en el inicio del festival de verano de Berlín, donde las atracciones de juegos mecánicos eran el centro de atención de los más jóvenes. Allí se citaban para divertirse, y las parejas paseaban tomados de las manos, ya sea comiendo un helado o simplemente charlando de su día.Thai, de diecisiete años, no era la excepción. Como típico joven guapo, siempre estaba rodeado de niñas hermosas y coquetas esperando que las eligiera para formar una relación. Pero todo lo que quería Thai no era una niña. Desde que comenzó a sentir atracción por alguna persona, siempre fue hacia los hombres. Lamentablemente, en el pueblo de Waldhügel, sus habitantes eran muy tradicionales, de familias según su educación "normales", y no era bien vista la homosexualidad en todas sus matices.
Claro, había parejas del mismo sexo, pero debían pasar bajo perfil para no ser la comidilla o algo mucho peor: el escarnio público. Thai lo sabía. Sus padres habían escogido especialmente ese lugar para criarlo junto a sus abuelos veteranos militares, que orgullosamente se mofaban de ser "normales" y vivir una vida sin pecados. Pero eso a Thai le importaba muy poco. Y apenas conoció a Zackary, de dieciocho años, se centró en conquistarlo, a pesar de que él temía represalias en su contra.
Fue difícil, pero no imposible. Y después de dos años de relación, aún seguía bajo el título de mejores amigos, pero a los chicos no les importaba, con tal de seguir su noviazgo en paz.
Caminaban juntos a la par de unas chicas que eran sus citas para poder divertirse en la feria, pasando desapercibidos en el ojo indiscreto de los lugareños.
-Entremos a la casa del terror -dijo Cindy, jalando a Zackary hasta el encargado de los boletos. Le dieron los dos pases por persona y entraron, encontrando monstruos y sustos improvistos que hacían a las chicas gritar de miedo.
Cuando llegaron a la zona de los espejos, las chicas se entretuvieron haciendo caras graciosas en los espejos de aumento. Thai jaló a Zackary por un pasillo para salir por la puerta trasera, donde estaba solitario, dando hacia el bosque.
-Por fin solos -dijo Thai, acercando su anatomía al cuerpo delgado y sexy que poseía Zackary. -Te he extrañado, Zack -susurró, besando los labios de su pareja y apoyándose en la pared para tener control sobre el beso, que no era nada tierno y era deseoso, pero torpe por ser inexpertos.
-Yo también, Ty. No puedo seguir comportándome contigo como si fuéramos simplemente amigos. Estoy cansado de todas estas personas que no nos aceptan por el simple hecho de que decidimos amar a alguien del mismo género.
-Lo sé, Zack. Solo falta un año y me podré ir contigo. Apenas cumpla los dieciocho, seré libre.
-Y yo te esperaré, Ty. Siempre te esperaré.
Las bocas de nuevo se encontraron en un beso más apasionado. Las manos inquietas de Thai subieron por debajo de la camisa de Zackary, que era puro gemidos roncos. Pero un ruido secó los hizo parar, mirando de dónde provenía.
Una fuerte pelea se escuchaba dentro del bosque, y caminaron para mirar qué ocurría. Se escondieron atrás de unos matorrales y vieron desde arriba cómo abajo, justo en la carretera que conducía a otro estado, había un grupo de hombres vestidos de negro y cubriendo sus rostros con capuchas negras. En la mitad, había dos personas de rodillas ante ellos, visiblemente golpeadas. El chico protegía a la chica, abrazándola con su cuerpo para que no recibiera más golpes, mientras que esta lloraba.
-Vámonos de aquí -pidió Zackary, temeroso, pero Thai lo jaló de nuevo.
En esa distracción, los hombres habían sacado sus armas y ahora les apuntaban, mientras que estos suplicaban por sus vidas. Todos ellos se quitaron sus capuchas para mejor visibilidad, y los chicos pudieron ver sus rostros, cuando comenzaron a vaciar un auto y llenar otro que seguramente era de los hombres de negro.
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𝕂𝔸Я𝕄𝔸: ҽɳƚɾҽ ɱҽɳƚιɾαʂ [𝐌𝐮𝐲 𝐩𝐫𝐨𝐧𝐭𝐨 ➣]
Romance𝐸𝑙𝑖𝑝𝑠𝑜𝑛 𝐾𝑎𝑝𝑝𝑎 𝑙𝑎 𝑓𝑟𝑎𝑡𝑒𝑟𝑛𝑖𝑑𝑎𝑑 𝑞𝑢𝑒 𝐽𝑜𝑟𝑔 𝑦 𝑆𝑖𝑚𝑜𝑛𝑒 𝑒𝑠𝑐𝑜𝑔𝑖𝑒𝑟𝑜𝑛 𝑝𝑎𝑟𝑎 𝑞𝑢𝑒 𝑝𝑒𝑟𝑡𝑒𝑛𝑒𝑐𝑖𝑒𝑟𝑎 𝑠𝑢 𝒉𝑖𝑗𝑜 𝑇𝑜𝑚... 𝐹𝑢𝑛𝑑𝑎𝑑𝑎 𝑐𝑜𝑛 𝑣𝑎𝑙𝑜𝑟𝑒𝑠 𝑢𝑙𝑡𝑟𝑎 𝑐𝑜𝑛𝑠𝑒𝑟𝑣𝑎𝑑𝑜𝑟𝑒𝑠, �...